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—Feliz cumpleaños— exclamó el pequeño ángel tan pronto me encontró en el bosque. Suelo visitar este lugar porque es extremadamente cómodo y me siento muy relajado, además, tengo la ligera esperanza de encontrarme nuevamente con mi mamá y papá, sinceramente, deseo demasiado volver a tenerlos a mi lado, pero sé que eso no será posible, al menos, no por ahora.

—Gracias— le sonreí de regreso —¿Por qué has salido de la aldea?

—¿Por qué no podría? — preguntó con curiosidad y agregó—: Tú lo haces.

—Yo soy mayor que tú, puedo hacer más cosas.

—¡No es justo! — el chiquillo de cabello negro, infló sus mejillas a modo de un infantil puchero.

—La vida es injusta, pequeño— me reí mientras le revolvía el cabello con mi mano libre.

—¿Me enseñarás a usar la espada?

—Algún día— le aseguré —, por ahora, ve con el abuelo Park para que continúe con su lección de lectura.

—Mhm.

El chiquillo pelinegro se volvió hacia el sendero que lo había traído directamente hacia a mí; no puedo negar que mi amor por él es sincero y transparente, lo quiero como si fuese mi propio hermano y no solamente como el hijo de las personas que me adoptaron tan pronto quedé huérfano. Estoy sumamente agradecido con la familia Yang porque han hecho todo lo posible para que también sea tratado como su hijo de sangre y no, como un chico que fue adoptado por lástima; ellos nunca han demostrado tener lástima hacia mi —como la mayor parte de la aldea lo cree—, eso me hace sentir mucho mejor y los aprecio; además, les estaré agradecido de por vida por haberme dado una mano cuando más lo necesité.

Tomé la espada de metal con fuerza y la admiré una vez más; a la espada de metal se le conocer como 검 (kom), la que me fue regalada cuando cumplí los quince años de edad por parte de abuelo Park, se llama Hwando 환도.

La espada es larga, aproximadamente veintisiete centímetros y es ligeramente pesada, los suficiente como para que los movimientos sean mucho más precisos al momento de hacer uso de ella; el mango de la espalda es de color rojo con detalles beige, su funda es del mismo material y color que el mango.

«Úsala con sabiduría», me había dicho el abuelo Park después de entregármela en el bosque y agregó «Nunca sabrás cuando sea el día que la necesitarás».

Estaré agradecido eternamente con la familia Yang y con el abuelo Park; me han ayudado en todo momento e hicieron lo posible para que no me faltara nada. La comida, ropa, y lecciones escolares nunca faltaron y eso, me ayudó a generar más conocimiento que me será de apoyo cuando más lo requiera porque no planeo quedarme de brazos cruzados mientras veo que el emperador continúa ignorándonos porque, al final de cuentas, considero que todos somos iguales.

Hice unos cuantos movimientos con la espada que me parecían correctos, sin embargo, no sentía que fueran los adecuados; tener conocimiento sobre espadas no es fácil cuando eres ignorado por el emperador que le dedica todo su esfuerzo y dedicación a los soldados que son elegidos día con día para ganar miles de batallas y gracias a ello, el territorio se va ampliando con rapidez, esto ha logrado que el emperador sea alabado y aclamado constantemente por otras aldeas que si son tomadas en cuenta.

Los centros de oraciones son construidos por los aldeanos a los Dioses a los que solían adorar, sin embargo, algunos de esos centros ahora son utilizados para alabar a el emperador que ha obtenido tantas victorias durante su estancia en el Palacio Real. No logro entender cómo es que alaban a ese ser que no conoce la humildad, los aldeanos constantemente asisten a esos centros y dejan donaciones que serán para recibir la supuesta gracia divina del emperador. 

Hice otro movimiento con la espada, sin embargo, me lastimé la muñeca a hice una mueca de dolor que fue eliminada rápidamente; no tengo si quiera un segundo para demostrar que la debilidad sigue estando fluyendo en mis venas.

—Muy mal— la voz de un hombre que no reconocí se hizo presente en el silencio sepulcral, después chasqueó la lengua y se posó a mi lado. —No sabes usar una espada, patético.

Di un paso hacia atrás con la obvia intención de alejarme del chico desconocido que me mira con una expresión burlona. Nunca antes lo había visto, posiblemente, es uno de los chicos que viven en el pueblo que está a unos cuantos pasos del Palacio Real; existe una gran diferencia entre la familia real, los ciudadanos y los aldeanos.

La familia real es parte de la clase alta, los pueblerinos son la clase media y los aldeanos, somos la clase baja; es terrible estar clasificados de dicha manera, pero ha sido orden del emperador hacer eso puesto que quería dejarnos muy en claro cuál es nuestro supuesto lugar.

—Déjame en paz. ¿No tienes algo mejor que hacer?

—No— sonrió —, estoy muy aburrido y como vi que no tienes conocimiento sobre espadas y decidí venir a ayudarte.

—No necesito de tu ayuda.

—¿Seguro?

—¡Seguro!

—Primero que nada, debes de hacer la apertura, después llevas la espada con pasos sinuosos— dijo mientras se posicionaba detrás de mí. —Das un golpe hacia delante con los pies juntos— su cercanía me hizo sentir ligeramente incomodo puesto que no estoy acostumbrado a que otra persona irrumpa en mi espacio personal.

Acaté las instrucciones que me había dicho y después, agregó—: Ahora, da una estocada de revés sobre una sola pierna. 

—¿Así? — pregunté después de llevar la acción que me ha dicho.

—Me gustaría que pusieras más de tu parte, no seas tan... ¿Inseguro?

—Como sea— murmuré.

—Bien, da un barrido horizontal en paso agachado.

—¿Qué?

—Mira— el chico llevó a cabo lo que había dicho para dejármelo más en claro y asentí mientras decía—: Ya entendí.

—El siguiente paso es corte horizontal a la derecha y a la izquierda.

—¿Cuántos pasos son?

—Muchos, anda.

—¿Cuántos?

—Muchos.

—¿No me dirás?

—No.

Sin percatarme, la noche cayó y debía volver a casa, así que, rápidamente tomé la funda de la espada y salí corriendo después de decirle un simple adiós al desconocido. Sinceramente, no esperaba volver a verlo, pero me había equivocado al pensar eso.








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Espada Hwando 환도:

Espada Hwando 환도:

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Hoy vuelvo a clases y no tendré demasiado tiempo para actualizar constantemente, pero aun así, buscaré tiempo para hacerlo, tkm❤️

𝘼𝙜𝙖𝙥𝙚 🦋 𝙝𝙮𝙪𝙣𝙝𝙤Donde viven las historias. Descúbrelo ahora