—¿Quién es él? —inquirió Jack. Yo no sabía esa respuesta, lo único que tenía claro era de quien se trataba uno de los rehenes.
—Ese es... —antes que pudiera advertir sobre lo de Tom, escuché un ruido blanco procedente de mi aparato de comunicación. Era algo inaudible, pero sabía de quien provenía. Parecía que había algo que interfería con las señales y me imposibilitaba hablar con Dante y su grupo.
Extendí mi magia por toda la casa, e inclusive hacia el exterior. Me di cuenta que la barrera que habían colocado para evitar que usáramos Magia de Espacio, también bloqueaba la comunicación con el exterior.
—Creo que hay un problema con Dante —aseguré—. No puedo comunicarme con él.
—Zack, ¿acaso el que está ahí es...? —le asentí a mi hermano antes que mencionara su nombre. No cabía duda que se trataba de Tom. El inmediatamente se llevó las manos a la boca—. Oh, por los dioses.
El hombre se veía complacido y no dejaba de mirar hacia todos lados de forma neurótica. Su comportamiento era muy extraño.
—Veo que el hermano del pilar cumplió bien su trabajo. Ese idiota de Rodric estaba metiendo mucho sus narices —habló el sujeto—. Y ustedes dos han mostrado un excelente progreso. Estoy seguro que serán las armas absolutas del rey Kano. Nadie se atreverá a contradecirlo.
Por lo que dijo, él era de quien nos había hablado Peter. Ese hombre era quien hacía los experimentos con humanos para lograr convertirlos en magos malditos. No comprendía lo que estaba haciendo aquí. Debía tener algún plan o era muy estúpido por haberse rebelado de esta forma ante nosotros.
—Usted debe ser el científico loco que esta con el rey —le dije. El me miró de forma despectiva al escuchar que lo llamé "loco".
—Soy Donato Cavalieri. El hombre más inteligente del mundo —aseguró a viva voz—. Soy el que ha diseñado al soldado perfecto que nos encaminará a un futuro hegemónico. Y ustedes serán parte de eso.
—Estás más que demente si crees que permitiremos tal cosa —le dijo Elijah—. ¡Suelta a nuestro amigo ya!
El sujeto sonrió—. Cierto. Él es la razón por la que se han rebelado contra el reino —puso su mano sobre el hombro de Tom. Este levantó un poco la cabeza, pero no decía nada—. Será divertido ver esto.
Sin previo aviso apartó con brusquedad la bolsa de tela de la cabeza de Tom. Lo que vi hizo que mi corazón diera un vuelco y mi garganta se trabara por la furia que se acrecentaba.
El Tom de expresión alegre, rozagante, cabello rubio y ojos claros ya no existía. Quien estaba ante nosotros era alguien totalmente distinto, a causa de los golpes constantes y quien sabe que otras penurias. Sus pómulos sobresalían exagerados, evidenciando su hambre prolongada. Sus labios estaban quebradizos y su piel pálida era manchada por hematomas y cortes nuevos y viejos. Los ojos azules que alguna vez despedían luz, ahora eran la demostración más clara del sufrimiento al que fue sometido.
Levantó débilmente la mirada hacia nosotros. Al vernos intentó sonreír, pero por su debilidad no lo logró por completo. Por un momento me olvidé de Darrell y tomé mi misión, lo único que había en mi mente era un odio que se acrecentaba con cada instante que miraba a mi amigo en ese estado y al hombre que lo causó, sonriendo con satisfacción.
—Z-Zack... yo no lo sabía —habló Darrell a mis espaldas.
—¿Ahora vez porque hago lo que hago? Lo único que hay es avaricia, envidia, corrupción y mal en este mundo. Toda mi vida no he recibido otra cosa que no haya sido desprecio, dolor y burlas. Me han arrebatado cosas queridas y lastimado a quienes quiero —mi grimorio brilló con una luz más intensa que cualquier otra. Mientras más rabia sentía, mas brillaba.
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Crónica de los magos
FantasyEn un mundo donde la magia define quien eres, aquellos que no corren con la suerte de ser bendecidos con poder, terminan en la parte más baja, junto a la suciedad de una sociedad decadente. Solo ser un huérfano foráneo en una familia noble ya lo hac...