《24》Cosita exigente

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—Doctor...esta ebrio—Liam intento inconscientemente de tranquilizar a una bestia. Levantando sus manos al hacerse hacia atras—No está pensando claramente y necesito sacarlo de aquí.

Pero el doctor M sólo permaneció ahí, recargado contra la puerta cerrada, un poco brilloso por la fina capa de sudor en su cuerpo. Para ese momento Liam ya había analizado su ropa.

Y trago en seco cuando vio la camisa del doctor semi abierta, su pecho y vientre a la vista.

Tan inmerso en eso que no capto el leve movimiento de Malik.

—El alcohol solo me funciona como suero de la verdad—confiesa, acercándose cada vez más, Liam retorcedio dos pasos—Y lo único que necesito, más bien, lo único que quiero es mi dosis diaria. Justo aquí y justo ahora.

—Iré por la doctora Donattelli para que me ayude a llevarlo a su coche, claramente no está bien.

Pero justo cuando pasó por un lado del mayor, este lo atrapó en un rápido movimiento y los encerró a ambos en uno de los cubículos.

—No me van los trios, cheri—murmuro sombrío, una de sus rodillas se posicionó entre las piernas de Liam y se acercó aún más, casi aplastandolo contra la pared—Compartirte esta fuera de discusión, Liam Payne. Será mejor que dejes de pensar en eso y abras tus pantalones.

—No.

Zayn entrecerro los ojos a la negación de su novio, pero sus manos fueron al botón y cierre del pantalón, abriendolo rápidamente y metiendo la mano para tomar el miembro del joven medico.

—¿No?—sonrie adormecido, acariciando firme, llevando un ritmo casi castigador—Niegame una vez más esto...—se aceeco y beso la mejilla de un sonrojado y caliente Liam, quien cubría sus labios con ambas manos, sus ojos llorosos y nublados—Y juro que acabaré contigo, cheri.

Liam gimio, intento separar al médico, pero este en vez de moverse, bajo bruscamente la ropa de Liam y se arrodilló.

—¡E-Espere, no!

Claro que, el "no" para Zayn J. Malik era inexistente en su diccionario.

Tomo el miembro de su amante entre sus labios y succiono casi haciendo desvanecer al pobre castaño. Liam a este paso ya se sentía ebrio y sin una gota de alcohol en su cuerpo. El calor en ese espacio tan pequeño estaba haciendo estragos en su humeda piel, agradeció que la música estuviera tan alta para poder gemir y gritar libremente.

—Voy hacer que te vengas tantas veces que me suplicaras pare. Olvidaras a cualquier otra persona que estuvo antes que yo—prometió aquel demonio a sus pies, sonriendo contra la carne ante su rostro, soltando su aliento calienten su estimulado cuerpo—Di que me quieres dentro de ti y seré bueno contigo.

—Zayn...—susurro Liam, suplicante. A ese paso, ya no sabía si le estaba llamando para detenerme, o para que continuara hasta el final.

A Liam payne no le interesaba si era un lugar público y si alguien los encontraba. de todos modos, el doctor había bloqueado la maldita puerta.

—¿Zayn?—el doctor M se levanto, encarando a su pupilo y bruscamente le dio la vuelta, estampando el rostro de este contra la fría pared, acercando sus labios a su oreja derecha—Así que, ¿Ya no soy tu doctor Malik?

Mr. Doctor M.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora