DARK QUEEN ||Bucky Barnes||

Capítulo. 10

Te amo.

Los comandos aulladores se encontraban alrededor de una fogata, descansando para que al día siguiente en la última misión todo saliera según lo planeado. El equipo era conocido también por su sentido del humor, eran un dolor de cabeza en realidad.

—¡Steve!— Gritó Jordan.

—¿Si, Jordan?— responde el Capitán.

La teniente sonríe con picardía, sentándose junto a él. —¿Ya besaste a Carter?—

—¿Primero Bucky y ahora tú? ¿No saben que más preguntar?

—Capitán, para serle sincero es un tema que a todos nos interesa.— Respondió Dugan.

Steven rodó los ojos. Andaba terriblemente odioso.

Montgomery ve a todos y decide hablar. —¡Taylor! ¿Qué sientes por Barnes?—

Jordan se ahogó con su saliva y empezó a toser.

James gira la mirada hacia ella y luego a la fogata, siguió comiendo tranquilo.

—Bien. Ya que nos estamos confesando lo diré, si, me gusta James desde que tenemos 10 años.— Confesó la castaña orgullosa, con algunos tragos encima.

Steve alza los brazos en victoria. —¡Lo sabia! Por fin lo ha dicho.—

Los otros hombres hace sonidos fastidiando al Sargento.

—¡Barnes, respóndele!— Jim lo anima.

Bucky mira a Jordan. —¿Estás ebria?—

Jordan niega y se levanta para ir a dar un paseo por ahí cerca, pensó que quizás el no sentía lo mismo.

Dernier ve a Barnes mal. —Acabas de meter la pata.—

Bucky salió corriendo tras Jordan, si debían decir lo que sentían por el otro, no sería con público.

Steve y los otros hacen apuestas con respecto a sus compañeros.

—¡Teniente!— James alza la voz y la toma del brazo para pegarla a su pecho, a su vez que estampa sus labios con los de ella en un apasionado beso.

Jordan tonta por el alcohol y la forma tan abrupta en la que James la besaba, decide dajarse llevar, jugando con el cabello de él entre sus dedos y tirando de algunos mechones. El Sargento hace caminar a la muchacha un poco, para apoyarla en un árbol y seguir besándola.

—James.— Jadeó Jordan en medio del beso. Él la toma de los muslos y la carga, haciéndola enredar las piernas en su cintura. —Yo... A mi también me gustas desde que teníamos 10 años.—

Jordan le sonríe y vuelve a unir sus labios iniciando nuevamente un beso que poco a poco subía de tono.

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Por otro lado...

El equipo empezó a escuchar sonidos extraños, como gemidos y decidieron aullar como lobos. Siempre hacia eso cada vez que los otros dos se daban amor, de allí el nombre de los Comandos Aulladores.

—Afortunados los que disfrutan en tiempos de guerra.— Dum Dum alza su vaso junto a los demás.

—¿Están peleando?— Pregunta Steve, inocente de todo.

—Si, eso hacen.— Ríe Montgomery burlándose del capitán, y sigue aullando junto a Morita.

—Capitán, debe salir más seguido.— Dijo Gabe, palmeando el hombro de Steve.

Inmediatamente Steve entendió lo que pasaba y no podía creer lo sinvergüenzas que eran sus amigos de toda la vida.

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A la mañana siguiente, todos estaban esperando el tren donde sola viajaba. La última misión.

Steve se acerca a sus amigos sonriendo.

—¿Recuerdan la vez que los llevé a un teleférico?— Preguntó James.

—Si, casi vómito.— Responde el Capitán.

—¿Está es tu venganza, Steve?—

—No, Bucky, no lo es.— Rió el Capitán.

Jordan les besa la mejilla a cada uno. —Yo creo que si es venganza.—

Cuando el tren se acercaba cada persona del equipo se deslizó por la cuerda que previamente colocaron, cayendo en el techo del tren y entrando en él. Hombres de Hydra empezaron a disparar con armas cargadas con el poder del tesseracto y el comando a contraatacar.

Steve y Jordan quedaron separados del vagón donde James estaba, junto con el enemigo a los cuales el castaño le disparó. Cuando Steve logra abrir la puerta un hombre dispara hacia ellos, Bucky los esquivo el escudo del Capitán, haciendo que un rayo le abra un gran orificio al vagón del tren, el hombre volvió a disparar enviando a James fuera del vagón por el impacto del rayo.

—¡Bucky!— Jordan se asoma por el orificio y estira su mano hacia James para tratar de agarrarlo y salvarlo de esa caída. —Vamos, James. Te amo, aguanta un poco.—

Steve acaba con el tipo que les estaba disparando justo en el momento que la barra donde James estaba sostenido se cae y junto a ella, Bucky.

—¡James!— Se escuchó el grito de Jordan y él de Bucky mientras caía.

—Jordan, ven.— Steve la aleja del borde, igual de afligido que ella.

—Tenemos que buscarlo, Steve. Tenemos que buscarlo.— Dice desesperada la ojiverde. —No puede estar muerto aún, vamos, hay tiempo para salvarlo.—

Steve niega. —Ya no hay nada que hacer, Jordan.—

Taylor se alejó de Steve molesta y bajó del tren cuando este se detuvo en un lugar seguro, estaba triste pero no lloraba, no querían que otras la vieran débil, jamás se había permitido mostrar sus sentimientos por tal razón se tardó tanto en aceptar que quería a Barnes. La muerte del amor de su vida sería difícil de aceptar y más aún después de decirle que lo amaba por fin, ella pudo haberlo salvado pero el destino no quiso eso.