XXIV

231 24 1
                                    

En el filo de la cama mi cabello cubría mis pechos desnudos mientras mi mente se aniquilaba una y otra vez ante lo que pronto sucedería, retome mis palabras" si claro", ¿en qué pensaba?.

Mi piel aún húmeda se estremecía, algo en mi me gritaba lo idiota que era, si, era muy estúpida, tenía que acostarme con un hombre guapísimo pero completamente desinteresado en mi para poder tener un hijo mutuo que lejos de unirnos nos separaria, lo más estúpido era que ambos buscábamos eso. El sonido que producen los nudillos en la madera se escuchó en mi habitación, solo tome la toalla de la cama y me la puse ensima, eche mi cabello para atrás y abrí la puerta.

 El sonido que producen los nudillos en la madera se escuchó en mi habitación, solo tome la toalla de la cama y me la puse ensima, eche mi cabello para atrás y abrí la puerta

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

El individuo estaba de pie fuera de ahí, salí de la habitación, tras de mi cerré la puerta, era obvio que no sucedería ahí, mire a el piso por algunos minutos.

- entonces......

Balbuce sugiriendo que se moviera primero, sin decir nada tomo mi mano para llevarme frente a la sala, el tampoco me quería en su cuarto por lo que puso una colchoneta cerca de la sala y de la calefacción, todo era tan malo, todo era tan impropio, todo era tan tonto.

- toma ésto - me extendió una pañoleta de seda - úsala para cubrir tus ojos - mientras me dió la indicación de el bolsillo de su bata saco la gemela de está, luego cubrió sus ojos atando por detrás la pieza.

Esto era tan único para ser algo tan improviso, puse la mascada en mis ojos, una vez que ambos la tuvimos el juego empezó.

- ¿lista? - dijo cuando lentamente tomo mi cintura, mi piel reaccionó de forma rápida a la idea de estar piel con piel.

- si.

Mis manos se aferraron a su cintura de la misma forma que el lo hizo, entonces poco a poco se acercó a mi boca, cada segundo que demoró en besarme mi cuerpo sentia su respiración, la increíble forma en que yo respondía a su contacto, a su intención llena de pasión, me abrumó, el producía en mi algo que no debería de ser.

Deje que sus labios abrieran con firmeza los míos, dentro de ellos sentí su lengua que endulzó mi boca, correspondi su forma de besarme, correspondi a cada movimiento que tenía, abrió la bata que envolvía mi cuerpo, el solo imaginar que mi piel estaba desnuda debajo de ella me excitó demaciado, con un movimiento torpe tocó uno de mis pechos.

Apreté mis manos antes de intentar tocar algo de el, en el momento que lo hice me di cuenta de su desnudes, de nuevo vibre de éxtasis, este hombre me producía cosas tan inexplicables, tan profundas e inquietantes.

Me deje llevar por el, me deje llevar por el momento placentero que estaba teniendo, nos recostamos en lo que sería nuestra cama en ese momento, me desprendió de la bata por completo para luego tomar la suya.

Comenzó a recorrer con sutileza la piel de mis piernas, me aferre a su cuello para besarlo sin medida, como respuesta el individuo beso mis pechos dándome una completa satisfacción, jugamos un poco a seducir nuestra piel, solo en el momento más oportuno me dió el control a su cuerpo, tiro de mi brazo y mi cintura, me coloco sobre si para que tuviese el control, no podía negarme tenía tanta necesidad de sentirlo que solo deje que el momento sucediera, introduje su falo en mí vagina de forma contundente.

Luna FríaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora