Amor escondido

15. Nuevo look.

En el rostro de Bruno se le notaba desde lejos que no quería dejarme, pero sé que es realmente importante que el valla a trabajar, no ha estado al cien por ciento desde que ocurrió el incendio y luego mi secuestro, no quiero que tenga más problemas en su trabajo por mi culpa, así que le di mi mejor sonrisa para que no se fuera preocupado.

- Estoy en muy buenas manos mi amor, no te preocupes, yo estaré bien. Ahora lo importante es que resuelvas todos los problemas en tu empresa - le dije con una voz suave para que me creyera.

- Para mí, en estos momentos no hay nada más importante que tu salud, si voy ahora a trabajar, es porque me necesitan con mucha urgencia. - Me dijo en forma de reproche. - Por favor, no olviden darle el desayuno. Ya está preparado, solo deben dárselo.

Se acercó a mí y me deposito un gran y tierno beso en los labios. Me miro por varios segundos, tomo su chaqueta y se fue, todo esto fue presenciado por Nicaury y Nicky con una sonrisa picara.

- Oh el amor. Amo ver a los enamorados mostrándose su amor. -Agregó Nicky con una gran sonrisa y dando pequeñas vueltas por toda la habitación.

- Perdón, es que él es muy paranoico, créanme para mi es más difícil creer que él se fuera y me dejara, creí que no se despegaría de mi hasta que estuviera perfectamente sana. - les anuncié. Aunque eso no me desagradaría en nada, tenerlo cerca me encanta.

- No te preocupes - menciono Nicaury - Lo importante ahora es que te alimentes.

Nicky salió de la habitación y volvió con un tazón de avena. Mi novio es un muy buen cocinero, porque no es que me guste mucho la avena pero esta se veía apetitosa, cuando probé el primer bocado, sentí que estaba en el cielo, estaba deliciosa, tendré que pedirle algún día la receta de esto.

Al terminar de comer, Nicky retiro los platos y los llevo a la cocina.

- ¿En que mas podemos ayudarte Gabriela? - Preguntó Nicaury.

En estos momentos lo que más me apetecía era tomar un gran rico baño pero tendré que conformarme con un poco de agua y jabón.

- Pues... Necesito bañarme, pero mis piernas no se mueven a mi gusto aun, además que tengo dolor en mi tobillo izquierdo. - Le avisé.

- No hay problema. - hablo con rapidez Nicaury,

Ella salió de la habitación y volvió con una silla de ruedas, no sabía que Bruno me había traído una. Con mucha suavidad y cuidado me quitaron la ropa, me subieron a la silla con algo de dificultad, creo que después que me sane tendré que ponerme a hacer ejercicio, al parecer había subido de peso.

***

Ahora sí, me siento fresca y limpia, luego de bañarme Nicky me puso un vestido de flores holgado. Nicaury me dio un rico masaje en el tobillo y el estomago, algo que fue muy reconfortante para mí, no sabía que Nicaury tenía tan buenas manos para eso, hasta le llegue a decir que tiene talento para ser masajista, pero me dijo que ya tenía en mente lo que quería, era ser una reconocida estilista.

- Nicole me hablo de tu cabello, así que traje mis utensilios para poder arreglarte el cabello, claro si me das permiso. - Me avisó Nicaury con ojos de cachorrito, se notaba que quería experimentar con mi cabello.

- Claro, confío en ti y sé que no me harás nada malo en el cabello, así que puedes hacerme lo que quieres en el, siempre y cuando sea dentro de lo tolerable. - Le advertí.

- No te preocupes, se cuál es tu estilo, lo sé desde el primer día que Nicole nos presento. Tienes un cabello muy sedoso y brillante, no importa que este corto, así se te ve mejor, resalta la linda silueta de tu cara. - Me animó.