Destino 1: Destiny Bella Esperanza.

Capitulo 26💫

《Recapitulemos》

Jean
~♡~

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—¡Por Dios! — exclamó Sheik, al ver a la chica en mis brazos—recuéstala en el sofá rápido.

Hice lo que la rubia me pidió, cuando la dejé recostada en el sofá un muy furioso Ethan me empotró contra una pared y me dio un puñetazo, al cual inmediatamente respondí y no fuimos a los golpes.

—¡Maldición! — exclamaron Ice y Scott al tiempo que nos separaron.

—Qué diablos le hiciste, Jean— dijo el platinado de forma satírica mientras trataba de soltarse del agarre de Ice.

—Es muy fácil para ti culparme ¿No? —, dije con una sonrisa en el rostro, entendía que según él estaba enamorado de Kazumi, pero no sabía que al nivel de culpar al hombre que más la ama en esta tierra de algo que no hizo—sabes muy bien que lo último que haría sería dañarla.

—Nunca confié en ti, maldito—, aun luchaba por salir del agarre de Ice— desde qué...

—Ya es suficiente—, espetó Scott interrumpiendo a Ethan, me soltó de su agarre y se dirigió hasta el platinado, puso su mano derecha en su cabeza y el chico cayó rendido.

— ¿Qué sucedió allá? —preguntó Scott luego de afirmar a Abril y Abigail que el chico estaba dormido.

—Pasa que cuando ponga mis manos en Belial—, estaba muy enojado y eso hizo que los chicos confirmaran que Gael, sí era Belial—va a desear no haber puesto sus mugrosas manos sobre mi...

—Jean—, Sheik había logrado despertar a Kazumi con sus técnicas y la voz de esa chica fue música para todos, pero más para mí, mis demonios se tranquilizaron en cuanto escuché el sonido de su voz—eres tú.

Todos nos dedicamos una mirada de confusión y luego de sorpresa al percatarnos del por qué la castaña dijo aquello, la chica se levantó del sofá y me abrazó como con miedo a perderme, tardé en responder el abrazo debido a la confusión.

—Perdóname, amor por hacer que mi mente te bloqueara—, susurró en mi oído— te amo, no lo olvides.

Acepté su abrazo y sentir su pequeña cintura en mis brazos, me hizo sentir bien a pesar de tanto caos. La chica se separó de mí y acarició mi rostro, sabía que todos estaban en shock al igual que yo, y no pude evitar ver la mirada furibunda de Maya.

—Te extrañé tanto—cerré mis ojos ante su tacto y llevé mis manos a la de ella.

—Yo también...

En ese momento los ángeles nos hicieron una visita, antes de poner un pie fuera del club les dije a todos los caídos que estuviesen atentos y no se dejaran matar, salimos del club y batallamos con los ángeles.

—Jean, debemos alejarlos del club— exclamó Maya quien con una daga desgarraba la garganta de un ángel y con la otra le abrió el pecho a otro—los caídos que hay dentro no son rivales para esto.

Así lo hicimos, y nos dirigimos hasta el rio Pisuerga, al llegar ahí nos encontramos con dos ángeles que descendieron del cielo y quedaron en el rio, Maya que estaba a mi lado se tensó y apretó su pequeña hacha.

—¿Dónde está la chica? —preguntó Haniel

—Primero se saluda mal educado— comentó Abril—¿Dónde quedaron tus modales?

—Veo que aún no has tomado tu verdadera forma, energúmena.

—Y yo sigo viendo que aun te vales de las habilidades de tu hermana— comentó Aedan, al ver que recordó a Abril lo que antes era.