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Flor
Bella había subido a su habitación y Jaz y yo nos quedamos solas. Me ayudó a limpiar todo. Ella lavó las cosas de la cocina mientras que yo barría el piso. Cada tanto uníamos nuestras miradas y sonreíamos.

Jaz: Yo me voy a ir que ya se está haciendo tarde.

Flor: ¿Te vas a ir? -Le pregunté-.

Jaz: Sí, no quiero abusar de quedarme acá siempre.

Flor: Está bien -Suspiré-. Lo entiendo.

Jaz: Voy a saludar a Bella y voy a irme.

Flor: Te acompaño.

Jaz
Subimos a la pieza de la peque con nuestras manos unidas y cuando estramos la vimos dormida con la ropa puesta.  Flor le puso el pijama y yo le dejé un beso en su frente. Flor me acompañó al auto, desde el cuarto de Bella hasta el auto, ella en silencio.

Jaz: ¿Está todo bien?

Flor: Sí -Me sonrió-. ¿Me avisas cuando llegas? Quiero quedarme tranquila.

Jaz: Sí -Le dije entre muchos piquitos-. Te amo.

Flor: Yo a vos -Me dio un último beso-.

Al día siguiente

Me desperté temprano. Era sábado y quería planear alguna salida con Flor y Bella. Me encaminé hacia la cocina y me preparé el café. Vir debía estar con Javo porque ayer cuando llegué no estaba. El sonido de un mensaje a mi celular me distrajo.

De: Vir.
¿Seguís con Flor? Hablé con ella recién y noté que estaba media apagada.

De: Vir.
¿Sabes si le pasa algo?!

Para: Vir.
Hola. No, no. Vine a dormir al departamento. Yo también la noté así ayer.

De: Vir.
Ahora entiendo.

De: Jaz.
¿Qué?

De: Vir.
No te quedaste con ella y se quedó triste.

De: Jaz.
Ahora voy a llamarla.

Dejé de enviarle mensajes a Vir y llamé a Flor.

Flor
Me desperté con el sonido de mi celular.Era una llamada. De Jaz. Atendí.

Llamada
F: ¿Hola? -Mi voz sonaba ronca-.
J: ¡Ey, hola! ¿Te desperté? Perdón.
F: Sí, pero no pasa nada. En algún momento tenía que hacerlo. ¿Todo bien?
J: Sí, subiendo al auto. ¿Ya te quedas despierta? ¿O dormís un rato más?
F: Ya me levanté -Dije todavía en la cama-. ¿Pasa algo?
J: Si me abrís, te cuento.
F: ¿Manejaste hablando por teléfono?
J: Lo tenía conectado al auto, lo juro.
F: Está bien. Dame 1 minuto y te abro, ¿sí?
J: Espero.
Fin de llamada

Le pedí al de seguridad que abra el portón para que Jazmín entrara. Así lo hizo. Le abrí la puerta y me di cuenta que me olvidé de sacarme el pijama 😂.

Flor: ¡Hola! -La besé-.

Jaz: ¡Hola! Perdón por despertarte.

Flor: Dejá de disculparte, Jaz. Está todo bien -Le sonreí-.

Jaz: Traje facturas, para que desayunes.

Flor: No hacía falta, pero gracias -La abracé por la espalda y la guié hasta la cocina-. ¿Café? -Le pregunté-.

Jaz: Sí, por favor. ¿Bella? -Me preguntó-.

Flor: Sigue dormida. Mucho festejo tuvo ayer.

Jaz: Sí, es verdad.

Flor: La dejé descansar y que despierte cuando quiera.

Jaz: Me parece bien.

Jaz
Una vez que Flor preparó todo para desayunar, puso las facturas en un plato, dejó las servilletas en la mesada, sirvió el café y se sentó enfrente mío.

J

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J

az: Gracias -Le agradecí cuando me dejó el café enfrente mío-.


Flor: De nada -Me sonrió-.

Jaz: ¿Cómo la pasaste ayer? -Le pregunté-.

Flor: Bien, porque Bella estuvo feliz. Aparte, estabas vos ahí y me hizo bien que estuvieses ahí. ¿Sabes que Bella te quiere mucho? Se encariñó mucho con vos -Le conté-.

Jaz: ¿Sí? -Asentí-.

Flor: Me lo dijo el otro día.

Cuando terminamos de desayunar con Flor, apareció Bella recién despierta.

Flor: ¡Hola, princesa!

Bella: ¡Mami! -La abrazó-. ¡Jaz! -Dijo cuando me vio-.

Jaz: ¡Peque! -Ahora me abrazó a mí-. ¿Cómo dormiste?

Bella: Bien -Me sonrió-. ¿Qué hacés acá? -Me preguntó-.

Jaz: Vine a verlas, ¿puedo? -Le repregunté-.

Bella: Sí -Miré a Flor y entrelazamos nuestros dedos. No nos importaba si Bella nos veía-.

Jaz: Tengo algo que proponerte -se le iluminaron los ojitos-, pero hay que convencer a tu mami.

Bella: ¿Sí? -Mi vista se desviaba a la de Flor y veía como interactúabamos Bella y yo-. ¿Qué?

Jaz: ¿Te gustaría que vayamos las 3 a comer y después ir al cine? -Los ojos le brillaron más que antes y vi que se dirigió a Flor-.

Bella: ¿Mami? -La llamó-.

Flor: ¿Sí?

Bella: ¿Podemos? -Le preguntó. Bella la miraba y yo le hacía puchero para que aceptara-. Por favor.

Le suplicamos tanto que aceptó-.

Flor: ¡Está bien!

¿Estás libre esta noche?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora