Moonlight 🌙

•2

Alcé la mirada.

El chico era más alto que yo. Ojos verdes. Cabello castaño con rizos rebeldes cayendo por su frente. Pómulos marcados y una sonrisa radiante.

—Gra... gracias... — sonreí aún sorprendida por la hermosa apariencia de aquel chico.

— No es nada. — volvió a dedicarme una sonrisa de dientes perfectamente blancos.

Deslicé una pequeña sonrisa en mis labios y procedí a abrir mi casillero.

De reojo, observé como el chico se recargaba en la pared observando por todos lados.

— Eres uno de ellos... ¿cierto?— pregunté sacando mis pompones.

—¿Disculpa?— Él se incorporó observándome intrigado.

— Debes ser uno de los chicos de intercambio ¿no? — expliqué cerrando cuidadosamente.

— Ah, ¡Sí! — sonrió nuevamente. — Por aquí son muy observadores.

— Bueno, es un pequeño pueblo perdido entre el estado. Ver rostros nuevos es un poco... extraño. — me encogí de hombros.

— Sí, me imagino. — asintió. -—Por cierto, me llamo Billy... Billy Mitman. — estiró la mano.

— Betty... Cooper. — estreché su mano con una sonrisa.

Billy contemplo nuetras manos unidas.

— Es un placer, Betty. — me observó nuevamente con una enorme sonrisa.

— Bueno, debo irme... supongo que nos veremos luego. — me despidí con un pequeño gesto de mano alejándome.

El chico alzó la mano nuevamente con aquella sonrisa.

●●●Moonlight ●●●

—Debe ser una maldición. —comentó Evelyn cruzandose de brazos.

— Ya he venido. — llegué alzando los pompones al cielo.

— Solo es coincidencia. Tarde o temprano los veremos. — Donna se encogió de hombros mientras hacía sus estiramientos.

— ¿Sobre qué? — pregunté sin poder evitar la curiosidad.

— Todas las chicas han visto a los nuevos. ¡¿Y Nosotras?!— gritó Evelyn exagerando obviamente la situación.

— Dios, son sólo chicos. No son la gran cosa. — Donna le quitó importancia.

— He conocido a uno de ellos. — tras mencionar esas palabras, Donna y Evelyn se giraron a verme intrigadas.

— ¿Y? ¿Cómo es? ¿Es verdad lo que se dice de ellos? ¿Crees que valen la pena? ¿Serán solteros? — Evelyn se acercaba bombardeadome con sus preguntas.

— Bien, relájate. — pedí. — Uno: Apenas y cruzamos palabras. Dos: No tengo idea de si sean solteros y un buen partido y tres... sí, admitió que es bastante lindo. — sonreí quitándole importancia.

Evelyn dio un brinco de alegría mientras soltaba un grito.

— Al menos al que he conocido.—  justifique cuando Donna me miraba sonriendo.

— Confiamos en tu buen gusto. — asintió. — Ahora sólo debemos conocer a los tres restantes.

—¿Restantes? ¿Que no solo eran Tres?— alcé una de mis cejas.

— Según las chicas, son cuatro.

— Pues mejor. Ahora podremos conseguir una cita decente para Halloween. —  Evelyn frunció el ceño. — Es una pena que estés con Brett... — deslizó una sonrisa ante una de sus ideas