DARK QUEEN ||Bucky Barnes||

Capítulo. 100

Marzo. 10 del 2023.

Habían transcurrido cinco años desde que Thanos chasqueó los dedos y dejó a muchas cosas mal. Steve formó un grupo de apoyo para las personas a las que se le hacia complicado alejar el tema, tomó esa decisión gracias a Sam, ya que recordó que después de retirarse, el moreno ayudaba a los veteranos.

—Yo, eh, fui a una cita el otro día. Es la primera vez en cinco años, ¿saben? Estaba allí sentado con mi cena, ni siquiera sabía de que hablar.— Dijo un hombre en la reunión semanal del grupo de apoyo, miraba al Capitán.

—¿Y de qué hablaron?— Steve sonrió un poco para darle confianza al hombre.

—Lo mismo de siempre, de como las cosas han cambiando. Su trabajo, mi trabajo, de cuanto extrañamos a los Mets y entonces nos quedamos en silencio... Él lloró mientras servían la ensalada.— Comentó el hombre.

—¿Qué hay de ti?— Preguntó el Capitán.

—Lloré... Antes del postre. Pero lo veré de nuevo mañana así que...— El hombre dejó las palabras en el aire.

—Eso está bien, hiciste lo más difícil, tomaste el riesgo sin saber como iba a terminar y eso es genial. Son pasos que debemos tomar para tratar de sobrellevar esto, para tratar de encontrar un propósito.— Steve explicó viéndolos a todos. —Me congelé en el 45, luego de que mi mejor amigo cayera del tren, mi hermana desaparecía y conocer a mi primer amor. Desperté setenta años después pero tenemos que seguir adelante. El mundo está en nuestras manos, es nuestra responsabilidad hacer algo con él, de otro modo, él debió matarnos a todos.— Dijo el hombre y terminó la sesión, para luego ir a visitar a su hermana, la cual era acompañada por su novia.

Al llegar vió a su chica llorar, sabía que le habían dado información de su amigo Barton ya que lo escuchó cuando llegaba. —No me gusta verte llorar.— Habló el hombre apoyado en un estante.

La pelirroja lo miró con una media sonrisa. —Lo sé pero no puedo evitarlo. ¿Trajiste la ropa para lavarla?— Preguntó Romanoff limpiando sus lágrimas.

—Y a verlas.— Rogers se acercó a su chica y la abrazó.

—Yo estoy bien.— Nat dijo abrazándolo por la cintura.

—¿Y ella?— Preguntó el rubio.

—Jordan no ha dormido en meses, Steve. Creo que no lo hace desde lo que pasó. Se ve mal, creo que está peor que nosotros.— Le informó la rusa.

—¿Sabes? Vi una manda de ballenas viendo venía por el puente.— Dijo el Capitán para contentar a su novia.

—¿En el Hudson?— Preguntó ella.

—Hay menos barcos, agua más limpia.— Siguió diciendo Steve.

—Si estás tratando de que le vea el lado positivo a todo esto no me va a importar que seamos novia porque igual te golpearé con este sándwich de mantequilla de maní.— Natasha señaló el plato en la mesa.

—Lo siento, es un viejo hábito.— El rubio tomó una silla y se sentó junto a ella, de nuevo la abrazó.

En ese momento Jordan salió de la cocina con un plato de torta de chocolate, estaba en pijamas y con ojeras. —Hola, Steve.— Saludó ella, sentándose en un sofá cerca.

—Hola, ¿cómo estás?— Respondió Rogers.

—Mm, creo que peor que ayer.— Confesó la castaña.

Steve rompió el abrazo que tenía con Nat para hablarle a su hermana. —Debes hablar sobre lo que sientes, anda, somos tus amigos. Por favor.—

Jordan suspiró y se metió a la boca el último pedazo de pastel. —Esto apesta, Grant.— Habló ella cerrando los ojos un momento, al abrirlos de ellos empezaron a salir lágrimas. —Hoy es diez, hoy es su cumpleaños.— Jordan sollozo. —¡Hoy es su maldito cumpleaños!— Gritó la mujer y lanzó el plato con fuerza al piso partiéndolo en pedacitos.

Steve y Natasha se pusieron de pie, sorprendidos por la reacción de Jordan y por verla llorar, era la primera vez que lo hacia para luego tomar asiento en el mismo sofá donde estaba la ojiverde dejándola en el medio.

—Estoy harta de todo, me arrebataron a mis papás, luego a Sarah, llegó la guerra, después Hydra, más cosas, luego muchas más y terminamos con Thanos.— Jordan limpió sus lágrimas pero de nada le sirvió porque le salieron más —¿Qué más me van a quitar? ¿Qué más debo hacer para que me dejen en paz?— La castaña trato de respirar y se puso de pie al no poder. —Me estoy ahogando, no entiendo porque cada vez que estoy apunto de cruzar la meta, algo viene y le coloca más kilómetros a la carrera. Seguro por venir aquí es que está pasando esto, yo debí quedarme allá arriba y nada de esto estuviese pasando, todo estaría en orden. Pero mi empeño de tratar de controlar el destino lo arruinó, no se puede frenar el destino y si lo intentas sufres, ya lo aprendí. ¡¿Qué más quieren de mi?!— Volvió a gritar pero con dirección al techo.—

Nat le tomó la mano a su amiga y le dió un apretón. —No te mereces nada de esto, eres un ángel.—

—Jordy, ella tiene razón. Nada de esto fue provocado por ti, ¿ok? Nada de esto es tu culpa.— Steve estuvo de acuerdo con la pelirroja.

—¿Ah no? Y si es así, ¿dónde está mi recompensa? ¿Dónde está mi soldado?— Jordan los miró con más lágrimas. —Esto es demasiado, he estado más cerca de la muerte que cualquier persona y en esos momentos no quería irme, pero ahora solo deseo no volver a despertar.— La castaña soltó unos hipidos y se lanzó a los brazos se su hermano, aferrándose a ellos. —Lo necesito, Steve. Necesito a Bucky, por mucho tiempo en aquellos años lo negué pero era verdad todo, lo amaba, lo amo y lo necesito.—

El capitán abrazó fuerte a su hermana, también había empezado a llorar y ni cuenta se dió. La misma acción la imitó Romanoff, haciendo un sándwich de Jordan.

—Yo solía no tener nada y ahora tengo esto, esta familia y este trabajo donde soy mejor persona. Y aunque se hayan ido, sigo tratando de serlo.— Dijo Natasha acariciando la espalda de Jordan. —Debes ser fuerte, hermosa.—

—Ya lo he sido por mucho tiempo, Nat.— Jordan suspiró y limpió sus lágrimas. —Ustedes dos necesitan seguir, aprovechen que están juntos, vivan y amense.—

Un pitido se escuchó y Nat movió su mano para hacer aparecer una imagen de la entrada, era Ant-man

—Oh, hola. ¿Hay alguien en casa? Es Scott Lang, nos conocimos unos años atrás en el aeropuerto, en Alemania. Yo fue el tipo que se hizo súper grande, tenía mascara, no me reconocerían.— Dijo el hombre.

—¿Es una grabación?— Preguntó Steve aún con los brazos envolviendo a Jordan.

—No, está afuera.— Dijo Nat esperanzada.

Jordan salió corriendo a abrirle la puerta al hombre, pensó que habían vuelto todos porque Scott estaba en la lista de esfumados. Algo bueno se acercaba, ella estaba segura.

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Holaaaaa!

Segundo capitulo del día, planeaba hacer un maratón pero se me fue la luz y bueno, una desgracia. Seguirá siendo la semana de James 'Bucky' Barnes así que si publicaré varias veces al día espero yo. Aquí tienen su capítulo, lloré escribiendo, así que espero que les guste.

Los quiero mucho aunque no los conozca. Bye.

#Angie. ❤