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Si bien Akaashi no era un experto en el tema, no tardó mucho en comprender lo que sentía por su compañera de clases, Suzuki, con la cual formaba un dúo muy llamativo según los demás.
Su amistad había comenzado cuando Suzuki declaró delante de todos que serían mejores amigos, solo porque noto que compartía gustos musicales con Akaashi, por lo que desde ese momento estuvieron juntos, y con el tiempo ambos se adaptaron al otro, aunque eso no significó que Suzuki se hiciera más tranquila, sino que al contrario fuera más efusiva.
Cuando a comienzos de su segundo año, Suzuki se postuló como nueva manager del equipo, Akaashi no cuestiono sus motivos, aunque sí pasó varios días pensando diferentes posibilidades:
La más probable, Suzuki había comprendido que al no formar parte de un club se aburría, y después de haber ido tantas veces a verlo jugar se había hecho muy buena amiga de las otras managers.
Un poco menos probable pero igual de posible, se había visto cautivada por aquel deporte.
Y la que Akaashi nunca habría pensado, hasta ese día, Suzuki había sido cautivada por el capitán y estrella del equipo.
Pero entonces lo noto, los nervios sin sentido de su amiga cada vez que pisaban el gimnasio, lo calmada que se volvía su voz allí adentro a diferencia de los gritos que le dirigía en clase, el cómo apartaba la mirada cuando Bokuto la observa o la elogia.
Suzuki había sido cautivada por Bokuto, pero no de la misma forma que lo había sido Akaashi.
Y aunque Akaashi sabía que debería admitir sus sentimientos por su amiga, no lo podía hacer, pero no renunciaría a ella.
-¡Uno más, senpai!-grito Suzuki desde la banca, mientras Akaashi colocaba para Bokuto y este remataba, dando por finalizado el partido, y llevándose la victoria los búhos.
Bokuto chocó sus palmas con las de Akaashi con felicidad, pero no le pasó desapercibida la mirada recelosa de este, aunque prefirió no hablar en ese momento.
-Ohh, senpai, ¡eso fue como wooosh!-salto Suzuki emocionada- Oh oh y cuando Keiji levantó el balón el rostro de los contrarios fue como woaaaah.
-Creo que conocer a Hinata te hizo mal-mencionó Akaashi con una leve sonrisa cuando la chica dijo su nombre.
-Hey hey hey, ¿ya están en esas confianzas?-bromeo Bokuto- Ehh, ahora estoy celoso.
Akaashi suspiro mientras apretaba sus puños, ¿cómo es que se volvía invisible con tan solo tres palabras?
Observó la sonrisa de Suzuki, y deseo que esa sonrisa fuera para él, pero sin importar que hiciera, Bokuto ocupaba todo el campo de visión de la chica.
