Al llegar al centro de la ciudad en donde se encontraban la mayoría de tiendas de ropa costosas y centros comerciales, además de restaurantes y cafeterías la confusión me invadió.
—¿Por qué el centro? —pregunté en cuanto bajamos del auto.
—Porque necesitas ropa —contestó Ashton mientras se posicionaba junto a mí.
—Tengo ropa —avisé.
—Si y muy linda, por cierto, pero he visto como miras a las demás al tu ir de una forma poco a adecuada —odiaba a Cameron por hacer eso.
—Deberías dejar de acosarme —él rio levemente.
—No me parece —contestó simple.
Observé la tienda frente a nosotros y al ver a través del cristal junto a la entrada mi corazón comenzó a latir desenfrenado.
—¿Y no podríamos ir a alguna otra? —Cameron me miró con una ceja levantada mientras se colocaba junto a Ashton dejándome frente a ambos —digo, según tengo entendido Dior es una marca muy costosa —llevé mis manos hasta atrás y las sostuve una a la otra evitando que Cameron las observara temblar.
Una sonrisa traviesa apareció en sus labios.
—Claro, podemos ir a cualquier otra que gustes —contestó Ashton sin percatarse de la situación.
—Claro que sí, pero luego de entrar a esta, una vez vi un vestido en una revista y me gustaría saber si sigue aquí para comprártelo.
—No —contesté rápidamente —podemos ir al centro comercial a comprarme ropa, es más barata y más cómoda o hasta a 21 forever, la ropa ahí es bonita —el nerviosismo comenzó a notarse a través de mis palabras y me reprendí mentalmente por eso.
—Cariño, es Forever 21 y si, podemos ir ahí luego de pasar por esta, así que comienza a caminar hacia la tienda y a ver que te gusta y así nos vamos lo más pronto posible.
Cerré mis ojos unos segundos mientras dejaba salir un suspiro. Al abrirlos pasé junto a ambos y al estar frente a la entrada me armé de valor y crucé el umbral con ambos siguiéndome. Observé la tienda por completo y me sorprendí por tanta elegancia y belleza. La tienda se encontraba llena de escaparates con lujosas pendas colgando de cada lugar.
Y al fondo se encontraba lo que más me temí encontrar al entrar a la tienda.
Me adentré con pasos inseguros arrepintiéndome de la simple ropa que llevaba y tomé el primer vestido que encontré sin esperar a ningún empleado, luego de eso caminé hasta lo que supuse eran los probadores y entré soltando un suspiro agobiado.
—Menuda mierda —susurré.
Al ver el vestido que había tomado pensé en que nada podía empeorar más de lo que ya estaba. El vestido era rojo con un escote delantero asesino al igual que el de atrás que se encontraba lleno de gruesas cadenas y solo llegaba hasta medio muslo.
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T H O R N S
RomanceMe resistí a enamorarme de ellos, pues estaba rota y aferrarme a alguien nuevamente no estaba dentro de mis planes. Pero fallé, fue imposible no hacerlo tras aparecer como raíces que me mantuvieron en pie cuando solo quería caer. Dos hombres dispue...