ʟᴏᴠᴇ ʙʏ ᴄᴏɴᴛʀᴀᴄᴛ

ᴄᴀᴘɪᴛᴜʟᴏ 25.

Louis se despertó, sentándose en la cama y tomando el celular de Harry para ver la hora.
Sonrió como tonto al ver el fondo que tenía. Una linda foto de Louis dándole un beso en la mejilla a su rizado.

Miró la hora frunciendo el ceño.

- Harry... - el ojiazul sacudió con cuidado a Harry.

- ¿Mhn?

- Falta una hora para el autocinema.

- Ya no quiero ir, tengo sueño, mejor durmamos. - Harry sonrió somnoliento acercándose a Louis para tomarlo de la cintura y hacer que se acostara.

Louis no se quejó y abrazó a Harry para luego volver a dormir.

A la mañana siguiente Louis despertó solo.
Harry ya no estaba en la cama así que Louis salió de la habitación para buscar al ojiverde.

Un rico olor a tocino y a panqueque recién preparados inundó sus fosas nasales.
Aspiró profundamente y sonrió de lado.

En la cocina estaba Harry con un mandil y en bóxers haciendo el desayuno.

- ¿Acaso estás tratando de seducirme? - Louis lo abrazó por la espalda y Harry rió.

- Tal vez, ¿te molesta? - Harry sonrió haciendo que sus hoyuelos se marcaran.

- En realidad me encanta la vista. Estoy siendo lentamente seducido por tus rulos. - sonrió despeinándole su cabello.

- Esa era la intención. - Harry le dio un beso casto en los labios.

- Hoy es domingo, ¿qué deberíamos de hacer? - preguntó Louis sentándose en una silla de la cocina.

- Se supone que ayer iríamos al autocinema pero preferimos dormir...

- Somos tan flojos.

Harry rió y asintió levemente.

- Lo somos, Boo. Podríamos ir de compras. Mis sudaderas están desapareciendo extrañamente.

- Quién sabe quien se las habrá robado. - dijo burlón Louis.

Ambos desayunaron entre risas y toqueteos, Louis se sentía feliz y pleno.

Tomaron un baño juntos que se alargó demasiado.
Cuando salieron de la ducha Louis tomó algunas prendas de Harry porque le encantaba la ropa grande.

- Te ves adorable. - Harry le pellizcó las mejillas a Louis.

- Claro que no, me veo intimidante, soy muy intimidante. Deberías tenerme miedo.

Harry rió y lo abrazó.

- Eres demasiado intimidante, mira como estoy temblando de miedo.

Louis sonrió y le dio un suave golpe en el brazo.

- Idiota. - murmuró. - Entonces... Señor Styles ¿qué haremos hoy?

- Compré una casa en la playa, podríamos ir a la playa. El día está soleado.

- Mmm... De acuerdo.

Ambos salieron del departamento tomados de las manos. Había gente que los miraba con ternura y otros con desagrado que les decía cosas realmente feas y Louis trataba de ignorarlos.

- Malditos maricas, solo vienen a corromper a los niños. - dijo un hombre que estaba platicando con su amigo. - más el rizado, lleva las uñas pintadas. ¿Acaso quiere ser mujer?

Y esa fue la gota que derramó el vaso.
Louis soltó la mano de Harry para encararlo.
Harry trató de detenerlo

- ¿Cómo nos dijiste? - Louis estaba más que enojado.
A lo largo de sus casi 30 años ha soportado esa clase de insultos pero está vez no solo lo insultaron a él sino también a su amado novio.