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Un año de la novela con 30K .... 4/4  

Quite mis zapatos caminando por el frió suelo hasta llegar a la grama sacudiéndolo para sacar una piedra que molestaba.

Las luces de la casa estaban prendidas pero era algo extraño porque kennedy salió con scott y yo estoy segurisima que apague todas las luces de la cada.

Unas sombras se movieron por los lados de la ventana, texteo un mensaje rápido antes de entrar y encontrarme con algún ladrón.

Termine de subir los últimos escalones y con la copia que tenia abrí la puerta de mi casa encontradome con una escena diferente.

Mi padre, una mujer y dos jóvenes ocupaban los muebles de la sala con varias maletas regadas al rededor, sabia de su visita por la carta formal que mando pero no sabia que seria tan pronto.

-¿donde estabas, Mackenzie? Que son estas horas de llegar -reclamó,eran las cuatro de la mañana y había echo horas extras en el trabajo para obtener una mejor paga pero el no estuvo en mucho tiempo como para enterarse de algo así o tal vez si lo sabia por la poca actividad de la extensión de sus tarjetas y otras cosas.

De reojos examine las caras extrañan que ahora ocupaban mi casa-eso no te importa- tire los tenis en el pasillo, la mujer me miro con desaprobación.

Esperaba que me dijera algo sobre lo ocurrido para ponerla en su lugar pero no sucedió. - si te pregunto es porque me importa.

-no te importo mucho para dejarme- me aparte de ese intento de familia pintada en un cuadro.

-cuando vas a entenderme, podemos ser una familia- suavizó el tono de su voz en un intento fallido de calmarme, asi que yo odiaba que me hablara asi, como a una idiota pero tal parece que lo olvido.

- no quiero,mi familia se rompió cuando mama murió y tu decidiste refugiarte en el trabajo- asintió para si mismo mirando la mujer detrás de mi y luego dirigió su mirada de vuelta a mis ojos.

-Mack

-lárgate con tu mujercita e hijas, ¿no es eso lo que quieres?

Llevo las manos a su pecho-quiero a mi Prinzessin de vuelta

-¿de vuelta? Nunca cambie, soy la misma

-no lo es, está siendo tan irracional -tiro de los cabellos rubios de su cabeza en desesperación y enojo.

-pues vete  a vivir con tu puta

-te estás pasando, Mackenzie-me regaño apretando la mandíbula- esta es mi casa y ella se queda te guste o no.

-me importa muy poco, esa zorra que se metió con lo único que me quedaba.

-A ella la respetas en mi casa- Un golpe volteo mi rostro, lleve la mano a mi mejilla sintiéndola muy caliente y un dolor,  un sonidos de asombro se escucho tras el impacto. El rostro de mi padre se transformó de inmediato con culpabilidad, Lo había hecho, me había golpeado. –Cariño yo ...–se acercó tratando de tocarme, lagrimas rodaron por mis mejillas y me aleje de su toque.

-no me toques, Helmuth, eres mi padre, pero nadie tiene el derecho a pegarme, ni siquiera tu –quise tirarme al suelo y llorar porque todo había cambiado con unas simples palabras, levante el rostro del suelo y lo mire de pie frente a mí, la respiración se me volvió más pesa – Y tranquilo, nadie irrespetará a tu mujer en tu casa, me voy- pronuncie alto el pronombre que uso desde un inicio,esto me impuesto a tomar la drástica decisión.

- ¿Qué?- la deceperacion brillo en sus ojos claros con tristeza- No hija, perdóname...- rogó buscando tomar mis manos pero solo consiguió un rechazo.

RAWRDonde viven las historias. Descúbrelo ahora