THE CHILLING ADVENTURES OF SABRINA.(CAOS)
Sabrina y yo llevamos la vida entera de ser amigas, pero a diferencia de ella, yo si le soy 100% fiel a mis raices de bruja. A pesar de eso, le he aconsejado bastante que escoja bien lo que hará y que después no se arrepienta. Es dificil para mí verla en tanto lío pensando que hará el día de su bautismo oscuro.
Sin embargo, eso no le ha impedido estar feliz. Es una de esas noches en que la tía Zelda y la tía Hilda salen un largo rato y luego regresan. Así que me doy el lujo de acompañar a Sabrina, quien me dice que vendran sus amigos mundanos. Yo acepto, sabiendo que ambas tías pueden estar tranquilas porque yo "soy una buena influencia en Sabrina".
Pasadas las horas, yo me aburro de estar con Sabrina y sus amigas, no soy mucho de tener amigos. Zelda y Hilda no llegan aún, por lo que voy caminando tranquilamente por la casa hasta encontrarme a Ambrose... he de admitir que su vestimenta hoy esta algo sangrienta pero me siento a admirarlo quitarse la chaqueta llena de sangre para luegoverlo sorber lentamente su café.
-¿Hiciste algo de café para mí?-preguntó y me río al verlo brincar del susto.
-¿Sigues aquí?-pregunta sentandose en el escalón junto a mí.
-Cuido a Sabrina.-le digo riendo.-¿Día dificil?
-Lo mismo de siempre ya sabes... cosas sangrientas y así.
-Ambrose, ¿por qué nunca has tenido novia?-digo segura de que su respuesta no será 'soy gay'.
-Nunca he sido mucho de eso.-dice bebiendo de nuevo de su café.-Soy un lobo solitario, disfruto la soledad y nunca me ha interesado nadie.
-Lobo solitario, buena elección.-digo incómoda.-Debo volver con Sabrina...
-¿Y tú? ¿Por qué nunca has tenido novio?-pregunta curioso y entonces decido mirarlo a los ojos.
-Tengo 3años de estar enamorada de alguien, Brose.-le digo, solíamos tener apodos antes de que él fuese encerrado aquí.
Me levanto y camino a la parte de arriba de la casa, queriendo esconderme. Hacerme pequeña. Unas semanas después de ese encuentro con Ambrose, trató de evitarlo lo más que puedo y al tener que volver a casa de los Spellman por órdenes de mi madre que saldrá de viaje, no me queda de otra que esconderme en un cuarto mientras no vaya a la escuela.
Ambrose tampoco me mira, o me dirige la palabra, se ha dado cuenta de que estoy enamorada de él. Que terrible suceso, ahora que haré. Sabrina coge sus cosas y se va con su novio Harvey a hacer no sé qué cosas y yo tengo que quedarme a solas con Ambrose. Por lo que al estar tomando té a solas en la cocina él se aparece sentándose frente a mí.
-¿Te hice algo, Nena?-dice mi apodo con tanta dulzura que las mariposas en mi estómago revolotean con alegría.
-No, Brose, no.-digo nerviosa.-Han sido pésimos días, solo eso.
-¿Recuerdas ese día que te dije que no veía a nadie de una manera romántica?-dice.
-Si, lo recuerdo.-suelto con algo de amargura.
-Bien, Elena, te mentí.-dice de golpe.
-¿Eres gay?-suelto de la nada, ¿que he hecho yo para merecer este tipo de vergüenzas?-Lo siento, sabes lo difícil que es para mí aguantarme esas cosas.
-Lo sé, lo entiendo. Y no, no soy gay.-se ríe y yo con él.-Entonces, como te decía, mentí. Y hasta hace pocos días me dije a mi mismo que tenía que decírtelo a ti porque pues, es necesario.
¿Será que él...? No, imposible.
-Elena, estoy enamorado de alguien hace un poco más de 5 años.-y ahí mis esperanzas caen al suelo. Ambrose es mucho mayor que yo, eso significa que para hace 5 años yo tenía 14. No soy yo. Era horrible a los 14 años.
-¿5 años, Brose?-digo sorprendida.
-Sí, eras hermosa a esa edad.-dice sin más y puedo ver una gota de felicidad en su cara al verme en shock ante lo dicho.
-¿Que has dicho?-digo sin más.
-Que eras hermosa a esa edad.-sonríe y se pone de pie, toma mi mano y me pone de pie junto a él. Mi corazón late al 1000%.-Por favor dime que el chico del que estás enamorado hace 3 años soy yo.
Ambrose susurra eso con súplica en su mirada. Lo único que puedo hacer el abrazarlo, pongo ambas manos en si cuello y lo abrazo con mucha fuerza.
-Claro que eres tú Ambrose.-digo en susurro en su oreja.-Eres tu, Brose.
-Genial, entonces puedo hacer esto.-estoy apunto de preguntarle que hará, pero me toma de la mano y me da una pequeña vuelta para luego besarme. Sonrío cuando termina dicho beso y puedo jurar que mi corazón se va a salir de lugar.-Y solo para que sepas, no soy gay, soy bisexual.
Mi boca se abre en una gran O, y luego simplemente río. Estoy enamorada de un brujo bisexual que ama la necromancia. ¿Puedo estar más jodida? Ah si, lleva 75años de arresto domiciliario aquí en la funeraria. ¿Que más puede pasar?