Capítulo XXXIX : Oportunidad

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Tres días después

Mi investigación en contra del Pilar Cristal tomó de nuevo un rumbo fértil. Según la información con la que disponía, esa persona y su escuadrón estaban en las instalaciones del área científica del ejército. Parecía que ambas organizaciones se complementaban y sostenían una de la otra. Por ende, su cede estaba dentro de ese gran edificio. Lo malo era que estaba justo en el centro de Comondor. El ataque no sería igual como con el Escuadrón Celeste, que estaba en las afueras. Bloquear las comunicaciones no sería tan efectivo, ya que toda esa ciudad de soldados se daría cuenta de nuestro ataque.

También me orienté sobre las habilidades de ese pilar. Su Magia de Cristal era efectiva en media y corta distancia. Y al ser capitana de un escuadrón, obviamente la hacía sumamente poderosa. No podía bajar la guardia y dejarme llevar por las fotografías que vi de ella. Parecía una mujer delicada y refinada. No tenía una pizca de parecer luchadora. Eso la hacía aun más peligrosa.

—Zack, recibí una invitación a una ceremonia de compromiso en Giardi para pasado mañana. Parece que la hija de uno de mis amigos va a casarse y quiere anunciarlo ante la nobleza —me dijo Ashton.

Desde la cena, ha estado muy cariñoso conmigo, pero sin llegar a ser empalagoso. Tal y como dijo, nuestro trabajo era algo aparte a lo nuestro. Dentro de la oficina yo era su asistente y nada más. Sin embargo, había momentos en los que nos acercábamos uno del otro y nos quedábamos descansando sobre el hombro del contrario por unos segundos. Luego continuábamos con el trabajo.

—Que bueno. Seguro que deben ser personas muy importantes —aseguré.

—Así es, el duque Dreamgarden nada más y nada menos —una pila de hojas que acababa de ordenar se me cayeron de las manos apenas escuche la mención de ese apellido—. Oh, vaya. Yo te ayudo.

—L-lo siento —me disculpé e intenté disimular la sorpresa.

Realmente no me esperaba algo así. Yo pensaba que eso ya estaba hecho o no lo harían por la situación conflictiva con la Región Sur. Tal vez eso estaba hablando aquella noche de la cena.

—¿Te gustaría ir conmigo? —preguntó él. Parecía un poco nervioso por hacerme la invitación.

—N-no creo que sea correcto. La gente de la nobleza es muy inquisitiva respecto a las relaciones entre hombres —aunque ese también era un buen argumento, la razón real era que no quería volver a pasar por lo mismo de la cena o cuando me enteré de ese compromiso. No me sentía preparado aun para ver tal cosa.

—Tienes razón —dijo con tono desilusionado—. No había pensado en eso. Con todos esos aristócratas en un mismo lugar, resultaría demasiado incómodo para ambos. Según escuché, irían varios duques y otros nobles. También invitaron a la Pilar Cristal y a la Pilar Luz, debido a que las familias Glass y Leuchtend tienen relaciones muy cercanas con ellos. Realmente no sería un lugar adecuado para una pareja como nosotros.

Ese detalle no me lo esperaba. Inmediatamente después de sus palabras, supe que la mejor oportunidad que teníamos para emboscar a la Pilar Cristal, era en esa fiesta. Estaría muy lejos de Comondor y con poca seguridad. Sin embargo se encontraría en el peor lugar posible.

Tenía que hablarlo con mis amigos. Además que habían muchas cosas que tomar en cuenta si llegábamos a hacerlo. Principalmente por el hecho que Darrell y el señor Eugene me reconocerían de inmediato y nuestras identidades saldrían a la luz. Después de eso no sería nada difícil que llegasen a nosotros.

En suma, si irrumpía en esa fiesta inevitablemente me tendría que enfrentar con Darrell. No sabía si al estar delante de él, tendría aun el brío para hacer tal cosa. Pero tenía que apostarlo todo a este ataque.

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