Y el es Satoru

Y soy una mentirosa

Malick sugerio ir de paseo al pueblo que estaba a solo unos veinte minutos en auto. Todos estábamos desudorizados y perfumados, lindos y elegantes. El plan que nos planteo fue simple, ir, dar vueltas, tomarnos fotos, subirlas a nuestras redes sociales de mayor agrado, comer algo y para terminar el día haciendo compras. Era tan meticuloso, como mi papa planeando las vacaciones familiares.

-Lo tienes todo planeado- dije bajandome del auto, alzando la mirada me di cuenta de que Cárter estaba ofreciendime su mano yo solo me di cuenta demasiado tarde.

Era una persona tan terrible?

Mirando la cara de desaprovacion de Azu recibí una respuesta "Claro que lo eres" pareció decirme.

-Bueno ya estamos aquí, empecemos a dar vueltas!- animo Malick poniéndose sus gafas de sol nuevamente, definitivamente era igual a mi papa incluso ya estaba dándome un poco de fastidio el verle.

-Malick esta bien si voy a dar vueltas en cualquier parte del pueblo en que no estén Azu, Cárter, Tatsuko y tu?- dijo Satoru apuntando tranquilamente hacia el lado contrario de donde estábamos.

Eso es lo que había oído tiempo después me entere de que realmente lo que Satoru dijo fue:

-Voy a ver las miselanias.

-Esa es nuestra ultima parada amigo- respondió Malick como un niño pequeño a quien acaban de quitar un dulce.

-Nos encontraremos alla entonces- dicho esto Satoru tomó su bolso negro, sus gafas y se fue.

Malick sonrio con algo que parecía una mezcla entre inconformidad y comprensión. Se notaba que no estaba feliz con la decisión de Satoru, o al menos eso me parecio a mi. No podía culparle la verdad, si estábamos parejas a mi tampoco me gustaría quedarme como la cabezera de mesa.

-Vamos a dar vueltas!- animo Azu colgándose del brazo de Malick- A donde vamos primero?

Era una bonita imagen. La sonrisa de Malick se expandió con el comentario de Azu y sin mayor preámbulo señalo al frente, hacia la montaña donde no parecía haber nada interesante que ver. 

En eso empezó a caminar, Azu y Cárter le siguieron yo no tenia nada de ganas de caminar, en absoluto, definitivamente hacia menos calor que en la mañana pero aun así no podía darme mas pereza. Me volví hacia el camino que había tomado Satoru, estaba empedrado y llevaba unas luces, se veía mucho menos molesto que el que seguían los demás. Dando un par de pasos hacia ese camino me pregunte si a los demás no les molestaría que...

-Tatsuko te vamos a dejar atrás!-grito Azu haciéndome devolverme.

Me encontré con Cárter que estaba devolviéndose, me miraba sonriendo. Tomo mi mano entre la suya prácticamente me arrastro hasta que alcanzamos a los demas.

-Este camino no es tan largo- me susurro antes de que nos reunieramos con Azu y Malick- Cuando llegues a sentirte cansada avisame y te llevare cargada.

Sonriendo cerré mi mano entre la suya.

-Es un trato.

Mire atras solo una vez mas, ya no podía ver ningún rastro del camino empedrado ni de las luces, naturalmente tampoco quedaba rastro de Satoru.

El sentir el cuerpo de Cárter abrazando el mio me saco de la ensoñación, arriba de nosotros pude ver la cámara de Malick, era de esas que se ven mucho ahora, las que tienen un tuvito. Todos sonreímos, no quise ver como había quedado la foto, no me interesaba ver lo incomoda que sabia que me había visto.

Era en verdad una persona terrible. Tras unos minutos de caminata, los cuales para mi fueron días, llegamos a una especie de laguna. Era preciosa, la luz se filtraba entre las hojas de los árboles, permitiendo que en la laguna se dibujaran  pequeños foquitos de luz, el césped la rodeaba. Y las flores silvestres se encargaban de adornarle bien además el olor a agua dulce eran de mía aromas favoritos, después de el olor de las galletas recién horneadas. Era muy lindo.