Un desastre.
Un chico deprimido.
Sarcástico.
Lleno de mentiras.
No le queda nada.
Llegó a mi vida en mi peor momento y me dio fuerzas.
Cargó con mis angustias y miedos.
Todo eso es Jaden.
Cuando se ama simplemente lo entregas todo y salir destruida...
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Jessica Jones
El sol golpea mi rostro fuertemente, a regaña dientes intento abrir mis ojos, aunque me cuesta bastante.
Este es el lado negativo de una habitación con hermosos ventanales con vista a las montañas.
Cuando finalmente logro abrir bien mis ojos miro a mi lado, Jaden no está.
Mi corazón se acelera y no puedo evitar preocuparme.
No.
Dijo que no me dejaría.
Dijo que lo intentaríamos.
Me siento en la cama e intento encontrar algún indicio en la habitación que me diga que no se ha ido, que sigue aquí.
Suelto todo el aire en mis pulmones cuando veo su remera colgando de la madera de la cama.
Mierda, casi me da un infarto.
Me levanto y me pongo mis bragas y luego solo su remera, sonrío en cuanto siento su olor impregnado en ella.
Salgo de la habitación y camino a la cocina, lo encuentro con sus pantalones de pijama grises y sin remera, está intentando hacer maniobras con el sartén y la masa que hay dentro, tipo que de vuelta en el aire, pero no le resulta demasiado bien.
—¿Alguna vez despertaré contigo a mi lado?— pregunto con los brazos cruzados, me mira y me sonríe mientras pasa sus ojos por mi cuerpo de arriba a abajo, deja el sartén en el fuego y lo apaga.
—Te hacía el desayuno.— dice y se acerca a mi.
—Podrías haber esperado a que despertara. Casi me da algo al ver que no estabas — dije cabizbaja
—Te dije que no me iría.
Suelto un suspiro y niego con la cabeza.
—Si, lo sé. Soy una tonta.
Me sonríe y se acerca para dejar un tierno beso en mis labios, luego nos sentamos en la isla de la cocina para desayunar.
—¿Has pensado en qué hacer con lo de la universidad? Solo te faltaban un par de meses para poder graduarte, quizá si...— me interrumpió
—Me parece inútil seguir esforzándome con eso. La vida que tengo ahora nunca me va a permitir hacer algo de lo que planeaba antes.
Suelto un suspiro— Eso es una mierda.
—Si... si, lo es. Pero dejemos de hablar de eso, estoy jodidamente harto. ¿Tienes algún plan para este verano con tu papá?
—No lo hemos hablado, yo creo que nos quedaremos por aquí y simplemente pasaremos tiempo juntos, además Carla tiene que cuidar su embarazo. Peter ya quiere organizarle un baby shower y todo.— no pude evitar sonreír.
