No se por que salió así. ¿habrá pasado algo en la empresa?... No, mejor no pensar en cosas así, de seguro fue algo trivial, pero se escuchaba muy enojado, ojalá que no haya pasado algo malo o peligroso.
Mejor me levanto y me dispongo a terminar el proyecto con Josh, que de seguro ya se despertó y yo de vaga aquí en la cama haciéndome ideas raras. Me levanto de mi cama y entro a la ducha a darme un buen baño y pensar más calmada. Pero al parecer mi mente tiene otro plan ya que no deja de imaginarse cosas de lo que le habrá pasado a Bruno que salió tan enojado de aquí.
Omg. ¿Y si fue algo con esa secretaria? De la cual me olvide su nombre, no fue a propósito de verdad me olvide de su nombre, ¡No! Se que Bruno no es de los hombres que engañan - o eso creo - Bueno ¡ya! mejor dejare de pensar en cosas extrañas, siempre mi mente me juega trucos feos. Ya luego de haberme dado una ducha bien merecida, me dirijo a mi cuarto, de mi cajón de ropa interior saco unos boxers negros - muy cómodos por cierto - y me los pongo, rebusco más a fondo para buscar el brasier que le acompaña y lo encontré, me los puse muy rápido y me fui al closet. Me puse unos pantalones negros de mezclilla y una blusa de color rosa, me puse unas zapatillas del mismo color de la blusa y me hice una coleta en el pelo.
Ya lista salgo para encontrarme con Josh viendo el proyecto sobre la mesa.
- Nos ha quedado muy bien - habla sin dejar de mirar nuestro incompleto proyecto.
- Sí, los constructores hemos sido muy buenos. - dije - ¿ Tienes hambre? - pregunté haciendo eco de mi estómago.
- Sí. Un poco... Mmmmmmmmm. ¿Qué le paso a tu novio? Vi que salio muy rápido.
- Sí. Fue que lo llamaron del trabajo, una emergencia - le inventé ya que ni yo misma se que fue lo que paso.
- ¿ Hoy domingo? Waw esos empresarios no descansan. - menciono sorprendido. Pero lo que dijo me surgió una duda.
- ¿ Cómo sabes que es empresario? - no me acuerdo habérselo mencionado ayer.
- No fue difícil adivinar. Lo digo por la vestimenta que tenía ayer, además se ve de esos hombres que se las pasa en una oficina dando ordenes. - Waw. Lo adivino con solo mirarlo.
- Tienes razón en todo lo que dijiste.
- ¿ Es uno de esos? - preguntó.
- Sí. Un hombre empresario que da muchas ordenes.
Caminé a la cocina y saqué dos cuencos y le eche cereal y un poco de leche, le di uno a Josh y otro me lo comencé a comer yo. Nos sentamos en el sofá a ver televisión, no había nada interesante que ver así que dejamos un canal de noticias. Como siempre lo mismo que hay muchos muertos por aquí y por allá y que el mundo se está llenando de drogas, pero de repente saltaron a un boletín especial.
- Hola, mi nombre es Elizabeth Dylan y les traigo un boletín especial. La empresa Walker se vio en una gran catástrofe, pues, la cocina de esta gran empresa se incendio, nuestras fuentes nos indican que fue un escape de gas, gracias a Dios solo fue la cocina, está en ruinas, ya que los que cuidan el edificio en las noches, escucharon la explicación y acudieron al lugar rápidamente y lograron apagar el fuego con los extintores. No hay ningún herido pero muchas cosas han quedado inútiles de usar, alguien tendrá que rendir cuentas de este problema al señor Walker. El no nos ha querido dar ninguna entrevista, ni siquiera nos dejó preguntarle nada cuando vimos su auto entrar por el aparcamiento subterráneo.
- ¡Oh Dios mio! Con razón salió así de rápido. - grité, dejando mi cuenco sobre la pequeña mesita de la sala y me encamine a buscar mi celular para llamarlo, el cual estaba en la cocina.
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Amor escondido
RomanceGabriela Smith cuando tenía 17 años tuvo un accidente automovilisco, esto provocó que ella perdiera la memoria y olvidara a todos sus seres queridos, entre ellos, sus padres, sus amigos y a su novio de dos años. Tiempo más tarde ella recupera alguno...