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Sin pedir permiso, Hwang tomó a Minho del brazo y lo tiró a la cama.

—Guardián Lee, ¿necesita que lo ayude a quitarse la ropa? —preguntó con tono meloso.

—No hace falta, estoy acostumbrado a dormir con la ropa— respondió en un intento en vano de mostrarse seguro. Minho se quitó los zapatos y aterrorizado, se arrastró sobre la cama y de inmediato se metió en una esquina en el lado interior de la cama. Luego tiró furtivamente de una esquina de la manta y se envolvió en ella como si fuese un escudo que lo ayudará a protegerlo del príncipe.

— ¿Tienes tanto miedo de mí? ¿O tienes miedo de que te coma? — pregunté con tono burlón.

—¡Claro que no! — chilló.

Al fin ambos se habían quedado completamente dormidos, sin embargo, inesperadamente Hyunjin fue despertado por un cuerpo cálido que se frotaba contra él. Al abrir los ojos ve que el que supuestamente debería de estar en la esquina, se encuentra pegado a su cuerpo como un pulpo. Incluso ha traído la manta con él, excepto que solo hay una pequeña parte que está cubriendo su radiante y apetecible cuerpo.

Es probable que se haya pegado a él tras sentir una fuente de calor y se movió inconscientemente hacia su cuerpo; la cabeza descansa sobre su pecho y sus labios se mueven como si se estuviese quejando; las manos y los pies están fuertemente envueltos alrededor del cuerpo de Hyunjin.

La prueba de fuego es soportar el que Minho se frote accidentalmente contra una cierta parte en la mitad inferior de su cuerpo provocándole una ligera reacción.

La expresión de Hyunjin cambia ligeramente y frena el cuerpo que no ha dejado de moverse. Minho hizo tiernos pucheros mientras continúa dormido y eso, lo hacer ver mucho más tierno, entonces, Hyunjin se pregunta: ¿A dónde ha ido la bestia sangrienta?

El príncipe siente el calor cada vez más mayor y se vuelve aún más reacio a dejarlo ir. Hwang baja la cabeza y ve a Minho tumbado sobre su pecho. Su boca se abre ligeramente mostrando sus dientes; afortunadamente su fuerza de voluntad es altamente extraordinaria, de lo contrario, sería muy embarazoso el haber perdido por completo el control.

El príncipe decidió no dormir el resto de la noche, al día siguiente se despertó Minho y se sorprendió al percatarse de que se encuentra durmiendo en los brazos del príncipe Hwang. Saltó a causa del miedo y trató de levantarse para salir huyendo de la vergüenza que cubre su rostro.

Hwang abrió sus ojos y lo miró ferozmente. Los dos brazos que rodean la cintura de Minho no se mueven, al contrario, ejercen mucha más fuerza para evitar que su presa huya.

—Intenta moverte una vez más y no podré controlarme por más tiempo— Minho se estremeció y dejó de moverse deliberadamente.

—Acaso... ¿hemos hecho algo indecente durante la noche? — preguntó Minho en voz baja, como si temiera escuchar la respuesta.

—¿Por qué piensas eso? ¿No lo recuerdas? — la voz ronca de Hyunjin lo ha hecho sentirse mucho más confundido.

—Si lo recordara, no tendría por qué preguntar— soltó con obviedad. De pronto, el rostro de Minho se vuelve completamente rojo al sentir el contacto con cierta cosa que se encuentra algo tiesa y dura que no ha dejado de empujar en su muslo.

Sinceramente, Minho no está acostumbrado a estar en un estrecho espacio con otro hombre, ni siquiera había tenido un contacto tan "íntimo" con alguien más. Por alguna extraña razón, esa cosa rígida y dura parece aumentar cada vez más.

Los brazos de Hyunjin se encuentran enrollados alrededor de la cintura de su guardián, el agarre se torna más fuerte, como si quisiera romperlo en dos.

—¿Podrías...? ¿Podrías soltarme? — preguntó con un deje de timidez que lo hizo ver mucho más apetecible a los ojos del príncipe. Hwang aflojó su agarre y rápidamente salió de los brazos del príncipe. Minho miró hacia él y preguntó—: ¿Deberíamos de ir en busca de alimento?

Hwang Hyunjin no responde, la expresión en sus ojos es altamente seductora. Se puede reflejar el deseo en sus pupilas y eso, hace que Minho se sienta mucho más nervioso.

"¿Qué es lo que ha captado por completo mi atención sobre ese chiquillo?", se preguntó en silencio el príncipe.

Después de permanecer con él durante un tiempo, le ha comenzado a fascinar por completo y eso, lo hace querer entender mucho más a Lee Minho. El príncipe bajó la cabeza y lamió una mejilla de Minho.

—Sabes muy bien—dijo Hwang.

—No te atrevas a hacerlo de nuevo o no seré responsable de lo que te pueda suceder— le advirtió Lee. —Por cierto, ¿qué sucedió? — Hwang miró hacia el chiquillo y respondió con naturalidad.

—La noche pasada, intentaste despojarme de mi atuendo mientras decías cosas indecorosas— mintió deliberadamente, sin embargo, Minho se lo creyó por completo.

—Perdón...

Hyunjin sonrió con malicia y dijo—: Podría perdonarte, sí, pero quiero algo a cambio—.

—¿Qué es? — intervino Minho con impaciencia.

—Ayúdame a encontrar una manera de suavizar ese palo duro allá abajo— respondió sin un deje de vergüenza.

—¿Qué? — preguntó con desconcierto Minho.

—Entonces, yo haré algo.

Antes de que pueda hacer nada, Hyunjin con un rápido movimiento se deshace de la ropa inferior de Minho y toma su miembro entre sus manos y este salta con felicidad al sentir el tacto. El guardián suelta ligeros gemidos al sentir el dulce deseo recorrer su cuerpo por completo, sin querer, deja que Hyunjin tome el completo poder y se embarca a una nueva experiencia.

Extrañamente, Hyunjin tiene una técnica magnifica que hace que Minho dispare directamente en su mano con unos cuantos movimientos que lo han dejado sorprendido. El líquido que yace en la mano de Hyunjin le parece muy seductor y llamativo; dado que es la primera vez de Minho, se vio obligado a eyacular muy pronto, pero eso se puede mejorar. El cuerpo de Lee Minho cayó sobre el del príncipe y este sonrió con felicidad al ver el sonrojo que cubre el rostro del guardián.

—¿Te gustó? — le preguntó Hwang mientras le acaricia la cabeza con satisfacción mientras hablaba. Minho hundió su cabeza entre el pecho del príncipe y no se atrevió a mirarle a los ojos a causa de la vergüenza que lo cubre por completo.

—Sí...—murmuró con voz débil.

𝘼𝙜𝙖𝙥𝙚 🦋 𝙝𝙮𝙪𝙣𝙝𝙤Donde viven las historias. Descúbrelo ahora