42. Bajo un árbol

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—¡Anne! Estás en el tablón —le dijo Diana emocionada—.

—Sí, Charlie te puso una nota —terminé de contar—.

Anne nos agarró a ambas de las manos y nos adentró a la clase. Paró en seco cuando Charlie apareció delante suya.

—Buenos días Anne —le saludó este—.

—Estoy ocupada, lo siento —respondió cortante Anne—.

Anne lo esquivó pasando entre dos mesas, Moody se encontraba encima de una hablando con un compañero.

—Bueno Anne, ¿vas a bailar con Charlie mañana? —preguntó retintineándose Josie Pye—

—¿Qué yo qué?

—La señorita Stacy ha preparado un ensayo para el baile de la fiesta, para todos —explicó Ruby—.

—Chicos y chicas —recalcó Tillie—.

—Lo que significa... Tocamientos —Ruby lucía algo incómoda—.

—Una pena lo de Moody —me miró Josie—, seguro estabas deseando bailar con él en la fiesta.

—Los bailes no son lo mío... —intenté evitar el tema—

Me giré al notar como algo, o más bien alguien, me tocaba el hombro. Se trataba de Moody.

—Creo que algunos se van a adelantar con la práctica... —canturreó Josie Pye—

—Déjalo ya Josie —le dijo serio Moody, luego me agarró de la muñeca con cuidado y me alejó de las chicas—. Toma, esto es tuyo —me devolvió la cesta—.

—¿Te gustaron? —pregunté mientras jugaba con la cesta entre mis manos—

—Sí, no se como acertaste, las de chocolate son mis favoritas.

—Puede que el incidente de las bombillas el año pasado me diera una ligera idea.

—Ay no me lo recuerdes —se pasó la mano por el pelo, eso me recordó a lo que vi ayer y no pude evitar soltar una carcajada—. ¿Qué pasa?

—Perdón, es que me acordé de algo... ¿Cómo tienes la cabeza? —pregunté bromeando—

—Pero si no me ha pasado nada en la cabe... ¡Ah! ¡¿Lo viste?! —asentí aguantando la risa—

—¿Qué fue lo que hiciste?

—Simplemente levantarme a mirar por la ventana, mi madre exagera muchísimo, fue un corte no un hueso roto —se sentó en una de las mesas—. Es que ya me dolía el culo de estar tanto tiempo en el sofá.

—Puede que exagere un poco, pero al final lo único que hace es preocuparse por ti, es normal —me senté a su izquierda—. Eres su niño pequeño.

—¡Oye! —se inclinó hacia mí dándome un pequeño empujón con su hombro en represalia, por suerte tenía la mano derecha aferrada al borde de la mesa— ¿Y cómo es que pensaste en ese detalle?

—¿Te refieres a las magdalenas? —asintió como respuesta— Bueno tú dijiste que me tenías cierta sorpresa, pero se fue al garete después de lo de la pierna... Así que pensé en hacerte una pequeña sorpresa en compensación.

—¿Sabes? —se movió acercándose un poco más a mi— A mi hermana le has caído genial, bueno y a mis padres. Pero mi hermana empezó a preguntar sobre ti, una vez te fuiste —apoyó sus manos en la mesa, sin darse cuenta de que su mano izquierda estaba sobre la mía, la calor no tardó en concentrarse en mis mejillas—, cosas como por ejemplo si eras parecida a Anne, en personalidad... —su voz se fue apagando al finalizar la frase, agachó la cabeza y entonces fue consciente de que nuestras manos estaban juntas—

—Isabelle y Moody... Sentados bajo un árbol... —Moody apartó su mano al instante de escuchar la voz de Josie cantando—

—B-e-s-a-n-d-o-s-e —deletrearon cantando Tillie y Jane junto con Josie—.

—Besaros, por los viejos tiempos —dijo con algo de maldad Josie—.

—Te estas pasando ya Josie —le habló seriamente mi hermana—.

—Sí, ya cansa —le apoyó Diana—.

—Oh venga, ni que fuera algo que no hubieran hecho ya... No tiene importancia, besaros —insistió—.

—En ese entonces éramos niños, era un juego. Ya no lo sigue siendo —dijo algo nerviosa Diana—.

—Venga Moody bésala, que la bese, que la bese —empezó a cantar Josie mientras daba palmas y parte de la clase, menos Anne, Diana y Ruby, empezaron a seguirle—.

Miré a Moody sorprendida por lo que acababa de pasar en apenas un minuto. Este me observó nervioso y tragó saliva. Diana llevaba razón, cuando pasó aquella vez era un simple juego, ahora es completamente diferente, ahora podría acarrear consecuencias. Ambos nos bajamos de la mesa.

—Está bien —susurró para sí Moody—.

—No tienes por qué hacerlo —le dije nerviosa intentando convencerlo para que no le hiciera caso a Josie Pye—.

—No pararán hasta que consigan lo que quieren, ya lo sabes.

—No hay por qué hacerlo —insistí—.

—Es un simple beso y se callarán, no es para tanto.

—¡Que no quiero que sea así! —al segundo de decir eso me di cuenta de cómo sonó—

La clase se quedó en silencio.

—¿Qué? —preguntó algo sorprendido Moody—

La clase hizo caso omiso a lo que dije y empezaron a canturrear de nuevo.

—¿Qué quiso decir eso? —preguntó por encima de todas las voces acercándose hacia mi rostro—

—Que no hay porque darle todo lo que quiere —intenté esquivar aquella pregunta también—.

Moody echó la vista a un lado pensándoselo un poco, sus ojos se abrieron más todavía, pareciera como si hubiera tenido una idea.

Alargó su brazo diestro para agarrar mi mano derecha y ponerla a la altura de su pecho. Se inclinó levemente y me dejó un beso en el dorso de la mano.

Se puso de nuevo derecho y sonrió satisfecho hacia Josie.

—Querías un beso, pues ahí lo tienes —le encaró—.

Josie pareció quedarse muda, mientras que el resto de la clase, excepto Ruby, empezaron a aplaudir.

—¿Qué está pasando aquí? —la señorita Stacy entró a la clase—

—¡Moody besó a Isabelle! —nos señaló Josie—

La señorita se nos acercó.

—¿Es cierto eso?

—Fue solo un beso en la mano —la señorita Stacy no parecía muy feliz—, fue mi culpa, Isabelle no tuvo nada que ver.

—Pero si la culpa fue de Josie Pye —salió a defendernos mi hermana Anne—. Ella insistió e insistió.

—Anne esto no va contigo, e igualmente por mucho que Josie Pye insistiera en eso no es excusa para hacerle caso —se giró hacia nosotros—. Isabelle te vas a librar, pero tú Moody. Tendré que hablar con tus padres —a Josie Pye se le escapó una carcajada—. No creas que te vas a librar tan fácilmente, hablaré con tus padres sobre tu forma de acosar a tus compañeros —la sonrisa de Josie se esfumó—. Bien, vosotros dos no os quiero ver a menos de un metro de distancia —la miré sorprendida ante eso—. No quisiera tener problemas con vuestros padres —explicó—. Bueno venga, todos a vuestros sitios que empezamos las clases.

Miré a Moody a punto de decirle algo, pero la profesora le agarró por los hombros y lo alejó de mí, llevándolo hacia su pupitre. Me hizo una señal con la mirada para que me sentara en el mío junto a Ruby.

Maldita seas Josie Pye, al menos a ella también le regañarán.


(~^.^)~ fin del capítulo ~(^.^~)

Lo prometido es deuda, aquí os dejo otro capi. Espero mañana traer otro más <3

Isabelle with an &quot;e&quot; ~ Moody Spurgeon (awae)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora