Stupid Whore #1

53 || Dulce venganza (+18)

Dulce venganza

Quedaban dos días para la segunda prueba. Solo dos días y yo todavía no encontraba una forma segura de poder respirar bajo el agua. Y odiaba la idea de tener que recurrir finalmente al hechizo de Tom, pero no parecía tener otra opción .

Lo estaba esperando en la biblioteca ese día. Recuerdo que llevaba encerrada allá desde la mañana rebuscando libro por libro algo más seguro que eso, pero seguía sin encontrar nada que me convenciera. Le había dicho en el desayuno que nos vieramos ahí para que me ayudara, pero solo me pidió mis bragas e ignoró lo que le había dicho. Supuse que iría luego.

Escuché los pasos de Tom acercarse, y lancé un gemido extraño de impresión cuando me tomó super fuerte del brazo y me estampó contra uno de los libreros. No me lo esperaba. Y tampoco esperaba ver su hermoso rostro con expresiones tan duras y frías. La madre, ¿Ahora que hice?

— Hola para ti también — dije con sarcasmo.

— ¿Te cogiste a Cédric Diggory? — preguntó serio colocando su mano al rededor de mi cuello y haciendo presión.

Ay

Traté de controlar las comisuras de mis labios cuando escuché esas palabras salir de sus labios. Sabía que iba a terminar enterándose, ya que yo se lo había dicho a Malfoy, y Malfoy para vengarse de mi, seguramente iba a regarlo.

Buena jugada, Leblanc.

Y dirán: "rompiste tu promesa con Cedric", pues si, porque realmente, no soy una mujer de palabra. Solo no quería que Draco se enterara por terceros. Si se enteraba, quería que fuera porque yo se lo sacara en cara, y para eso tenía que asegurarme de que Cedric no lo contara primero.

— ¿No? — dije no muy segura y me pegó más hacia la pared, aumentando la presión de su agarre.

— No juegues conmigo ahora, Adele. No estoy de humor y puedo ir a matarlo.

Alcé las cejas.

¿otra vez?

— ¿Y por qué a él? Te recuerdo que se metió entre mis piernas porque yo lo permití.

— Porque no puedo matarte a ti. Ahora dime, ¿te lo cogiste o no te lo cogiste?

— ¿Cual es el problema si lo hice? tu te cogiste a Daphne Greengrass.

Sus ojos chispearon una furia aterradora.

— ¿O sea que te lo cogiste solo para vengarte? ¿De esto se va a tratar, Adele? — cuestionó, cínico. Hice como si pensara.

— En realidad, no — sonreí de medio lado -. Me lo cogí mucho antes de saber que te habías cogido a Greengrass — confesé. Me soltó de golpe, pasándose las manos por el cabello. Parecía algo... desesperado.

Así se siente.

— Te quiero lejos de él — dijo finalmente volviendo a voltearse hacia mi. Lancé una carcajada seca.

— Tu no eres quién para decidir eso — lo reté —. Es más, creo que deberíamos dejar esto ya — me encogí de hombros —. Así tu te sigues tirando a Greengrass y yo a Diggory sin remordimientos — dije. Se acercó peligrosamente a mi y entrelazó sus dedos en los cabellos de mi nuca, tirando de ellos hacia atrás.

— No — tajó —. No te quiero cerca de Cedric, Adele. Y lo digo muy en serio. Tu no puedes estar con él — un gemido de dolor salió de mis labios cuando enterró sus uñas en mi cuello —. Y no quiero que lo estés.

— Me importa una reverenda mierda, Tom — gruñí —. Si tu te puedes coger a quién se te de la gana entonces yo también, porque desde que intentaste borrarme la memoria, no somos exclusivos — dije entre dientes —. Entonces suéltame y no te atrevas a tratar de amarrarme a tu verga, porque te lo dije muy claro desde el principio: no eres irremplazable. Y cuando quiera puedo simplemente hacerte de lado, ya que no eres el único hombre con pene en el mundo mágico — Sacudí sus manos de mi con brusquedad, y él dio dos pasos hacia atrás, furioso como un toro. No me importó —. Dios, ni siquiera entiendo por qué estás haciendo esto si yo te vi muy feliz con tu nueva compañera...