[𝕮𝖔𝖒𝖔 𝖚𝖓 𝕯𝖊𝖒ó𝖓𝖎𝖔] || 𝓚𝓞𝓞𝓚𝓥 ||

𝓬𝓪𝓹 34

El silencio en aquel salón iluminado y blanco era incómodo, Jungkook pasaba la mirada por los espejos decorativos, estatuas de ángeles y algunos de estos reales en la entrada como guardias.

Un exagerado suspiro se escuchó en el gran espacio, queriendo llamar la atención del pequeño alado al otro lado de la mesa quien revisaba unos papeles que anterior mente había traído una chica.

_todo en orden_ se escuchó de parte de Jimin quien luego lanzó los papeles desapareciéndolos en el aire _perdón la interrupción_ juntó sus manos sobre la mesa de madera _puedes continuar, ¿Qué decías?

Jungkook levantó una ceja para volver a acomodarse en el asiento, la fuerte luz en ese lugar le causaba jaqueca.

_si... mm déjame ver si entendí..._ habló lentamente recordando la larga conversación de hace unos minutos _¿quieres decir... que Taehyung..._ movió su mano en el aire intentando encontrar la palabra adecuada para que no sonara a una locura, no la encontró _es mitad ángel?..._ completó rendido.

Jimin bufó pegando suavemente su frente mientras negaba con la mirada, Jungkook frunció el ceño, odiaba esa expresión, como si fuera un idiota que no entiende nada.

_eres un tonto que no entiende nada...

_¡pero qu-

_shh, estás en mi reino_ detuvo con el dedo índice dejando atónito a Jungkook quien gruñó volviéndose a sentar. _lo volveré a explicar, vale? yo no sé lo que sintieron mis arcángeles, pero lo que si sé es que ese pequeño tiene... un aura de ternura... ¿viste como te defendió al verte en peligro?.._ aquello izo pensar a Jungkook, relajando su mirada a la vez que la dirigía a algún lado de la derecha _sabes?... si hay algo en lo que me especializo es en los sentimientos... pude sentir en el miedo, pero ¿sabes?... el te quiere... y es algo mas... _aquello hizo a Jungkook bufar.

_eso ya lo sé... le gusto, y está bien, lo eh tenido privado de su libertad por un tiempo_ sonrió de lado _le hago sentir bien... y a este niño masoquista le gusta...

_¡no digas eso!, a el no le gustas, el te ama, y la verdad no sé por qué si lo único que haces es jugar con él_ exclamó ahora algo molesto.

_si si, lo sé..._ intentó sonar seguro, ¿amar?, no se confundan.

_Jungkook_ llamó levantándose para quedar mas cerca _no sé que pasa por la mente de ese niño... pero sufre... sufre a tu lado, y aún así no quiere alejarse... 

_¿ah que quieres llegar?_ vio a Jimin bajar la mirada para volver a sentarse pasando sus manos por su cabello.

_yo... el dolor es muy fuerte... me afectó mucho... lo puedo sentir..._ murmuró pero audible para el demonio _no lo sé... el no se merece eso... ten piedad de el... Jungkook... 

_agh, ya empiezas con tus cosas cursis_ no quería escucharle mas, y lo demostró al levantarse de la silla empezando a hacer su portal.

_el puede ser feliz con otra persona... y no hablo de aquel demonio que no salvó de tus garras, si no de uno que quiso aprovecharse pero terminó encariñándose... 

_...¿que?..._ La sonrisa en Jimin le daba muy mala espina, algo andaba mal...

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El pálido tocó un par de veces para luego entrar, el lugar era chiquito, era una pequeña casa que tenía solo dos muebles, unos sofás algo desgastados y una mesita de madera tirada en el suelo, lo cual esquivaron para entrar completamente, parecía que los tres demonios no cabían ahí dentro.