¿Mutuo?

3.5K 321 43
                                    

Su pregunta me dejó sin palabras, ¿Qué podía decir? Aunque, no entendía por qué tenía que dar explicaciones, pero algo me decía que estaba haciendo las cosas mal, y haciéndola sufrir.

-No pasó nada entre nosotros –respondí con firmeza.

-¿Cómo puedo estar segura de eso? Izuku está acaparando tu atención, no obtuve respuesta con mi confesión, quizás estoy intentando algo que nunca funcionará –bajó su mirada triste, las lágrimas habían empezado a escurrir nuevamente.

-No digas eso, es solo que...es complicado –limpié su mejilla- estoy con un enredo de sentimientos...No me había sentido así otras veces, no quiero que eso interfiera en mi labor como heroína.

-Que frustrante todo esto, quizás para el momento que te des cuenta, yo ya no esté aquí –ella se levantó con intención de irse, instintivamente la tomé del brazo, no iba a dejarme con todas esas dudas con lo último que me dijo.

-¿Quién te hizo esas marcas? ¿Cómo que ya no estarás aquí?

-No te interesa.

-Claro que sí.

-¿Por qué? Aunque te lo diga, ¿Qué harás? Tu instinto heroico te lo va a impedir.

-Basta –estaba molestándome un poco como estaba llevando las cosas, no era tan desconsiderada como ella lo hacía ver.

-Nunca debí haberte buscado –eso resonó en mi mente y me dio una punzada- debí quedarme entre las sombras.

-Por favor para...

-Nunca debí intentar jugar a ser una heroína...-la miré bien, sonreía a pesar de ser un mar de lágrimas, sus ojos dorados estaban rompiéndose por dentro, esta chica...

-Himiko –no dudé en abrazarla, no podía ignorar el hecho de que ella estaba mal, su camino recorrido como villana debió ser duro. Ella apretó más nuestro abrazo mientras sollozaba pude respirar su aroma, era cálido, su cabello olía muy bien, era suave, su piel era más blanca de lo que me había imaginado, no me había detenido a mirarla tan fijamente, en su cuello aquellas marcas amoratadas ensuciaban toda su pureza- ¿Duele? –ella asintió, se estaban borrando un poco, pero no del todo, sentía rabia, alguien había manchado su linda piel con una intención muy cruel.

Seguimos así unos minutos, quería que se calmara un poco, no debí ser tan imprudente y llenarla de preguntas. Su respiración era más armónica, ya no sollozaba, mis dedos acariciaban su cuello, el calor subió a mis mejillas por lo que tenía en mente, pero quería hacerlo de todas formas. Me acerqué lo suficiente, deposité una serie de besos por aquellas marcas, la rubia solo se estremeció, pero no me alejó, sentía que mi corazón se iba a salir de mi pecho, pero me gustaba esta sensación.

-A pesar de no entender estos sentimientos –la miré para juntar nuestras frentes- no te dejaré sola, te protegeré y creceremos juntas como heroínas.

-Una loca como yo no tiene espacio en el mundo de los héroes- sonrió algo decepcionada, limpié los rastros de lágrimas que le quedaban.

-Pues, juntas crearemos uno –le sonreí, lo que decía era verdad, la ayudaría así como ella me había estado tendiendo una mano con otras cosas. Me sonrió de vuelta más calmada, se veía adorable a pesar del brillo de sus ojos por aquellas lágrimas- Himiko...

-¿Ochaco?

-"Cómeme...dilo" –pensaba- Maldición...-no salían más palabras, estaba tan avergonzada por lo que quería, que no se lo diría tan fácilmente, así que solo actué.

Algo temerosa y con mi rostro sonrojado, tomé el mentón de la rubia, al igual que aquella vez con el dulce, con la diferencia de que esta vez, no había dulce. Rocé su labio inferior con mi pulgar, aquel que ella había mordido, era suave, parecían casi virginales, no quería parecer tan ansiosa, pero la emoción pudo conmigo y solo acorté el espacio entre nosotras, no sabía si ella me correspondería, tuve algo de miedo al principio, pero a medida que empezó a mover sus labios, supe que no había hecho nada malo, así que solo seguí.

"Cómeme"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora