39- Luna de amantes

3K 397 47
                                    

Los aplausos sonaron cuando los flamantes dueños de ese hotel andrajoso que se estaba convirtiendo en la perfecta combinación del lujo, romance y sofisticación salieron a escena

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Los aplausos sonaron cuando los flamantes dueños de ese hotel andrajoso que se estaba convirtiendo en la perfecta combinación del lujo, romance y sofisticación salieron a escena.

Danisa fue quien habló, seguida de Kellan quien explicó todos los cambios que tenían preparados no sólo para el hotel sino para la comunidad.

Trabajaban sobre la base de una economía sustentable. Lautaro y Chase habían sido los impulsores del concepto que habían aplicado primero en Ciudad del Cabo, luego en Jamaica y ahora en Río de Janeiro. No sólo prosperaban ellos, sino fortalecían la economía de la región donde se encontraban, incorporando personal, capacitándolo, dándole oportunidades de mejora y movilidad social ascendente.

Crezcamos juntos, ese era el lema que habían instalado en cada lugar de trabajo para de este modo, generar oportunidades laborales en entornos llenos de marginalidad.

Personajes políticos y de todo el país habían llegado, era un evento para el que Kellan y Lautaro sobre todo habían trabajado incansablemente. Los aplausos llegaron de todos los lugares del jardín haciendo eco frente al viento que se levantaba provocando que las olas rompieran con más fuerza.

Lo ideal habría sido llevar adelante el evento en uno de los impresionantes salones con los que contaba el hotel y que habían refaccionado cuidadosamente, sin embargo, todos habían coincidido que perder el escenario natural frente a ellos era un sacrilegio.

Azali se mantuvo a varios metros de Danisa y Bastian quien se mostraban amables, saludaban, hablaban entre sí y reían.

La pantera estaba nerviosa desde el día anterior en el centro comercial, en donde había creído ver varias veces una misma camioneta que los seguía y adentro de las instalaciones algunos hombres con actitud "naturalmente sospechosa".

Danisa se acomodó su largo cabello dejando al descubierto su fina y encantadora espalda. Mierda, ¿qué daría un hombre por estar sobre esa belleza un par de horas? Los orbes grises lucían más brillantes e intensos por el maquillaje, resplandecían como diamantes en el rostro de porcelana.

― No para de mirarte — murmuró Bastian.

― Es mi custodio, le pagan para eso.

Dijo la chica, bebiendo de la copa de champagne que Bastian había puesto en sus manos.

― No, ese hombre quiere conocer tu tesorito.

La rubia lanzó una carcajada.

― ¿Tesorito? ¿de dónde mierda sacas esas ridiculeces?

― Al menos te hice reír, estás muy tensa...

― No estoy tensa, sólo un poco triste.

― ¿Qué te ocurre?

― No lo entenderías.

― Pruébalo...

― Debes haber escuchado de tu hermano mi historia.

AMAZONIA S.B.O Libro 9 (Romance gay +18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora