Me resistí a enamorarme de ellos, pues estaba rota y aferrarme a alguien nuevamente no estaba dentro de mis planes. Pero fallé, fue imposible no hacerlo tras aparecer como raíces que me mantuvieron en pie cuando solo quería caer.
Dos hombres dispue...
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Mis pasos fueron lentos hacia el lugar donde ellos se encontraban. Estaban debajo de una enorme sombrilla en una especie de circulo mal trecho alrededor de la mesa. Aunque había mesas más pequeñas junto a ellos.
Mis pasos se detuvieron en donde se encontraban Cameron y Ashton y estos me miraron de arriba abajo, Cameron quitó los lentes que cubrían sus ojos y me observó maravillado.
Alrededor de ellos se encontraban cuatro hombres y tres mujeres jodidamente hermosas, una rubia de ojos verdes, una pelirroja de ojos celestes y una chica de cabello rosáceo que por obvias razones no era natural de ojos castaños. Eran muy hermosas y de figuras envidiables que se dejaban ver gracias a los minúsculos triángulos de los bikinis que portaban.
—Buenas tardes —dije suavemente y todos me observaron.
—¿Y esta hermosura? —cuestionó un hombre con barba castaña al igual que su cabello y sus ojos, su piel era levemente tostada y muy musculoso.
—Alisha Heish, un placer —le tendí la mano y el la tomó dejando un beso en el dorso de esta que inevitablemente me hizo sonrojar.
—Espera, espera —el hombre soltó mi mano y Cameron me indicó que fuese hasta él.
Yo rodeé la mesa repleta de vasos y botellas de alcohol caro y me coloqué junto a él que me tomó de la cintura y me sentó sobre su regazo. Ashton me dio una suave sonrisa antes de llevar el cigarrillo a sus labios viéndose malditamente sexy en el acto.
—Es la chica de los medios —dijo estupefacta la pelirroja —¿me están jodiendo? —Cameron dejó un beso en mi hombro ya que yo estaba sentada de lado sobre él.
—Estas hermosa —alagó suavemente.
—¿Es la nueva conquista de nuestro promiscuo Cameron? —mi cuerpo se tensó ante las palabras de la rubia.
—Es nuestra novia —intervino Ashton y casi todos se quedaron con la boca abierta.
—¿Qué? —cuestionó uno de los hombres de cabello rubio, complexión delgada y ojos castañitos.
—Que es nuestra novia —confirmó Cameron besando mis labios como saludo —¿dormiste bien? —preguntó y yo asentí algo avergonzada por las miradas que estaba recibiendo.
—Si, tenía meses sin dormir hasta tarde —dije sincera en un pequeño susurro.
Cameron tomó el vaso junto a él y lo llevó hacia sus labios dándole un trago. Me ofreció, pero yo me negué.
—Me alegra que hayas dormido bien —comentó Ashton —no quisimos despertarte, sabíamos que estabas particularmente cansada —comentó con doble sentido y era obvio, antes de irme a mi habitación Cameron me cogió como un salvaje.
—Es que es imposible —miré hacia sus amigos los cuales aún seguían sin poder creérselo – Cameron no tiene novias, Cameron nos coge y luego nos deja.
