Capítulo 14

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Acompañé a Rebecca a la fiesta de la tal Berta.

Todos nos observaban y se nos acercaban. Rebecca debe estar sintiendo se orgullosa y presumida. Supongo que sacará provecho de esto. Al estar acompañada de un Duque como yo. Uno de los Duque mas codiciado, soltero, poderoso, elegante, de presencia imponente y respetable. Con la dicha de tener ojos azules cómo el inmenso mar.

Claro Rebecca también sacó provecho ya que me presumió ante la Berta. Pobres mujeres en guerras por presumir, ganar y demostrar quién es más importante.

- ¿Me concede este baile? Señorita  Rebecca. - Rebecca me miró y aceptó.

Comenzamos a bailar.

- ¿Complacida Rebecca? - Le dije.

- Muy bien, Aleksei. Cumplió con su palabra.

- Sabes que siempre que hago promesas y doy mi palabra las cumplo.

- Eso es cierto. No lo puedo negar. Es usted un hombre de palabra, lo admito.

- Bueno ahora que cumplí mi palabra me puedo ir.

- Quédate más tiempo por favor. Te tengo noticias de la chica misteriosa o mujer misteriosa que te a estado escribiendo.

- ¿Qué? Y ¿por qué no me lo dijistes antes?

- Primero tenía que ver que...

- Sí ya sé, ya sé. Ahora por favor puedes decirme.

La música se detuvo y nos fuimos de la pista de baile. A una esquina.

- Ahora... ¿dime que sabes? ... - dije en voz baja. - Rebecca se me acercó.

- La chica que manda las cartas y que buscas se encuentra aquí. Ella me buscó en persona.

- Me sorprendí. - ¿Qué dices?, ¿cuando pasó eso? ¿Quién es o te dijo quién es? - No sé por qué me sentía muy desesperado y nervioso.

Entonces se acercó un hombre a nosotros.

- Rebecca, su excelencia.

- ¡Harald! - Habló Rebecca emocionada.

Harald es a quién le atrae a Rebecca y Rebecca según e visto le atrae a Harald.

- Disculpa, pero no pude evitar verte y me dije que tenía que invitarte a bailar.

Rebecca me miró esperando por mí aprobación.

- Adelante ve. - Le dije. - Ella me sonrió.

- Aleksei. - Me llamó Rebecca antes de irme. Yo le presté mi atención. - Es ella. - Señaló a una chica con un vestido azul.

La chica se giró y no pude verla bien por qué se veía borrosa. Y luego desperté.

Fin del flashback.

¿𝓣𝓮 𝓬𝓸𝓷𝓸𝔃𝓬𝓸? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora