|F|r|a|g|m|e|n|t|e|d| Weasley Stories. (Bill Weasley)

|Notas| |misspelled|

-Entonces ya no te gusta? – Jossette pasaba la pagina mojando su dedo con saliva mientras Pince no la veía.

-No estoy diciendo eso – Mae le decía dándose una media vuelta viéndola de frente – solo que me rendí, no que me ha dejado de gustar.

-Y porque te rendiste? – Tonks levantaba la mirada – Si amas a alguien no deberías rendirte.

-Aplica ese consejo en tu vida Tonks, pero no puedo seguir perdiendo el tiempo con Bill – Mae le decía enojada.

Jossette se estiró hacia atrás confundida por la mala actitud de su amiga.

-No te pongas así con Tonks Mae, ella no tiene la culpa que William tenga la cabeza en la luna – Jo agarraba su cabello peinándolo hacia atrás – aparte no es nada malo tener la cabeza en la luna, te evita perder el tiempo con tonteras como el amor adolescente.

-Hablas como si quisieras estar toda la vida sola Jo – Tonks le preguntaba elevando un tanto la voz asustada – hasta yo pienso en encontrar el amor... algún día.

-No digo eso, solo que entiendo que los sueños en algunas personas sean más grandes que el amor adolescente – cerro su libro preparándose para irse – miren a Charlie.

-Que pasa con Charlie? – Mae le preguntó confundida.

-Nada, solo que ahí viene Charlie – Jossette les decía mientras se levantaba – me voy, tengo que cumplir una promesa.

Así sin más, comenzó a caminar dándole solo una mirada a su hermano pequeño que se integraba a las demás chicas que veían como Jossette se alejaba de la biblioteca.

Comenzó a caminar con sus notas en la mano, pasando por los pasillos, cruzando las puertas y llegando hasta el lugar más recóndito de todo el terreno en el bosque prohibido.

Aunque era difícil saber exactamente donde estaría, oía como sus pensamientos en su cabeza se hacían más intensos, como la pensaba, como la halagaba en el silencio no llamando la atención de ninguna criatura, de ningún ser que estuviese paseando a esas horas de la tarde.

-Llegaste rápido – Bill le decía mientras la sorprendía tomándole la mano.

-Que querías mostrarme? – Jossette tomó aún más fuerte su mano.

-Te tengo una sorpresa –

...

Los polvos flu funcionaban bien, la distancia no era muy larga y ella de igual manera lo esperaba, porque el tiempo se acercaba de forma peligrosa y adelantada.

Al momento que Severus Snape llegaba a la mansión Morrié, Adeline se aproximaba hacia él caminando rápidamente.

-Llegaste rápido – Adeline le decía medianamente sorprendida.

-Claro, te tengo un mensaje –

-Es sobre Jossette? – levantó las cejas interesada – pasa a la sala.

-Por que más vendría hacia tí Adeline? –

La rodeo caminando por la casa, se notaba que la conocía muy bien, como si esa hubiese sido su casa en algún momento de la vida, pero así no era precisamente.

Adeline se había quedado con la mansión Morrié, esa que en su decoración predominaba un verde musgo, una alianza en la familia Morrié, donde se había hecho suyo el logo de un cuervo.

Severus se sentaba frente a la mujer que, tomaba uno de sus cabellos totalmente negros y comenzaba a acariciarlos, esperando que el profesor hablara.

-Que te trae por aquí Severus? – le preguntó nerviosa atrayendo hacia él una taza de su más fino té.