Mejora

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Antes de que pudiese conciliar bien el sueño, Recovery girl llegó a la habitación a examinarme, no era nada grave, con la medicina y un poco de descanso estaría bien.

Pasó un buen rato en que no pude pegar un ojo por lo mal que me sentía, pero sentía que la fiebre iba disminuyendo, abracé aún más al pequeño conejo y me arropé lo suficiente en las sábanas de la rubia, en ese momento debía estar en clases o entrenando como tal, y yo aquí siendo una molestia para ella.

Pasó la tarde de a poco y no tenía noticias de ella, me había comido las cosas que había traído, la fiebre ya se había ido del todo, ahora solo necesitaba una ducha para quitarme todo el sudor de la noche anterior. Me desperecé, tenía la intención de salir de tan cómoda cama, pero el ruido afuera de la puerta me hizo quedarme donde estaba, en unos segundos la puerta se abría y dejaba a ver a una Toga más despeinada de lo normal y con bastante polvo encima.

-Tienes mejor cara esta vez cutie pie - me brindó una sonrisa, se acercó y se dejó caer a los pies de la cama- ¡Estoy exhausta!

-¿Cómo te fue? - inevitablemente acaricié su cabello, ella puso su mano sobre la mia mientras se acomodaba para que siguiera con las caricias- vienes hecha un desastre.

-Los combates terminaron, algunos los harán para cuando te toque la prueba a ti, hubo muchos que se alargaron más de lo normal.

-¿Quién fue tu contrincante? - ya sabía la respuesta pero quería que me lo dijera y me contara detalles.

-Tu amado Izuku - ella entrecerró los ojos un poco, como queriendo molestar, pero no tomé en cuenta su comentario - ha mejorado bastante.

-¿Y quién ganó?

-¿Quién crees?

-¿Ganó él? - hice una expresión de curiosidad y de asombro, pero solo para molestarla, ella hizo un puchero y se levantó de la cama a buscar algo en su closet.

-Ha mejorado pero lo dejé mordiendo el polvo - comentó algo seria, luego se quitó su camiseta, desvié la mirada con algo de rubor en mis mejillas, aunque me diese la espalda no podía evitar sentirme avergonzada, noté que habían algunas manchas amoratadas por su costado - necesito remodelar mi traje, si sigo así, mi cuerpo no lo resistirá.

-No se ven bien - me estiré y alcancé a rozar con mis dedos su piel, ¿Es que todo su cuerpo es tan suave?

-Hace cosquillas - rió un poco, luego se volteó solo con su brasier puesto y se acercó a mí para colocar su frente con la mía - ya no tienes fiebre, eso me alegra, ¿Qué dijo Recovery?

-Sobre... Sobreesfuerzo... - balbuceé intentando apartar mi mirada, el calor que sentía en mis mejillas era intenso- en unos días estaré bien.

-Te quedarás aquí - sentenció - si dejo que te vayas, probablemente te vea en clases o practicando.

-Pero...

-Sin peros, conejito - sonrió y luego me dio un beso en mi nariz, había estado actuando muy cariñosa, ¿Será que...?

-Himiko... Estás más cariñosa que de costumbre... - estaba nerviosa por la situación, pero no entendía nada.

-¿Yo? Te equivocas cutie pie, yo no llegué a tu habitación ayer a devorarte a besos.

-Yo no... - callé mis palabras, ¿Cómo que  devorarla a besos? Hice memoria de lo último que hice anoche y me llegó como un balde de agua fría, había estado espiando, ella me atrapó y  la fiebre no podía más conmigo, tenía recuerdos algo vagos de haberme lanzado a ella a besarla.

Me sonrojé, si lo había hecho, por eso sentía tan cálido su contacto y el porqué ella estaba más cariñosa de costumbre. Cubrí mi rostro con la sábana y me escondí de ella, estaba tan avergonzada, solo escuché una risa por parte de ella, pero yo quería morir en ese momento.

"Cómeme"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora