ʙᴀʙʏꜱɪᴛᴛᴇʀ •ʜʜᴊ+ʏᴊɪ•

12

Hoy, después de muchísimo tiempo, logré tener una tarde libre de ansiedad y bajones emocionales, e incluso tuve ganas de e inspiración para escribir, siendo este el resultado.

Muchísimas gracias por todos los mensajes de apoyo que me han ido dejando a lo largo de estos meses, por ser tan pacientes en cuanto a las actualizaciones, y por ser comprensives conmigo. Han sido unos meses difíciles, pero ya veremos qué sucede.

Disfruten el capítulo. ♡

...

Una semana entera había transcurrido desde que Minho descubrió la infidelidad de Chan hacia su persona; una semana en la que Minho estuvo llorando todos los días hasta quedarse profundamente dormido; una semana en la que Jisung y Hyunjin se encargaron de levantar pañuelos con mocos y de secar cada lágrima que vieran salir de los ojos de su mayor, y tan solo unas horas desde que ambos menores decidieron que debían sacar a Minho de su agujero de lamentos y miseria.

- Ya no soporto verte de esta forma, Hyung... -Murmuró Jisung, botando el milésimo pañuelo con mocos que le había tocado recoger en el transcurso de la mañana, y eso que el reloj apenas marcaba las diez.- En serio, jamás imaginé que algún día te vería de esta forma...

- Oh, ¿En serio? ¡Tal vez sea porque ninguno de nosotros imaginó que Bang hijo de puta Chan me seria infiel! -Sollozó fuertemente, pataleando de manera infantil aún sentado en el suelo mientras agarraba otro pañuelo y lo utilizaba para secar sus empapadas mejillas.

Hwang, quien desde el segundo piso había logrado escuchar aquél grito por parte de Lee, cerró momentáneamente los ojos y se encargó de cargar a la recién nacida a la que acababa de brindarle un cambio de pañal, la cual agarró una parte de la cadena de oro que colgaba del cuello de su progenitor y la metió en su boca, soltándola rápidamente con una mueca de disgusto de la que Hyunjin se hubiese reído en cualquier otro momento, pero no ahora. Estaba harto.

Bajó las escaleras rápidamente pero sin agitar demasiado a su pequeña, a la cual recostó en el centro de un fuerte de almohadas que había improvisado en el sillón para tres personas, antes de girarse hacia Jisung y Minho, los cuales lo miraban expectantes luego de su repentina aparición.

- Tú. -Señaló al mayor de los tres, quien frunció ligeramente el ceño a la vez que sorbía su nariz.- Quiero que ahora mismo te pongas de pie, vayas a ducharte, te vistas de forma decente y te arregles. Iremos a comer y no hay nada que puedas decir o hacer para oponerte, Lee Minho...Hyung. Lee Minho Hyung. -Asintió mientras cruzaba sus brazos por encima de su pecho, mostrándose firme a pesar del increíble terror que le causaba la mirada asesina de su mayor sobre él.

Al cabo de unos segundos, Minho se encontraba caminando escaleras arriba mientras susurraba quejas al aire, repitiendo las palabras de Hwang con un tono burlón y en voz baja, hasta que se vio entrando en la ducha del cuarto de su actual anfitrión y cerró la puerta, asegurándose de dar un estruendoso portazo para aclarar que realmente no estaba feliz con el chico de labios gruesos, y mucho menos estaba complacido con su idea de salir.

Hwang cerró los ojos y atrapó el puente de su nariz entre las yemas de sus dedos índice y pulgar derechos, manteniendo su mano izquierda apoyada en su espalda baja mientras se repetía mentalmente el tener paciencia con Minho, aunque hace tan solo un par de minutos atrás le hubiese cortado abruptamente el inicio de su tercer berrinche del día.

- "Lee Minho...Hyung. Lee Minho Hyung". -Jisung repitió sus palabras con una sonrisa ladina cargada de diversión, provocando que el contrario frunciera ligeramente el ceño y abriera los ojos, regalándole una mala mirada.

- Sólo cierra la boca, Sung.

...

- Me hiciste salir de mi agujero de lamentos y miseria únicamente para traerme a un estúpido café con temática de florería...qué lindo... -Murmuró Lee con un tono despectivo, cruzando sus brazos por encima de su pecho mientras su ceño se mantenía fruncido y él caminaba detrás de ambos menores, quienes soltaron un milésimo suspiro y, para sorpresa de ambos, hasta la bebé se les unió esta vez. Minho estaba siendo un auténtico dolor de culo hasta para la tierna recién nacida.

Qué vergüenza.

- Bueno, Hyung. Si quieres, puedes adentrarte un poco más en éste estúpido café con temática de florería y apartar una mesa para que los tres podamos pasar un rato agradable. ¿Te parece? -Propuso un muy hastiado Jisung, quien cerró los ojos e inclinó la cabeza hacia atrás a la vez que movía de arriba hacia abajo la punta de su pie derecho, siendo una clara señal de la desesperación que había comenzado a sentir gracias a la odiosa actitud de Minho. Ahora sí que se arrepentía de haberse reído de Hyunjin hace un par de horas atrás.

- Mh...no. -Respondió Minho con ironía.- Voy a ir al baño. Luego les escribo y me dicen dónde están. -Sentenció mientras se daba media vuelta y caminaba hacia los sanitarios, dejando a sus tres menores solos en la fila para ordenar su comida y bebidas.

- Ya no quiero comprarle nada. Que se joda. -Murmuró Jisung mientras hacía un tierno puchero, se cruzaba de brazos y agachaba ligeramente la cabeza, regalándole a Hwang una imagen sumamente tierna a pesar de las palabras que había utilizado.

- Ya, no pasa nada... -Sonrió ligeramente, dándole un par de palmaditas en la espalda a un berrinchudo Jisung, quien seguía murmurando lo mucho que le molestaba la actitud de Lee y que no creía posible que lo tratara de esa forma después de que él, con todo el dolor de su corazón, le había dejado abrazarlo mientras lloraba desconsoladamente y llenaba de mocos sus camisas favoritas.- Dios. Sunggie, si no te conociera tan bien, diría que estás enamorado de él. -Insinuó juguetón, soltando una carcajada ante la mueca de asco que hizo el contrario.

- No, Jinnie, no bromees así. -Negó, sacudiendo su cuerpo al simular un escalofrío.- No, pero, ya en serio. Sabes que eso fue hace mucho, y que ya hay alguien más que logró captar mi atención...

- Lo sé, Sunggie. Sólo estaba bromeando. -Sonrió con calidez mientras alborotaba el cabello del contrario, quien le sonrió antes de avanzar en la fila y ordenar la comida de los tres.

Minutos después, mientras ambos menores tomaban asiento en la primera mesa vacía que habían visto, y Hwang sentaba a su bebé sobre su regazo, los teléfonos de ambos chicos comenzaron a vibrar, por lo que compartieron miradas llenas de confusión antes de desbloquear sus respectivos aparatos, y ver que eran mensajes de Minho en un chat grupal que acaba de crear únicamente con ellos dos.

↳ Minho Hyung 💀

No estoy diciendo que accidentalmente me quedé mirando fijamente a este chico lindo y él se dio cuenta...
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Pero es exactamente lo que sucedió
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Ahora tengo un número telefónico al qué marcar y un falso interés por las flores...
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Ayuda
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