Enamorada de un psicópata /Sesshome/

capítulo 1.

Aclaraciones:Los personajes de "Inuyasha" no me pertenecen. Pertenecen a la mangaka Japonesa Rumiko Takahashi sin embargo la historia en la que se van a desarrollar es completamente de mi autoría y esta totalmente prohibido el plagio o copia de esta.

-dialgo-acciones
"Pensamientos"

Capitulo 1. Miradas oscuras:

Estación de policía: Tokio, Japón - 10 de octubre del año en curso

-Kagome Higurashi, una chica común de 19 años estudiante de medicina en la facultad de shikon, vive con su madre, su hermano y su abuelo en el templo familiar. Desapareció el 7 de octubre del año en curso, el sospechoso es su acosador que al parecer le ha seguido el paso desde hace mucho tiempo, el sujeto es un psicópata y al parecer ha asesinado a varias mujeres y hombres, las chicas normalmente de la misma edad y apareciencia similar a las de la señorita Higurashi.- decía serio uno de los oficiales encargados del caso.

...

Un año antes templo de los Higurashi:

- ¡Cumpleaños feliz! ¡Te deseamos a ti! Cumpleaños, cumpleaños, ¡cumpleaños feliz!
Kagome sonríe ya eres una adulta, podremos ir a divertirnos y hacer cosas malas- decía una chica muy animada de ojos cafes y cabellos castaños a su mejor amiga.

-Sango no digas tonterías sabes bien que prefiero concentrarme en la universidad, además no me interesa ir a fiestas y esas cosas. - Respondió una hermosa peli azabache de ojos azules con un gesto divertido al ver la expresión de su amiga.

-¡Ahg! Kagome ¡por kami! Debes salir un poco, conocer gente, tener un novio,¡¿Yo que se?! Kagome, no puedes aislarte del amor toda la vida, no todos los hombres son tan malos como tu cre...-

- Si Sango eso ya lo sé - Interrumpió Kagome con gesto aburrido - Pero simplemente quiero concentrarme en mis estudios, después habrá tiempo para encontrar pareja y si no la encuentro pues... la idea de quedarme solterona y con 30 perros tampoco me molesta - Alzó los hombros restándole importancia al asunto.

Mentía, todo era una vil y cruel mentira porque Kagome sabia que debajo de toda esa fachada de desinterés aún existía ese anhelo que vive en todos nosotros, esas ansias de amar y ser amado, de sentirte especial, protegido, entendido, de tener un hombro para llorar, sin que te juzguen, o que te den palabras vacías que en vez de reconfortarte lo que hacen es romperte más, alguien que no te diga que el "tiempo lo curará todo" o que "hay personas que sufren más que tu" todos sufrimos, sí tal vez unos más que otros pero eso no nos da el derecho de hacer menos el sufrimiento de los demás, a veces las personas más felices son las que guardan más temores por dentro, esa persona que te sonríe con ánimos puede ser la misma que en casa se desploma a llorar sintiéndose solo a pesar de tener personas a su alrededor. Kagome no quería eso ella quería a alguien que simplemente la dejara llorar en silencio cuando estuviese triste, que la abrazara y en vez de mentirle diciendo que todo iba a mejorar le dijera que aún si el mundo se caía a pedazos iba a estar ahí para ella, apoyándola, protegiéndola, amamdola. Pero así como existía el anhelo también existía el miedo, el miedo a amar y salír lastimada, a entregarse por completo y ser desechada y tal vez este siendo paranoica pero la vida no le ha mostrado una buena cara del amor, o al menos no el amor de pareja. Tal vez sea el hecho de haber presenciado desde pequeña como su madre le suplicaba y rogaba a su padre que no se fuera dejando toda su dignidad de lado y dejando que absorba su esencia para convertirse en la esposa sumisa y perfecta, recibiendo como pago infidelidades y malos tratos que casi terminan en tragedia, o también pudo haber quedado traumada por su primer novio a las 16 años quien la humilló frente a todos y la hizo menospreciarse a sí misma, ni ella misma lo sabía, solo sabia que había creado una barrera para protegerse y no tenía planeado salir de ella, pero al destino le encanta jugar sucio y uno de sus pasatiempos favoritos es destruir planes.