Prólogo

3.3K 490 94
                                    

Esta historia se centra en una joven de veinte años que deseaba alcanzar la autorrealización como individuo; y a su vez, encontrar un lugar donde sintiera encajar, al cual pertenecer y poder llamar: hogar. Otra de las inquietudes con las que lidiaba, era el hecho de que se había enamorado de la idea del amor, y de coincidir con ese «alguien» con quien toda chica sueña vivir un romance en su burbuja de ilusiones.

Como -quizá- muchas jóvenes en el mundo; ella se sentía atrapada en su pequeño estanque bajo el control de sus estrictos padres, cargada por el peso de ser la hermana mayor de dos pequeños, presionada por las expectativas de su familia...

Siempre intentaba dar lo mejor de sí sin importar las circunstancias para no defraudar a sus progenitores, aunque al final sus esfuerzos fuesen reducidos a nada. Se sentía incomprendida, y más sola que nadie. Todas y cada una de las sonrisas que enmarcaba en su rostro, esas que proyectaban felicidad, dicha, y excelentes estados de ánimo, eran en realidad mostradas por costumbre o por mero positivismo, que muchas veces era mas que fingido.

En su interior, iba por la vida un poco triste, pensando en ese típico «¿qué pasaría si...?»

Esperaba con ansias «eso» que pudiera surgir y cambiar el color gris de su mundo.

Deseaba descubrir ese «algo» que llenase el hueco de su pecho que parecería no tener fin, del cual no lograba deshacerse a pesar de estar rodeada de sus seres queridos. Sentía que nada tenía gracia o sentido, y sin importar lo que hiciera o lo que poseyera, nada la llenaba.

Anhelaba que en algún momento llegase «eso» que cambiara el rumbo de lo que se suponía que el futuro le deparaba a cada uno -sentimentalmente hablando-, porque aunque se esforzaba en creer que debía ser autosuficiente, las palabras de aquel gran filósofo sobre quien leía tomaban mucho mas sentido con cada intento. Tomando cada cosa en cuenta, siempre tenía presente esa frase en específico: «El hombre es un ser social por naturaleza» o quizá, en muchos casos era así por necesidad, pero según su perspectiva y también basándose a experiencias personales, cabía resaltar que estas palabras también se aplicaban en el amor.

Cada vez que escribía en su diario ojeaba unas líneas en la primera página, las cuales eran producto de su inspiración:

Miente aquel que diga que no se interesa en ilusiones y sentimientos... si por eso vivimos, todo se trata de ello, de lo contrario; ¿por qué buscar libros en la sección de romance? ¿Por qué suspirar por cada historia al final de una película? ¿Por qué intentar llenar con obras literarias aquello por lo que decimos no tener inclinación? Vivimos pensando encontrar lo que llaman «la otra mitad», quizá cuando subimos a un autobús, o cuando caminamos por la acera de algún sitio, en el momento en el que tocamos a la puerta de alguien o nos topamos casualmente a cierta persona, ¿y qué pasa si esa conexión que tanto ansiamos se establece en el lugar menos esperado? Normalmente solo pasa en las películas y escritos de ficción, ¿no es así? Bueno, quizá la realidad sea cruel, pero es justamente la razón por la cual nos aferramos a soñar, a respirar ilusiones. «Las casualidades no existen», «todo pasa por algo». Creo que muchos rezamos por alguna vez llegar a comprobarlo.

En otros aspectos de su vida, deseaba también alcanzar ese punto en el cual pudiera sentirse realizada, pero tenía algo que se lo impedía: su papá, él, y su lado sobreprotector.

A veces se sentaba en el balcón de su ventana, suspirando mientras veía al horizonte, deseando saber cuál era su propósito, ansiando encontrar esa parte que le faltaba al rompecabezas de su vida.

Soñaba despierta por encontrar un lugar donde sintiera que de verdad podía encajar; donde pertenecer.

Era cierto que amaba a su familia, pero su felicidad, no estaba allí. Debía hacer cambios a su vida, después de todo... tenía en cuenta que la juventud era algo efímero, y no podía ni quería esperar más.

Quizá muchas personas, no solo chicas, se sientan alguna vez de esta manera, por lo que tal vez todo lo escrito anteriormente haya sido comprendido a la perfección.

Quizá muchas personas, no solo chicas, se sientan alguna vez de esta manera, por lo que tal vez todo lo escrito anteriormente haya sido comprendido a la perfección

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
ROOMIES ━━  [En curso] 《13》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora