Amor escondido

17. Mi Amor Por El

Este capitulo fue inspirado por la cancion de LANA DEL REY - NEVER LET ME GO. La escuché en una serie que comence a ver hace poco. Ahí le dejare el video con la cancion y la serie. Bueno, disfruten el capitulo.

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Me quede mirándolo atónita, no podía creer lo que el acababa de preguntarme.

¿Qué le habrá dicho esa Jennifer ahora?

- ¿Qué me ha dicho? - Le pregunté aun nerviosa.

- Lo que ha escuchado. ¿Por qué obligo a Jennifer a simular un secuestro? ¿Con qué la amenazó?

Agradecí al cielo que Bruno entró a la casa en ese preciso momento, al verme se preocupo por mi expresión, por lo que corrió hacia mí, se agachó y me acaricio la pierna con ternura.

- ¿Qué pasa? - Pregunto de inmediato.

- P Pues - Tartamudeé - El señor aquí presente me acaba de preguntar que por que obligue a Jennifer a secuestrarme. - Le respondí nerviosa. Bruno de inmediato miro con desdén al oficial Efron.

- Usted no vino a pedir una declaración, usted la está interrogando, y usted muy bien sabe que no puede interrogarla sin que esté su abogado presente. ¿Qué está tramando? - Bruno se puso de pie frente a mí, dándole la cara al oficial.

- Yo solo estoy haciendo mi trabajo. - Se defendió.

- No creo que a su jefe, le agrade mucho saber que uno de sus oficiales está degradando la ley y se esté saltando el protocolo.

Los dos se quedaron mirando por un buen rato. Yo aun seguía anonadada, no puedo creer hasta donde es capaz de llegar Jennifer, no logro encontrar el porqué de su odio tan grande hacia mí, si, sé que está enamorada de Bruno y está celosa de mi, pero llegar hasta este punto para alejarme de él, y este estúpido hombre cree que yo me hice secuestrar.

¿Qué ganaría yo haciendo algo así?

- Esta bien. Ella debe venir a la delegación mañana temprano para ser interrogada. - Pon fin dijo.

- Allá estaremos, se lo aseguro. - Lo retó mi Bruno.

El me dio una mala mirada antes de retirarse e irse por la puerta. Mis lagrimas no tardaron en salir de mis ojos, creí que ya no tendría que pensar más en Jennifer después de esta declaración pero veo que no podré librarme de ella tan fácilmente. Cuando Bruno se percató rápidamente me abrazó y acarició mí cabeza.

- Puedo asegurarte que esa Jennifer va a pagar por todo lo que te está haciendo. - Repentinamente hablo Nicole.

- Si. Personas como esa Perra no se salen con la suya, además que cuentas con un protector maravilloso. - Siguió hablando Nicky.

- Y sabes que para todo lo que necesites estaremos contigo. Eres la mejor amiga de Nicole, eso te convierte también en nuestra mejor aliada. - Me sonrió Nicaury.

Se me había olvidado por completo que tenía a todas las hermanas Bénson detrás de nosotros, observando todo en silencio. Al escuchar sus palabras se me llenaron los ojos de lagrimas, contaba con personas que me querían tanto como yo a ellas.

- Las Amo Chicas. - Les hice saber entre lagrimas.

- Creo que para hacernos creerlo debes dejar de llorar. - Nicole dijo eso pero ella al igual que yo estaba llorando.

- Bueno, basta de llorar, ahora lo que debemos hacer es dejar a los tortolos. - Ordenó Nicaury.

- Si, ustedes deben de bajar esta tensión que hay en ustedes. Además que tienen un buen rato que no se ven. - Dijo Nicky con picardía en su voz.

Ellas se despidieron de nosotros con un fuerte abrazo. Y nos dejaron mirando hacia la puerta por unos minutos, hasta que mi querido Bruno rompió el silencio.

- No te preocupes mi amor, todo va a estar bien, yo me ocupare de que Jennifer se refunda y se pudra en la cárcel, todo esto que ella te está haciendo no se quedará sin castigo. - Sus palabras lograron calmarme un poco. - Has tenido un día muy largo, deberías dormir.

- No tengo sueño. Lo que quiero en estos momentos es estar contigo y que me abraces fuerte.

El me sonrió.

- Eso lo puedo hacer sin ningún problema. - Me dio un lento y tierno beso en los labios. - Te Amo Gabriela, nunca vallas a olvidarlo y no dejaré que te pase nada malo, ya has sufrido suficiente en tu vida.

- Gracias por estar conmigo, Yo también Te Amo un montón mi Ángel adorado.

El me levanto como una princesa y me llevo a la habitación, me deposito en la cama con extremo cuidado (Con demasiado diría yo) se colocó en cima de mi, sin apoyarse sobre mí, se me quedó mirando fijamente a los ojos, en ellos se notaba el deseo y la atracción que sentía hacia mi. Aun me parecía un sueño, un hombre tan perfecto como él se había fijado en mí, no en Jennifer, la añorada secretaria de curvas inimaginables, de hermosos ojos y de cabello sedoso. No me extraña que ella se haya obsesionado tanto con él.

Como era costumbre, Bruno me sacó de mis ensoñaciones con una leve y suave caricia en el rostro, formó una línea recta desde mi sien hasta mi barbilla con su dedo pulgar. Con ese mismo dedo acarició mis labios, sus ojos estaban muy concentrados en ese lugar. Sentía una extraña y cálida sensación en mi estomago.

- Eres muy hermosa Gabriela. - Esas palabras salieron de su boca, pero no creo que se haya dado cuenta que las ha dicho. El estaba muy concentrado admirándome, su mirada sobre mí, me ponía nerviosa pero a la vez me agradaba mucho esa sensación en mi. El sonrió con ternura, me sentía segura y protegida entre sus brazos. - Te Amo tanto mi amor, aun no me creo que seas mi novia, que por fin me hayas elegido a mí.

¿Cómo que al fin? Sonó como si nunca lo iba a elegir.

Cuando iba a preguntárselo me besó con desesperación pero al mismo tiempo con cariño y ternura, su ataque sorpresa me interrumpió los pensamientos que estaban surgiendo en mi cabeza y solo me deje llevar por los labios de mi novio, siento un amor tan grande por él que no sé cómo viviría un futuro sin él. Cuando sintió que me faltaba el aire, se aparto de mis labios pero no perdió el tiempo y fue enseguida a mi cuello, haciendo que sintiera un gran placer.

- Por cierto ese corte y ese color te queda hermoso. - Me dijo sin dejar de besar mi cuello.

Yo acaricié su bello cabello largo y rubio, el volvió a mirarme fijamente a los ojos.

- Te Amo Bruno. - Le dije en un suspiro.

Sus ojos dispersaban cualquier duda o pregunta que estuviera en mi mente, solo mirarlo me daba paz, una calma que jamás en mi vida había sentido... hasta el día que lo conocí, no sé como poder explicar lo que siento, desde el primer día que noté su existencia he sentido que algo se ha llenado en mi interior.

¿Qué es lo que tiene que me hace sentir así?

¿Por qué me siento segura a su lado?

Solo ver sus ojos mirándome, mis dudas se dispersas y se van a un lugar que desconozco.

Lo Amo, siento que decirlo ya no es suficiente, quiero que se entere de lo mucho que lo amo.

Se levanto, me ayudo a que yo me levantara también. Despacio me sacó el vestido por la cabeza sin dejar de mirarme directamente a los ojos, tiró el vestido hacia un lado de nosotros y con su dedo índice hizo una línea recta desde mi cuello hasta mi abdomen, me volvió a recostar sobre la cama, sin previo aviso comenzó a depositarme tiernos besos en todo mi abdomen, a veces lo lamía, haciendo que salieran pequeños gemidos de mi garganta.