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El timbre para el primer receso del día sonó y un castaño se encontraba observando a su amigo de ojos azules dormir cómodamente sobre su pupitre. A su lado se encontraba un pelinegro que miraba aquello con fastidio y una castaña que miraba todo de manera divertida.

— De tanto que lo miras se va a degastar

— ¿Celoso espadachín?

— ¿Celoso? ¿Por qué tendría que estar celoso de que Leessoo se quede mirando al pendientes?

— No lo sé

— Androssi deja de molestar a Hatsu

— Mira tú la pareja ya salió a defenderlo

— Van a despertar al pendientes si siguen discutiendo

— No estamos discutiendo

— Solo estamos dialogando de manera alta

— Y su dialogo es tan molesto y ruidoso que hace que me levante

Los tres amigos voltearon a ver al chico de ojos azules opacos que los miraba con fastidio, el chico soltó un bostezo antes de estirarse un poco y levantarse de su asiento.

— ¿Dormiste mal cariño?

— Deja de llamarme así y si, así que evita molestarme

— Uy la bestia despertó de mal humor

— ¿Cuándo no está de mal humor?

— Eso es un buen punto

— Ya cállense, me dan dolor de cabeza

Los tres amigos volvieron a quedarse mirando al chico quien seguía caminando por el pasillo hacía la azotea, significaba que quería estar solo. Entre los tres se miraron y decidieron respetar su deseo, además de que ya habían jugado bastante con su suerte si es que el de cabellos celestes estaba de ese humor.

Al llegar al comedor vieron en la mesa que se acostumbraban a sentar al castaño menor y pelirrojo esperándolos. Pasaron a comprar algo y fueron a sentarse en la mesa. El castaño mayor quiso reírse al ver al castaño menor buscar con la mirada al chico de ojos azules, la castaña también lo noto, pero quiso hacer como si eso no hubiera ocurrido y el pelinegro lo noto, pero no era su tema.

— Mi amor está en la azotea

— No le digas así

— ¿Ahora eres él?

— Eso es lo que él hubiera dicho

— Leessoo ¿Agüero está mal?

— No, solamente está de mal humor.

— ¿La tortuga azul de mal humor?

— Parece que no ha dormido bien o tal vez paso algo en su casa, ya saben cómo es él.

— Voy a ir a verlo.

El castaño menor ya se estaba levantando pata pode ir a buscar al chico de ojos azules, le estaba preocupando, pero fue detenido por un agarre en su muñeca y vio a la castaña que le miraba con una sonrisa.

— Mejor quédate Baam, ya se le pasará su berrinche a la bestia y vendrá.

— Pero ayer él y-

El castaño se quedó callado por un momento y a su mente vino el momento en que el chico le había llamado por su crisis, la promesa que le hizo de ir con él después del almuerzo y el cómo se había olvidado por su amiga rubia. En ese mismo instante quiso pegarse contra la pared.

— Lo siento Androssi tengo que ir

Se soltó del agarre y corrió para ir a la azotea, lo que no vio fue a una castaña con un rostro enojado y algo triste.

My Person [BaKhun]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora