𝘼𝙜𝙖𝙥𝙚 🦋 𝙝𝙮𝙪𝙣𝙝𝙤

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Evité con todas mis fuerzas hacer una mueca de completo disgusto puesto que, debo de soportar una corbata en mi cuello toda la maldita cena; además, estoy utilizando un elegante y ajustado traje que ha sido elegido por mi madre, según ella, este atuendo me hace resaltar mis perfectos atributos. Las madres siempre creen que sus hijos son lo más bello en este mundo.

Debo portar el mismo uniforme que mi padre para poder ser identificado con mucha más facilidad por las personas de alta sociedad. Me cuesta demasiado tragarme mi orgullo, pero debo hacerlo para poder obtener el éxito deseado. Lo más estresante, es que debajo del traje, llevo puesto un chaleco antibalas y ya no lo soporto a causa del peso que tiene.

Caminé detrás de mi padre tras bajarnos de la lujosa camioneta blindada y después de saludar con una sonrisa falsa a unos cuantos invitados, seguí a mi padre hasta una de las mesas que están reservadas para las personas como él. Definitivamente no había extrañado nada de esto, me gusta más ser el centro de atención cuando estoy fuera del papel del hijo de un hombre que tiene relación directa con las personas que se consideran dioses y diosas.

Tomamos asiento y miré despreocupadamente alrededor y escuché indirectamente la conversación que estaba teniendo mi padre con otro hombre.

—Me cuesta creer que esa banda de ladrones haya logrado entrar a la mansión del empresario Jeong.

—Tienes razón— concordó mi padre —, debemos ser mucho más cuidadosos desde ahora. No podemos permitir que entren aquí, de lo contrario, todo estaría perdido.

—Claro, todos estamos expuestos...— dejé de prestar atención a la aburrida conversación y me levanté de mi silla, tras avisarle a mi padre que tomaría un poco de aire fresco, me dirigí hacia el jardín trasero del elegante edificio y al salir, el aire fresco me golpeó con delicadeza el rostro y me sentí mucho mejor.

Sin embargo, la extraña sensación de que algo estaba a punto de suceder no se apagaba por más que lo intentaba; me siento sumamente nervioso y siento el inmenso deseo de encontrarme con algo que realmente no sé qué es y eso, me parece muy extraño.

Mi padre ha trabajado para un importante hombre desde hace tantos años, de hecho, ya es considerado como parte de la familia de ese adinerado, sin embargo, no puedo sentirme cómodo y tranquilo cuando recuerdo para quién está trabajando mi padre porque me hace sentir enfermo. Desde ahora, tendré que soportar todo lo que venga, dado que, no tengo otra opción.

Es muy fácil para mi adaptarme a nuevas personalidades y oficios, pero estoy cien por ciento seguro de que esta vez, no será tan fácil como lo había creído antes de venir a este lujoso lugar; Wang tiene demasiada razón, esta presa no es como el resto que ha caído en mis garras porque, tiene mucho más poder y seguridad, eso sí que será difícil de burlar con facilidad. Lo peor es que, mi padre forma parte de todo esto y lo menos que quiero es dañarle indirecta o directamente porque nunca me lo perdonaría.

Decidí quedarme en el jardín trasero por una hora completa a causa de que me había perdido por completo en mis pensamientos que no me han dejado en paz ni siquiera un maldito segundo, hasta que mi padre envió a un hombre a buscarme dado que, la hora de la cena estaba a punto de dar inicio y nadie se niega a la comida, ¿cierto?

Entré detrás del hombre e intenté no hacer una mueca de desprecio al ver la falsedad cubriendo los rostros de la mayoría de los presentes; no cabe duda de que, estoy mucho mejor alejado de todos ellos. Sin embargo, no puedo simplemente dar marcha atrás, de lo contrario, el esfuerzo constante de mi jefe y del resto de los chicos sería en vano puesto que estamos a punto de dar un gran paso en nuestras carreras de delincuentes.

Caminé a paso seguro hacia la mesa en donde se encuentra mi padre, sin embargo, golpeé accidentalmente a una persona que estaba conversando con otro hombre, me detuve y me giré hacia el desconocido para ofrecer mis más falsas disculpas en un intento de no quedar como un mal educado frente a todos estos hombres.

Puedo ser un completo hijo de perra cuando es necesario, pero por ahora, debo fingir que soy una persona inocente y linda que está temeroso de todo lo que le rodea dado que, está indefenso y, por ende, ha decidido encontrar un trabajo que le ayude a obtener un poco de vida como paga mensual. He dejado de ser un bastardo sin educación porque el trabajo lo requiere, o al menos, solamente haré uso de mi verdadero yo cuando sea muy necesario.

—Lo siento... — me quedé en completo silencio tras encontrarme con una brillante y penetrante oscura mirada.

El chico sonrió de lado y respondió—: No hay problema. 

En estos momentos, siento como si todo el aire de mis pulmones hubiese sido expulsado y me he quedado sin oxígeno dado que, no puedo respirar a causa de la conmoción que se ha presentado; de pronto, una fuerte opresión en mi pecho apareció y me sentí sumamente débil y nervioso ante la mirada del desconocido. Siento como si ese hombre era ese «algo» que había estado esperando durante mucho tiempo y ahora que lo tengo frente a mí, no sé qué hacer o que decir porque temo a que vuelva a cometer una completa estupidez.

Lo más extraño es que, aquel vacío que había sentido durante tanto tiempo, desapareció y me sentí mucho más extrañado puesto que, estoy seguro que algo peor aparecerá tarde o temprano y no me siento preparado para recibirlo con los brazos abiertos.

"¿Qué demonios me está sucediendo?", me pregunté en silencio mientras ejercía opresión en mi pecho puesto que, mi corazón parece querer salir corriendo en estos malditos momentos.

—¡Hijo! ¡Minho! ¿Estás bien? — mi padre se acercó rápidamente e intentó tomarme entre sus brazos, sin embargo, caí al suelo antes de que él lo lograra y mi vista se nubló por completo y entré en un profundo sueño que me dejó noqueado durante algunas horas.