My Person [BaKhun]

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Primero que nada, se tenía que tranquilizar y calmar sus pensamientos sobre lo que estaba pasando. Su querida amiga rubia había enviado una foto en donde salían ellos dos con la chica besándole la mejilla y él riendo al chico de ojos azules. No entendía porque lo había hecho eso la chica, pero tampoco quería entender por completo porque aquello le molestaba y sobre todo no quería entender porque se sentía preocupado por lo que pensará el mayor sobre esa foto y la salida que había tenido con su amiga.

— No quiero que piense que teníamos una cita.

Aquel murmullo salió de sus labios mientras miraba el signo de llamar o no a aquel contacto que le había clavado el visto a su mensaje. Movió su cabeza de derecha a izquierda para tratar de calmar sus pensamientos y no hacer nada imprudente, no hasta que entendiera todo. Y como si fuera cosa del destino recordó aquella pregunta que le había hecho su amiga de ojos color miel hace varios días atrás.

"— Baam ¿Te gusta Agüero? "

Sus mejillas se tiñeron de rojo de manera leve ante ese recuerdo y todas sus acciones comenzaron a tener sentido al igual que sus pensamientos.

— Creo que la he cagado

Volvió a murmurar mientras elevaba su mano libre hacía sus ojos para tapar estos antes de subirla para peinarse su cabello castaño. Una leve sonrisa se posó en sus labios y decidió consultar todo con sus hermanos y su padre, aunque su madre sonaba mejor opción al recordar los sobreprotectores que eran con su persona.

— Pero antes de eso tengo que arreglar esto.

Su dedo se estiro de manera rápida antes de marcar el signo de llamar y elevó el celular hasta su oreja para escuchar los tonos de timbres. Fue hasta el segundo timbre en donde contestaron creando un silencio.

— Agüero

— ¿Si?

— Viste la foto ¿verdad?

— Si

— Por favor no lo malinterpretes

— ¿Eh?

— Rachel me pidió que saliéramos después de no vernos por un buen tiempo, luego de pasear y hablar por el centro me pidió tomarnos unas fotos. No pensé que te mandaría alguna de las fotos que nos tomó con mi celular. Solo salimos como amigos y eso.

El de ojos dorados comenzó a morderse su labio ante la ansiedad de recibir alguna respuesta por parte del mayor que se había quedado en silencio ante su explicación, pero era un silencio que estaba durando bastante. Hasta que se rompió por la risa del mayor, aquello alivio el corazón del menor, pero también provoco que frunciera su ceño.

— ¿Por qué te ríes?

— Porque me parece tierno que estés tan preocupado por lo que piense sobre la foto.

— ¿Eh?

— Todo está bien Baam

— ¿Enserio?

— Si

— Me alegro de escuchar eso

El menor no pudo evitar sonreír con energía mientras que sus ojos color dorado brillaban con más intensidad. Toda la gente que pasaba por allí podía decir que el chico les deslumbraba como el mismo sol. Era como una pequeña luz que llamaba la atención.

— ¿Dónde estás ahora?

— Voy camino a casa ¿Por qué?

— Nada solo quería saber

— ¿Quieres que vaya a tu casa?

— Eres más que bienvenido

— Voy en camino