capitulo 13

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Juli
Me había besado y yo no me podía resistir, cuando se separó de mi me comenzó a acariciar mi mejilla y apoyo su frente con la mía.
- por favor no discutamos. Perdóname. - dijo sin abrir sus ojos.
- ¿Por qué?
- por ser una idiota al creer que me cambiarías.
- baby mirame. - al yo decir eso ella abrió los ojos. - tienes todo el derecho de pensar eso, te han lastimado tanto que te cuesta creerlo. Pero baby yo jamás te voy a cambiar tu eres todo lo que soñé y espere, eres eso y más.
- te amo. - me abrazó.
Luego de eso subimos con los chicos y comenzamos a hablar de todo lo que se nos ocurria. Cuando llegó la noche nata nos hizo el favor de llevarnos a la casa. Dejó primero a Santi, luego a Olgui y por último a nosotras.
- Cami, ¿te llevo a tu casa o te vas a quedar con Juli?. - preguntó nata.
- llévala a la ca...- no pude seguir porque me interrumpió.
- ¡No! Nata, déjame aquí gracias.
- okay muchachas bajense que yo ya quiero ir a la casa para cogerme a makis.
- ¡NATALIA! - le gritó makis y pegándole en la cabeza.
- ¿Que paso mi amor? ¿Acaso no quieres llegar ya a la casa y poner tus pies al rededor de mi cintura mientras gimes y gritas mi nombre?. - se acercó a ella, y mientras nosotras reíamos.
- ¡NO! - le gritó nuevamente.
- bueno nata. - hablé. - gracias por traernos, usen protección, las queremos, adiós.
- adiós chicas. - dijo Cami.
Me ayudaron a bajar y nos dirigimos al camper.
- sube con cuidado bebé. - me dijo cuando comenzamos a subir las pequeñas escaleras del camper.
- tranquila baby.
Entramos al camper y nos fuimos a la cama, comenzamos a hablar hasta que sentimos que nos comienza a dar sueño.
- baby. - hablo.- te voy a cambiar la venda para dormir. - se fue al baño y a los segundos regreso con una venda. - súbete la camisa. - le hice caso, ella se acercó a mí y me quito la venda que evidentemente la tenía en el abdomen. - ¡Dios mío! ¡Que abdomen!. - reí cuando dijo eso.
- ¿Te gusta?. - le dije pícaramente.
- no me gusta, me encanta.
Me continuó colocando la venda, cuando terminó me ayudó a ponerme mi pijama y ella fue al baño y se cambió.
- princesa. - hablé cuando se acostó a mi lado y en mi pecho.
- dime. - respondió en la misma posición.
- ¿Tus papás no me van a odiar porque su princesa esté pasando mucho más tiempo conmigo que con ellos?.
- no, ellos están de viaje. - cuando escuché su voz puede notar que se sonaba algo cansada.
- okay. Mi princesa duerme, te escuchas cansada.
- ¿Me haces mimos? por favor - subió su cabeza y me hizo un puchero.
- claro.
Le comenzé a acariciar el cabello y así se quedó dormida.
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8 meses después.
Hoy por fin era el día que me quitaban el yeso. En estos 8 meses Cami y yo hemos fortalecido nuestra amistad de una forma inexplicable siempre estábamos juntas, tanto así que casi todas las noches ella venía al camper o me hacía vídeo llamada. Mi papá vino por mi para ir al hospital para que me quitarán por fin este yeso, llegamos al hospital y el doctor nos recibió.
- bueno Juli, te digo que ya puedes caminar normal. - dijo el doctor cuando me quito el yeso.
- gracias doctor. - hablé.
Salí del consultorio y mi papá me llevo al colegio.
- bueno hija. - hablo mi papá. - disfruta tu día.
- gracias papá. - lo abrace y salí del auto.
Me dirigí al salón y cuando llegue me di cuenta que Cami todavía no llegaba, me senté y comence a hablar con los chicos hasta que Cami llegará.
- entonces Juli, ¿Vas a ir a la fiesta? - pregunto sebas.
- es que me toca trabajar sebas. - hablé.
- ¿A qué horas sales?
- a las 7.
- ¡Perfecto! La fiesta empieza a las 8.
- está bien, voy a ir.
- te espero Juli, no me vayas a dejar plantado. - me señaló.
- ¿Cuando te he dejado Plantado?
- en el cumpleaños de Santi, me prometiste que no ibas a faltar y faltaste.
- sebas. - hablo Santi. - eso fue hace dos años.
- ¿¡Y que!? ¡Yo jamás lo voy a olvidar! - alzó un poco la voz y nosotros reímos.
- oye. - hablo makis. - ¿Por que faltaste ese día?.
- porque Cami se había enfermado.
- ¿o sea que es más importante Cami que tú amigo que conoces desde que tenías seis años?. - hablo Santi indignado.
- si, siempre ha sido más importante. - dije obvia.
- ¿Es más importante que yo? - hablo está vez nata. - yo que te conozco desde que tenemos pañales.
- es más importante que todos aquí.
- te tiene muy enamorada. - hablo Olga.
- demasiado Olgui.
En ese momento siento que alguien me agarra del cuello y planta un beso en mi mejilla haciéndome sonreír de inmediato.
- my baby. - me dijo con una voz de bebé.
Yo me corrí y ella se sentó a mi lado
- ¿Como está la princesa de mi corazón? - le di un beso en la mejilla y vi como se sonrojo.
- muy bien ahora que te veo.
- hola. - hablo nata atrás de nosotras. - nosotros también existimos y también nos importa cómo estás Cami.
- hola chicos.
- Cami. - hablo sebas.- espero que hoy no te enfermes.
- ay Sebastián. - dije. - ya superalo.
- jamas lo voy a superar, ese día me prometiste que la íbamos a gozar.
- bebé. - me susurró Cami al oído. - ¿De que habla sebas?
- ¿Te acuerdas que en el cumpleaños de Santi te enfermaste?. - vi como asintió. - pues ese día quedé con sebas en divertinos pero apenas tus padres me dijieron que estabas enferma se me olvidó decirle que ya no podía ir.
- okay. Sebas perdóname.
- tranquila Cami, con tal de que hoy no enfermes.
- tranquilo, hoy me siento bien.
El profesor llegó y comenzamos a ver clases y no sé porque pero de la nada viene a mi mente la vez que Cami se enfermo.
Flash back.
Estaba saliendo del colegio, que por cierto hoy tuve un día pésimo ya que Cami no había venido y no sé porque. Me subí a mi auto y justo cuando iba a arrancar me llega una llamada de clara, la mamá de Cami.

De Una Noche A Toda La VidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora