¿𝓣𝓮 𝓬𝓸𝓷𝓸𝔃𝓬𝓸?

Capítulo 33

"El amor se acaba cuando la traición inicia".

- Maléfica

Ahora yo nos cambié de posición y ella era la que estaba contra la puerta. Baje mis manos hasta su cintura y mi boca comenzó a bajar desde su barbilla hasta su cuello. Donde comencé a besar su cuello y ella comenzó a jadear y su respiración aceleró.

Luego ella me dio un pequeño empujón y empezamos a caminar besándonos hasta que chocamos con la cama.

Pero reacioné por qué me acordé que aún estaba su cumpleaños.

- E-espera... - hablé con voz ronca. - Tú cumpleaños... - ella me miró y yo puse mis manos al lado de sus hombros. -Si no estás la personas van a empezar a preguntar por ti.

- Qué esperen... - Iba a besarme de nuevo pero no la dejé.

- Hablo en serio Ede... - le di un beso de pico. - No quiero que tengas problemas por mí culpa.

- Nadie va a sospechar nada estamos en mí habitación... - Me besó y yo recibí gustosamente sus besos.

Entonces tocaron la puerta y ella y yo nos separamos.

- ¿Edeline estás ahí? - La llamaba Starlight.

- Te lo dije... - dije en voz baja.

- ¡Ve!, ¡escóndete en el baño! - Me dijo a modo de susurro también y me volteó de espaldas a ella.

-¿Edeline estás con alguien ahí?

Me escondí en el baño y Edeline salió.

- ¿¡Por qué tardabas tanto!? ¿¡Con quién hablabas!?

- Sólo fui a retocar me un poco y a tomar un respiro es todo.

- ¡Pero yo escuché a alguien!

- ¡Pues escuchaste mal! De seguro es por el ruido de la fiesta que tú audición se distorsionó.

- Soy una híbrida y escucho mejor que tú y...

- ¡Ay ya vamonos! ¡Quieres! - Edeline tomó por un brazo a Starlight y se la llevó de la habitación.

Cuando luego ya se habían ido que todo era seguro salí.

¡Eso estuvo cerca!

Luego empecé a buscar la salida pero me perdí. Terminé no sé en unos pasillos que supongo que quedaban en la parte baja del lugar ya que no sé escuchaba ningún ruido y nadie pasaba por aquí.

Todo esto parece espeluznante.

Caminé y cuando pasé por una puerta creí haber escuchado algo, específicamente alguien.

Me detuve pero no escuché nada así que seguí. Pero luego escuché un "¡alguien me escucha!". Así que regresé a la puerta.

- ¿¡Hola!? - Grité pegado a la puerta. - ¿¡Hay alguien ahí!? - Y pegué mi oído a la puerta.

- ¡¡Hola!! ¡¡necesito tú ayuda!!