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—Vamos Marcus, soy tu hermana, por favor—

—Ni aunque me dejaras tu parte de la herencia—

—Por eso Tom es mejor hermano que tú—

—Pues acuéstate en sus faldas entonces— Espetó molesto tratando de sacar mi cabeza de sus piernas.

—Tranqui cari, no me quites— El tren recién partió, Marcus, Tom y yo estábamos en el mismo compartimento,  me había acostado en con mi cabeza en las piernas de Marcus con el fin de que me cante un poco para quedarme dormida, pero no lo había logrado, así que me resigne.

La puerta se abrió dejando ver a un pelinegro que hace mucho no veía, su semblante tenia reflejado algo de pena que combinaba a la perfección con las ojeras oscuras que rodeaban sus ojos —¿Puedo sentarme?— Preguntó con timidez, hace tiempo no lo veía, y lo extrañaba, pero estaba molesta porque ni siquiera se había preocupado por nosotros el año pasado. Marcus le permitió sentarse y yo alcé mis piernas dándole a entender que se siente ahí.

—Los extrañé— Soltó en el primer momento con la cabeza baja, fue entonces que pude ver tristeza en sus ojos, hace mucho que no lo veía así, por ello me senté rápidamente y antes de volver a mi lugar le di un corto abrazo para que luego recibiera una sonrisa por parte de todos.

Por alguna razón una sensación muy cálida se asomo por mi pecho, era muy agradable.

El tiempo pasaba, y no pude evitar empezar a tener sueño, Theo se había puesto a leer con mis piernas en su regazo y Marcus solo estaba pasando sus dedos por mi cabello haciendo que me adormilara.

—Lamento la tardanza— Dijo Draco entrando al compartimento acompañado de Astoria, yo tenía un ojo cerrado y otro abierto -expectante a la situación actual-. 

Vi como Tom veía con desagrado a su acompañante y al parecer Marcus ni le tomó importancia al recién llegado —Les presento a Astoria... mi enamorada— Soltó lo cuál solo se ganó una mirada de Theo.

Nauseas.

—Hola— Saludó Theo sin pararse, mis hermanos seguían sin prestarle atención a Astoria, cuando me di el permiso de analizarlos por completo pude ver que venían despeinados, al parecer habían estado ocupados compartiendo saliva en otro compartimento.

Cuando se sentaron, Astoria tomó la mano de Draco y se enrollo en su brazo. No me sentía mal... creo, no estaba triste, la chica lo hacía feliz, pero algo me dice que sus padres no lo sabían.

¿Por qué no me lo contó?

Cerré mis ojos por completo solo sintiendo los dedos de Marcus por mi cabello, era agradable tenerlo cerca, aunque la forma en que me protegía era poco ortodoxa, así me protegía.

A veces sé que necesito ayuda, y mi orgullo no me deja pedirla, porque también siento que si podré sola, y cuando tengo esos debates internos, mis hermanos siempre están para mí.

El compartimiento estaba en total silencio, y uno cómodo para mi, me gustaba solo escuchar de las páginas tanto de Tom como de Theo, aunque podía escuchar como Astoria trataba de hablar o algo, pero no sabía ni qué decir.

—Así que ustedes son los Riddle— Comentó tratando de soñar amigable, mientras Draco cogía un libro. Mis amigos los lectores.

Ninguno de los tres respondió, así que trataré de ser el policía bueno —Qué gran observadora— Naturalmente socializar es la tarea de Marcus, así que para mi, fue un excelente intento.

Seguía sin abrir los ojos, al menos no la ignore como mis hermanos, sentí como Theo se reía por lo bajo. Y luego... otro silencio.

Al parecer el intento de iniciar una conversación de Astoria no funcionó.

M O R G A N A - [D.M.]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora