Cᴀᴘɪ́ᴛᴜʟᴏ 33 ※Rɪɴᴄᴏ́ɴ ᴅᴇ ꜰᴇʟɪᴄɪᴅᴀᴅ

2.8K 293 232
                                    


⌞𝓢𝓱𝓪𝓭𝓲𝓪⌝

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

⌞𝓢𝓱𝓪𝓭𝓲𝓪⌝

Sentí unos dedos tocar mi mejilla. Me toqueteaban, como intentando despertarme. Fui invadida por una ganas excesivas de golpear a Levi por despertarme de esta forma. No trabaje casi once horas seguidas para que me despierten cuando necesito dormir al menos tres horas. Atrapé la mano y abrí los ojos con pesadez.

—¡Te despertaste!—exclamó la mujer rubia, estaba de cuclillas a mi lado. Reconocí la tierra bajo mis dedos, me impulsé con mis codos para sentarme.

—¿Quién eres tú?—pregunté tratando de reconocer el lugar dónde estaba.

—¿No me recuerdas? Es normal, no hablábamos mucho. Te la pasabas con Erwin y Hange. —Chasqueó los dedos—. También con Levi. ¿Cómo va su relación?

—¡Nanaba, no la agobies!—gritó una voz que reconocí. Entre los soldados que apenas podía reconocer, unos pequeños ojos ámbar bajo un ceño fruncido vieron a la rubia.

Nanaba Shimoda fue una soldado de la Legión de Reconocimiento. En vida arriesgaba su seguridad para defender a sus compañeros sin medir las situaciones de riesgo. Se le conocía por su calma y por eso pensaba que era ideal para Mike, un hombre que con alcohol en sus venas apenas puede tomar decisiones coherentes.

Ella me sonrió y extendió su mano para ayudarme a levantarme. La acepté, aún incapaz de entender qué sucedía, aunque la solté al momento. Quería abrazar a mi amigo. Me levanté a tropiezos y corrí hacia el rubio borracho a unos metros de mí.

—¡Idiota!—dije cuando llegue a él, lo golpeé en el hombro. Dejó de fruncir sus cejas al ver mis ojos cristalizarse.

—Oye, no llores. —Tomó mi hombro y me atrajo a su cuerpo. Pasé mis brazos por su torso y apoyé mi mentón en su hombro, poniéndome de puntillas.

—¿Qué te pasó? Te extraño mucho.

—Seguí el ciclo de la vida. ¿El enano te cuida?

—Bastante. Aunque tú me cuidabas mejor, Mike.

—Siempre supe que era más fuerte que ese gruñón. —Esa risa que soltó la extrañaba tanto—¿Cuánto tiempo estaremos así?

—¿Ya no me aguantas?

—Jamás te he aguantado. —Me separé para golpearlo y él levantó las manos en defensa—. Es broma.

—Espera, esto no es real, ¿no?—Toqué mi rostro y sentí que palidecí. Si veía a Mike significaba que...— ¿Estoy muerta?

—No. Tranquila. —Revolvió mi cabello y me sonrió.

A Cʜᴏɪᴄᴇ Wɪᴛʜ Nᴏ Rᴇɢʀᴇᴛs ✥ Lᴇᴠɪ AᴄᴋᴇʀᴍᴀɴDonde viven las historias. Descúbrelo ahora