Capítulo 37

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Hoy llevo un día de mierda... Pablo está con fiebre por la quimio y solo quiere estar en brazos.
Laura ha estado aquí está mañana para vernos pero solo nos ha servido para discutir porque, como siempre, no está de acuerdo con algunos tratamientos de nuestro hijo, pero no entiende que ella aquí no es médico es una madre más... Se está haciendo duro.

Mientras sigo en mi mundo escucho unos golpecitos al cristal que me interrumpen, es Laura e inmediatamente mi sonrisa aparece porque cuando más la necesito ella aparece como un bote salvavidas, siempre está cuando me hace falta.

-Hola..

+¿Qué haces aquí? -Digo sin poder ocultar mi felicidad-

-Venir a ver a mi morena favorita

+Idiota

-No quiero que discutamos por tonterías... Dame un minuto y vuelvo

Y se pira, a saber a dónde va...

Al poco tiempo aparece con el pijama del hospital y una bata estéril encima, patucos y toda camuflada, solo le veo los ojos, pero que ojos... Cuántas ganas de tenerla cerca.

-Ya estoy aquí... -Y me abrazo a ella como nunca lo he hecho, porque es nuestra manera de decirnos lo mucho que nos queremos y la falta que nos hacemos sin palabras.-

+ Está dormido pero le hará ilusión verte, lo podemos despertar

-No, déjalo, ahora quiero estar un ratito contigo primero, luego ya estaré con mi niño. ¿Cómo estás?

+No lo sé, esto es una mierda... -Digo a punto de llorar-

-Lo sé mi amor, pero es lo mejor para nuestro niño, y luego nos reíremos de esto.

+ Eso no te lo crees ni tú...

-Tienes razón pero tenía que intentarlo, se me da mal dar ánimos.

+ Si a ti se te dan mejor otras cosas...

-Cierto y me muero por hacerlas pero no puedo...

+ Oye ¿Vero sabe que estás aquí?

- ¿Tú qué crees? -me hace reír, porque las dos sabemos la respuesta- si se entera me echa de aquí y del hospital

+ Tienes una jefa muy dura...

-Si la verdad que da miedo, como dice Pablo, a veces la tía Vero es una bruja

+ Que malos sois, como se entere...

-Es un secreto de los dos ¿verdad campeón?

P: ¿qué?

-Que la tía Vero es un poco bruja

P: Sí, es verdad mami, es una bruja a veces

Los veo jugar y me muero de amor, Laura le ha traído un león del zoo y le ha enseñado miles de fotografías y vídeos de estos animales, está enamorado de ellos y estoy segura que será uno de los primeros lugares que visitemos cuando salgamos de aquí, aunque aún nos queda un poco para eso.

-Me tengo que ir... se ha hecho muy tarde

P: No te vayas mami, por favor... Quiero momir contigo

-Me quedo hasta que te duermas ¿vale?

P: Vale pero no te vayas

Ambos se tumban en la camilla de Pablo y no sé cuál de los dos cae antes, si el niño o la madre, no puedo ni imaginar cuántas noches lleva Laura sin dormir, cuando nos despertamos ya está en el hospital con nuestros desayunos y se va bien entrada la tarde, siempre pediente de nosotros y también de Valentina, porque sé, que nunca dejaría que se sintiese desplazada, a pesar de ser tan pequeña.

Le mando a mi hermano una fotografía de Pablo y Laura durmiendo acompañada de un mensaje en el que le aviso que hoy Laura duerme con nosotros y, él me responde con otra foto de mi hija y mi sobrino durmiendo juntos en la cama de este último.

Yo me quedo un rato mirándolos y enamorándome un poco más de ellos, al tenerle a Pablo descubrí lo que es el amor incondicional pero al tenerla a ella descubrí lo mucho que se multiplica al compartirlo y es que Laura llegó para salvarnos.

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He subido los capítulos 36 y 37. Tengo alguno más, así que subiré pronto.
Espero que os gusten ☺️

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