capítulo 4: ¡ups!

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    Habíamos llegado luego de la caminata, mis pies dolían por mis incómodas botas. Las amaba, pero no estaban diseñadas para caminar demasiado.

    —Que gusto verte por acá Vic, y tú... ¿Hola? —El chico que claramente era del equipo de Fútcol americano, me miró con confusión. Rodeé los ojos y me contuve de salir de allí

    —Ella es Amelia. —Respondió con una sonrisa. Ignoré a aquél idiota y caminé dentro de la casa. Tomé una lata de cerveza que se encontraba en la mesa y busqué con la mirada a alguien que conociera.

    Odiaba ir a fiestas con ella, ya que siempre me dejaba sola y como no conocía a nadie me tocaba encerrarme en el baño o estar sentada en algún mueble. De fondo sonaba Greek Tragedy de The Wombats, Amaba esta canción.— Hey—Giré. Aaron estaba en frente mío con una sonrisa.— Hey.

    —Hey

    Ambos reímos. Aunque para mi fue algo incómodo— ¿Cómo estás? Te ves muy linda hoy —sonreí tímidamente, y bajé mi mirada.


    —Bien, aunque la fiesta se ve un poco aburrida. —abrió los ojos como platos— ¿Aburrida? Imposible. Ven vamos, te demostraré que no es aburrida —tomé un sorbo de cerveza y lo acompañé. No tenía nada que hacer, y no pensaba ir con Victoria.

    Pasamos por la grandísima y hermosa piscina que había allí. Me tomó de la mano y comenzó a bailar. Al principio dudé si seguirle el juego, pero terminé haciéndolo.

    Empezamos a hablar, hablamos de un montón de cosas, y recordando cosas icónicas que habían sucedido en la escuela. Hasta que en un momento sentí como alguien detrás me empuja hacia al lado, Aaron intentó sostenerme pero fue en vano. 

    Cerré los ojos e impacté contra la fría agua. Me comencé a desesperar y nadé hacia arriba. Respiré bruscamente intentando tranquilizarme, Noté la risa de todos. Sentí unas increíbles ganas de llorar, pero me contuve. Aaron me dio la mano para ayudarme a salir, la tomé e hice fuerza para salir de la piscina.

    —¿Estás bien? —solté un suspiro repleto de irritación. Ignoré su comentario y corrí hacia la salida, veía borroso gracias a las lágrimas que querían salir de forma desesperada y también a las gotas de agua que recorrían mi cuerpo. Sentí un agarre en mi muñeca impidiéndome caminar.

    Rodrick Heffley estaba allí, ¿Venía a burlarse? Sentí demasiada vergüenza a que me vea así. Aparté mi vista de él y respiré hondo para no soltarme en llanto.

    Se quitó su chaqueta y me la entregó en mis manos —Se te ve absolutamente todo— susurró. Bajé mi mirada, y... Maldición, se notaba mi brasier color negro y mi ropa interior. 

    Me generó más ansiedad verme en ese estado. Rodrick me tomó del brazo nuevamente y me llevó hacia afuera. Me puse su chaqueta intentando taparme la mayor parte de mi cuerpo. —¿Viste todo?— pregunté, a lo cual asintió con una pequeña risilla.

    —Soy una idiota — Cerré mis ojos y algunas lágrimas salieron, aunque ni se notaban por los rastros de agua en mi rostro. — No eres una idiota... Tal vez un poco. Aunque fue un poco gracioso.— Golpeé su hombro riéndome por su comentario.— Cállate.

    Caminábamos por las frías calles. De su bolsillo sacó un cigarro de su bolsillo y me lo entregó junto con un encendedor. Inhalé sintiendo como el humo secaba mi garganta.— Gracias.

    Pasé mis dedos por mis ojos ya que me ardían los ojos por el cloro de la piscina. Al observar mis dedos, noté como estaban llenos de color negro por la maldita máscara de pestañas y mi delineado. Mue mala suerte. —Maldita sea.

    —¿Qué?

    —¿Cómo que "qué"? Mírame, soy un desastre. Más bien siempre lo he sido —susurré lo último.

    —Te ves bien así, diría que sexy —Mis mejillas empezaron a arder ¿Me había sonrojado?

    —¡Heffley! Hijo de puta. ¿Estás enamorado de mi o...? Bueno, pero no te culpo, soy irresistible — dije, aunque no pude evitar soltar una carcajada.

    —Ya quisieras que un hombre tan atractivo como yo se interese en ti—  Alcé una ceja, y paré de caminar, Haciendo que este repita mi acción.

    —Eres un estúpido... ¡Por Dios, Rodrick! ¿Recuerdas cuando una vez fuimos a casa de Josh a escuchar todos los discos de Queen? Fue demasiado divertido, y recuerdo que vomitaste en frente de Hills.

    Rodrick rió asintiendo.— Ni me lo recuerdes —Ambos nos  sentamos en la orilla de la acera.— Ok Heffley, confío en ti. Espero no me vayas a secuestrar, ni nada por el estilo. A veces me generas desconfianza.  

    —Podría hacerlo, pero muchos me vieron salir contigo y sabrían que fui yo. Lástima.

    Rodeé los ojos y le di un puño en el hombro. —¿Cómo está Greg? Claro, si no lo mataste ya.

    —Ganas no me faltan, pero está bien. Es un mocoso insoportable —Me reí.— Pobre de él. Debe ser horrible tener a un hermano como tú.

    Le di una última calada al cigarro y se lo pasé a él.

fuck it; rodrick heffleyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora