¿𝓣𝓮 𝓬𝓸𝓷𝓸𝔃𝓬𝓸?

Capítulo 42 (Parte 2/2)

PDV. Lady Lapsley

Estábamos en la carroza mi sirvienta de confianza y yo de camino a casa.

- Mi Lady aquel caballero que nos ayudó era muy apuesto.

- ¡Lyla! - La miré y me reí.

- ¿Qué? Es la verdad. - Dijo sonriendo. - ¿Acaso no se fijo en sus ojos? Eran azules. Eran cómo un inmenso mar en el que puedes perderte y navegar. - Supira.

- Ay Lyla, nunca cambias. Pero no te confíes mucho de los hombres así apuestos, normalmente acostumbran a ser arrogantes, narcisistas y ególatras. Y más un hombre cómo él ya que es un Duque.

- ¡Un Duque! ¿Y por qué no busca la manera de acercarse a él? Está podría ser su oportunidad para qué...

- ¡Basta Lyla!, No hablaré del tema.

- Lo siento Mi Lady.

Llegamos a mi hogar, me bajé inmediatamente y mi madre me recibió.

- Pilar, hija.

- ¡Madre! - Corrí a sus brazos y comencé a llorar.

- ¿Qué pasó? ¿Por qué lloras?

- Oh madre, algo terrible, terrible pasó. - Me separé para mirarla a los ojos.

- Qué pa... ¿¡Pilar Lapsley y el collar que te regaló tú padre!?

- De eso mismo te quería hablar. Un ladrón casi me mata para robarse mí collar. - Me tape la cara. - ¡Lo siento madre!

- ¡Dios mío! ¿Pero estás bien?

- Me quedé sin aire al principio por que me ahorcó cuando estaba intentando robar mí collar y casi caigo inconsciente. Pero ya estoy mejor.

- Un caballero se nos acercó y ayudó a la señorita. - Habló Lyla. - Fue el Duque de Hambicch, su nombre era: Aleksei Voiser señora.

- Gracias a Dios qué estás bien Pilar y gracias por decirme Lyla. Tendremos que invitar al Duque y darle nuestros agradecimientos por ayudar a nuestra hija. Quién sabe y...

- Madre... - La miré seriamente. - No empecemos con el tema, no estoy aquí para cortejos.

- Pero Pilar ya ha pasado meses desde qué...

- Madre... - la miré con advertencia.

- Está bien, está bien. Ven, entremos. - Mi madre me puso una mano en el hombro y me llevó con ella. - Pronto vendrá tu padre y le explicaremos lo que pasó. El se encargará de encontrar a los responsables de lo que te pasó y los hará pagar.

***

Ya era de noche y la cena estaba por servirse.

Aun no me encontraba animada debido a lo que pasó con mí collar. Bajé las escaleras junto con mí madre y mis 2 hermanitas cuando tocaron la puerta.

Mi madre y yo nos miramos. ¿Quién será a estás horas? No esperábamos a nadie a menos que sea un conocido o amigo de mí padre.

Abrió puerta el mayordomo.

Yo abrí los ojos muy grandes. No me imaginaba y nunca me esperaría que la persona que estaba parada en la puerta la vería de nuevo.

Mi madre fue la primera en bajar.

- Bienvenido, de seguro eres un amigo de Henry, él debe estar por llegar pero adelante, pasa, pasa.

Yo bajé rápido las escaleras y me pare al lado de mí madre para decirle quién era.