capitulo 53: entonces todo fue tu culpa?

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Me levanto con el brazo de Jonathan en mi vientre todavía. Si estuviera embarazada de el dios sería un loco.

(...)

Ya han pasado dos días después de la pasarela, volvimos a la casa del presidente solo por una información que necesitamos.

- quieres hablar ?- me dice Jonathan en el jet.

- sobre que ? - busco entre la maleta mis lentes. Me siento a su lado - no tengo nada en mente de que hablar -

- segura?- asiento - y no quieres hablar sobre cuando dormimos ?-

- hay algo que quieras aportar ? - le pregunto y justo suena mi teléfono, lo levanto y es un mensaje.

Eduardo.

Cuando vas a venir ? La empresa se ve sola sin tus regaños de la mañana.
3:08 pm.

Veo a Jonathan y apago mi teléfono. Es el momento de decir la verdad y dejar mis miedos, excusas y ser feliz.

- tu tío me mandó a qué te cuidara de nuevo - dijo el. Ok lo dañas te todo.

- dime qué no es cierto - le digo viéndolo a los ojos.

- no, no es cierto solo quería ver tu reacción - dice riendo.

- si me vas a decir eso mejor sigo viendo mi teléfono pensé que era algo importante - me inclino para agarrar mi teléfono esperando a que me diga algo o no se. Pero nada, bueno que esperaba ? Es el.

Llegamos otra vez a Washington, iremos primero a petición mía a un parque. Necesito tener árboles o algo.

Me concentro en ver el lago y Jonathan hace un ruido para que voltee. Lo hago y el me besa, no sigo el beso porque estoy impresionada. Además esto me es difícil ya que quiero pero ¡No! No voy hacer su amiguita con derechos y yo no sé que más. No soy un juguete. Me separo y veo otra vez Instagram, entro en Google para ver lo último de noticias, lo primero que sale el beso caliente de el presidente conmigo, yo arriba del escritorio de el, mi mejor amigo con las manos en mis muslos, mis manos en sus caderas y el vídeo muestra todo. Hasta cuándo pasa sus manos en mi tracero, luego el vídeo de el con su amiguita.

- ¿ por qué sales con el ? - dice Jonathan en su teléfono, seguro ve lo mismo que yo. Es que soy una mensa de primera.

Me quedo en silencio, sigo viendo la noticia y dice que después de su beso caliente con su "prometida" me "engaña" con la rubia estúpida, luego sale que lo de casa blanca atacada.

- explícate - dice Jonathan. Su frialdad y su mirada de decepción es peor que mil estacas de corazón, me siento en una banca y no doy respuesta, solo...no tengo una...lo hice y listo - habla, no tienes nada que decir ? Ah no estás cansada de las mentiras y es mejor callar - lo veo y tiene una mirada de odio, en este momento me doy cuenta de la verdad.

Todas sus novias son modelos, son perfectas...yo solo soy yo, no tengo lo que necesita. No puedo amar sin amarme a mi misma. Cómo duele.

- todas las cartas, todos los besos, todos los recuerdos te los regreso, las lágrimas ya no valen la pena, toma tus besos te oso regreso, no será fácil olvidarte pero lo haré - le digo y me voy.

Todas las cosas se las regreso, no será fácil olvidarte pero lo lograré, todas las cartas con cada verso.

Llego a la casa blanca y voy directo dónde está mi ex mejor amigo. Lo agarro por el cuello de la camisa.

- me debes más de una y necesito información - le digo en mi etapa de mafiosa.

- cariño como estás ? Oh muy...- saco el arma y le apunto. El abre los ojos y sube las manos, la bajo y me da la computadora - por qué me miras así ?- 

Me han roto tanto el corazón que ya no existe, lo que quedaba se esfumó cuando dejé a Jonathan.

Veo el expediente que necesito, le tomo una foto y salgo de ahí. Camino hasta la salida en la cual siento como alguien se en viene encima, me caigo hacia atrás con el hombre encima. El me agarra y me saca de ahí. Al verlo me quedo paralizada.

- entonces todo fue tu culpa ?- digo al ver su tatuaje. Todo el, todo fue ...más que engañada ahora me siento.

- hola hermosa - me dice, se me lanza encima y quita mi arma, saca mi navaja. Se sube a mi y amarra mis manos y desabroña el vestido color negro con flores rojas, grito pero tapa mi boca, las lágrimas no tardan en salir.

Los guantes negros rozando mi piel...sus labios asquerosos pasar por mi abdomen desnudo....

Con todas mis fuerzas la cuerda se parte en dos, le doy una patada en los bajos, salgo corriendo. Acomodo mi vestido y limpio mis lágrimas. Todo fue su culpa, soy la persona que todos engañan.

Hoy se acaba, soy la mala, la villana, soy maléfica. Nadie me quitará mis alas.

Salgo de la casa blanca, camino por las calles solas de Washington, el caso ya está resuelto. La lluvia y los truenos es lo único que hay.

Me siento en la acera, siento los gotas resbalar por mi cuerpo, los truenos se escuchan más fuertes dejando ver el cielo blanco.

Los recuerdos inundan mi cabeza, La muerte de mis padres, el primer evento con Jonathan, las risas en la cocina con mi hija y Jonathan corriendo con harina, los insultos, golpes que e recibido. Lo feliz de Jonathan con Lily en la inauguración de mi rascacielos, lo feliz de mi hija con Alex, Eduardo trabajando, mis abuelos riendo por un chiste, mi evento con mi vestido entrando y todas las miradas en mi, caminando por la calle con los paparazzi atrás.

Soy la peor persona, no hago cosas buenas no e hago actos buenos, no tengo un buen corazón, no tengo buenos sentimientos...no merezco el amor de los demás.

No merezco ningún tipo de amor.

Las cartas de Jonathan en mi casillero, cuando se fue me enviaba cartas a la empresa, el es feliz con Lily. Los e visto y ambos les brillan los ojos al verse, están enamorados y siguen siendo el uno para el otro. No hay espacio para mí.

Juliette se quedará con una parte de mi fortuna, la otra es para Alex, Eduardo y Francesco. Agarro el arma que recogí del piso y me apunto la cabeza.

No merezco vivir...

espía adolescenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora