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El fin de semana se acercó rápidamente y una vez que llegó el sábado, Hajime no podía creer que ya era hora de que saliera -pero no como una cita-, con Komaeda. Asegurándose de vestirse casualmente, echó un vistazo a su teléfono. Ninguna luz parpadeó para indicar que tenía un mensaje perdido, pero la idea de que pudiera lo hacia temblar. Komaeda, su objetivo, le había dado voluntariamente su número.

La facilidad y el ritmo con el que Hajime se puso en marcha no podría haber sido mejor para su trabajo. Sonriendo, se metió el teléfono en el bolsillo, se aseguró de que tenía las llaves, la cartera y los billetes, antes de salir de su apartamento.

No había necesidad de tomar el tren para la competición de Asahina, y el día era agradable con el sol brillando cálidamente. El paseo duró unos veinte minutos y una vez que Hajime llegó al edificio, lo hizo temprano por unos minutos. De pie, para que se le viera fácilmente, revisó dos veces su teléfono, notando un mensaje de Komaeda diciéndole que estaba en camino.

Respondiendo y haciéndole saber que ya estaba allí, también envió un mensaje a Asahina, deseándole suerte. Recibió una respuesta que consistía en múltiples emojis sonrientes. Medio riéndose para sí mismo, casi se embolsó el teléfono cuando apareció un mensaje, uno de Komaeda diciendo simplemente "Aquí". Mirando a su alrededor, Hajime atrajó la atención de Komaeda haciendo un gesto con la mano, él se acercó corriendo y le dio una sonrisa muy cálida.

-Buenos días, Hinata-kun.

-Buenos días, Komaeda. Espero que no te haya costado encontrar este lugar.

-No, tus instrucciones fueron muy fáciles de seguir -Komaeda sonrió-. Es la primera vez que asisto en una competición de natación. ¿Qué debería esperar?

Hajime le dio a Komaeda el boleto.

-Bueno, empecemos por entrar y elegir un lugar para sentarnos. Luego, explicaré los términos.

Hicieron eso y mientras caminaban por la enorme zona de asientos, intentando elegir el mejor lugar, Hajime se lanzó a dar algunas explicaciones.

-Entonces, déjame ver si lo he entendido bien -Komaeda dijo mientras se sentaba-. Cuando dicen «carrera», se refieren a cualquier distancia que estén nadando hasta completarla. Asahina-san hace tanto carreras individuales como por equipos, que son como pases de bastón. Ella hace estilo libre individual, golpe de pecho y mariposa, pero como equipo hacen la orden de mensajería instantánea. Ella va primero, ¿así que está haciendo mariposa por eso?

-Sí, así es como va -Hajime asintió-. Asahina comenzará la competición con su carrera de estilo libre. Tendrán los soportes para que todo el mundo los vea y cuando empiece la carrera, podremos ver sus tiempos mientras terminan. Pero antes de empezar las carreras, tienen que calentar. Usarán esta piscina, así como la ligeramente más pequeña del otro lado.

-Oh wow, hay mucho en que pensar -Komaeda sonrió-. También vi que hay algunos vendedores...

-Sí, venden artículos de natación como ropa o trajes de baño -Hajime asintió-. Pero más tarde, también olerás algunos vendedores de comida.

-Tendré que mirarlos. Vamos a ir al café también -Komaeda sonrió antes de sacar el programa que se dio en la entrada-. Así que, si leo esto correctamente, Asahina tiene suerte de estar en el primer bloque, así que tendrá muchas de sus carreras hechas a primera hora de la tarde.

-Sí, tienes razón. Es la ventaja de nadar temprano -Hajime asintió-. Oh, mira, están empezando a calentar.

Su conversación se tranquilizó cuando los equipos comenzaron a nadar, el área se llenó con el sonido del agua salpicando, silbidos y el parloteo general de la multitud mientras más y más se acercaban. Cuando el calentamiento terminó y los equipos adicionales comenzaron a ir, dejando a los que competían de pie en la cubierta, Hajime vio a Asahina. Atrajó su atención y le hizo un gesto con la mano. Ella le hizo un gesto con la mano.

-Ah, ¿así que ella es tu amiga?

-Sí, es ella -Hajime miró a su alrededor-. Si tenemos suerte, podemos encontrarnos con su novia, Sakura. Asahina dijo que ella está aquí. Su hermano, Yuta, podría estar también.

-Si lo hacemos, me gustaría conocerlos -Komaeda dijo antes de dar un codazo suave a Hajime-. ¡Oh, mira! Se están subiendo a los bloques.

-Entonces, está empezando. -Hajime se acercó más.

Una pausa llenó el área, silencio antes de la tormenta, y luego el timbre sonó y pronto los competidores se fueron. Hajime giró el rostro para mirar a Komaeda, que estaba completamente fascinado y concentrado en la carrera.

Había un gran rubor en sus mejillas y el brillo de las luces de arriba aterrizaba sobre sus ojos, alegres y llenos de vida, parpadeando como estrellas. Por un segundo el corazón de Hajime se estremeció, su aliento se le escapó y la compasión lo llenó. Alguien tan brillante y cálido como Komaeda no merecía morir sólo por un capricho maligno de Enoshima para hacer un negocio.

No lo merecía.

Realmente, no lo merecía en lo absoluto.

Sin embargo, no era el lugar de Hajime para juzgar. Sacudiendo la cabeza, volvió a prestar atención a la carrera, apretando los puños con impotencia y teniendo un ligero pero constante dolor en el pecho.

I can't kill you (so we must be destined to be together)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora