Prólogo.

1K 43 13
                                    

Sarella.

Acomode el mechón de mi cabello tras mi oreja y suspiré rendida. Después de estar pintando cerca de tres horas, la pintura no terminaba de convencerme, debía tenerla lista lo antes posible, mi exposición era dentro de una semana y debía tener todo listo, había trabajado mucho en ello. Mi frustración fue interrumpida por mi teléfono, maldije y me acerqué a responder.

—¿Aló? —solté el pincel que tenía en la mano libre para colocarlo en el pequeño recipiente con agua que tenía a mi derecha y me senté en mi cómodo sofá.

Bebé ¿Estás ocupada? —esa voz solo podía significar una cosa, Nicole estaba a punto de pedirme un favor.

Ay no, ¿Otra vez te vas a aprovechar que te conozco desde los tres años para pedirme algún estúpido favor? —reí al escuchar su queja.

¡No! Soy tu mejor amiga, necesito tu ayuda, es una urgencia femenina —susurró a través de la línea telefónica.

—Uh, eso no se oye bien —las mujeres tenemos una especie de código, sabemos que la frase emergencia femenina obliga prácticamente a no negarnos ante cualquier ayuda. —¿Qué necesitas?

Me vino la regla y estoy manchada en el baño, no saldré así —ahogó un grito a lo que yo reí. —¿Podrías ir a mi casa y traerme algo de ropa limpia?

—Nicole, ¿Por qué no se lo pides al idiota de tu novio? —renegué con ella.

Louis está aquí en la empresa en una reunión, en la cual yo debería de estar pero no estaré y seré despedida porque la torpe de mi mejor amiga no puede ir a...

—Bien, bien —le interrumpí el drama. —Llegó en treinta minutos, me apuraré.

¡Te amo, eres la mejor! Rápido, mujer.

—¡Yo no te amo! —corté y me levanté rápidamente para correr hacia la salida. 

Tomé mi teléfono junto con las llaves de mi auto y salí corriendo. No tuve tiempo de cambiarme pero estos jeans rotos y este sweater rosado bebé junto a mis zapatillas blancas no se veían mal, sin mencionar que iré a la constructora más prestigiosa de Nueva York,  en ese caso, sí, estoy hecha un desastre.

Llegué a casa de Nicole y abrí con la llave que ella me había dado en caso de emergencia, mi mejor amiga tenía una llave de mi casa también. Tomé su ropa y la metí en un pequeño bolso de los que ella ama, esta chica colecciona demasiados, toallas higiénicas, tampones y unas pastillas. 

Maneje rápidamente pero el estúpido tráfico no ayudaba para nada, Ed Sheeran sonaba de fondo, Shape of you me encantaba, mientras trataba de relajarme, el tráfico fue avanzando. Al llegar al gran edificio, miré hacia arriba y me intimidé. Debía subir a los últimos pisos, carajo. Esperé el ascensor pero todos estaban repletos, pasaron algunos minutos y se abrió uno totalmente vacío, ingresé rápidamente pero por casualidad choqué con alguien haciendo que cayera y nos golpeáramos.

—¡Mierda! —dije mirándolo. —Ten más cuidado, idiota —me miró con sorpresa alzando una ceja.

—Lo siento mucho, tengo prisa. 

—Yo igual y no derribo a las personas —mire de arriba a abajo, sonreí maliciosamente e ingresé al ascensor cerrándole la puerta en la cara.

Espera el próximo, cariño.

¡Hola a todxs!
Les presento a mi nuevo bebé ♡ 

Espero les guste ♡ se aceptan críticas, ideas y comentarios pero con amor ji ♡

Les mando un fuerte abrazo ♡

Clau ♡

Bohemian in New York [H.S]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora