-Suzuki-chan, todos queremos saber quién es el chico ideal para la artista del año, ¿podrías sacarnos esa duda?-pregunto el entrevistador sonriendo.
La castaña rasco su mejilla avergonzada.
-Me apena decirlo frente a tantas personas-admitió-, pero sin dar nombres...Fue mi compañero en la escuela y mi primer y único novio en mi vida, pero cuando finalizamos la preparatoria cada uno tomo caminos separados y decidimos dejarlo hasta allí, pero creo que él es lo más cercano a mi chico ideal.
Suzuki sonrió confiada, pocos sabían sobre su relación mientras estudiaba, era imposible que supieran sobre aquel chico, solo él sabría que se refería a esa relación, pero dudaba que un jugador de vóley profesional tuviera tiempo para ver programas de chismes como ese. Incluso Suzuki odiaba esos programas, pero lamentablemente, eran la mejor manera de llegar a nuevas personas que le dieran oportunidad a su música, por lo que sin quejarse asistía con su mejor sonrisa.
Tras despedirse de su manager luego de que la dejara en su departamento, dejo caer su bolso junto a la puerta y se lanzó al sofá quedándose dormida al instante. Ser una idol japonesa era más difícil de lo que creía, amaba su trabajo, amaba cantar y crear música, pero no podía conservar su privacidad nunca y eso era algo que comenzaba a afectarle.
Despertó gracias al constante sonido del timbre y de su celular, ¿el mundo se caía y ella durmiendo? Se levantó con toda la pereza del mundo y sintió sus huesos tronar, aquel sillón no era un buen lugar para dormir, primero tomo su celular notando todas las llamadas perdidas que tenía de su manager, incluso del chico con el que no hablaba hace años. Un poco descolocada abrió la puerta encontrándose con su manager, que sin decir nada encendió la televisión, y una Nakamura Suzuki de 16 años le devolvió la mirada al igual que Bokuto Kōtarō.
"La historia de la artista del año y el reconocido jugador de voley del MSBY".
-Parece que algunos de tus antiguos compañeros vendieron estas fotografías y la historia.
Suzuki se dejó caer en el sofá, ya ni recordaba esa fotografía, pero parecía que la habían tomado luego de uno de los partidos de Bokuto. En esa foto Suzuki había coloreado su cabello de gris, lo cual resulto ser muy frustrante cuando noto que su uniforme escolar era del mismo tono, por lo que no tardo en volver a teñirlo de castaño luego de un tiempo. La foto no mostraba nada muy directo, solo estaban sonriendo mientras Bokuto era quien tomaba la foto y la mano de Suzuki tocaba su mejilla con adoración.
-¿Los puedo demandar?
-Si es lo que quieres sí, pero primero hay que encargarse de lo que ya se sabe, no querrás meterlo en problemas.
-Hablare con él, y daré un mensaje, si él quiere aclarar algo supongo que sus entrenadores o representantes se encargarán.
Su manager asintió, y le pidió que no entrará a las redes sociales durante el día, sería agotador para alguien que ya venía arrastrando estrés por estos motivos. La idea de llamar a Bokuto en unos días sonaba tentadora, y así lo iba a hacer hasta que su celular volvió a sonar y el nombre del chico parpadeo en su pantalla.
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One shots │ Haikyuu
FanfictionNunca es mal momento para querer ser parte de un anime.