INEFABLE✔️

✮Capítulo 21

Decisiones.

En el piso número ocho del Cedars-Sinai Medical Center, La tensión se manifiesta en el aire, llevamos mas de cinco horas en sala de espera, sin recibir alguna noticia de los doctores.

No logre ver a mi papá ni a Max, luego del accidente, varias ambulancias llegaron al lugar y no hubo tiempo de siquiera acercarme a ellos, eso y el hecho de que Fox no me dejó bajar del auto.

Muero de frio a pesar de tener el suéter de Liam en mis hombros, mi frío es una mezcla de temor y desespero por no tener noticias. En este momento no me interesa, ni mi reputación, ni el odio que recibo por parte del público, lo único que me importa es el bienestar de mi papá y de Maximilian aunque me pese aceptarlo.

Respiro profundo, mientras mi pierna derecha sube y baja temblando con ansiedad, Joe y Liam están sentados frente a mi ambos bebiendo un café y hablando bajo, Lydia apenas e iba llegando de su viaje y corrió aquí en cuanto se entero de lo sucedido.

Varias enfermeras pasan de lado a lado sin siquiera decirnos palabra alguna. Unas disimulan más que otras, con sus miradas de decepción hacia mi.

Me levanto de mi asiento y camino a paso firme hasta la recepción. Fox se levanta de su asiento y me mira atento.

—Llevamos cuatro horas aquí. Necesito que me de noticias de Peter Banks y Maximilian Forbes. —exijo en tono serio.

—Señorita Banks, el doctor sigue en cirugía, le prometo que en cuanto termine él mismo le dará noticias.

—No. Le exijo que me diga quien está en cirugía y porque

—Uno de los dos llegó muy grave, él otro está mejor, pero aún Inconsciente.

—¿Mejor pero Inconsciente? ¿Se está escuchando? —Liam se acerca y acomoda sus manos en mis hombros

—Leen enojándonos no solucionaremos nada.

—Pagamos una millonada por estar aquí lo justo es que me den noticias de ambos. —digo furiosa mirando a la enfermera.

—Aileen Katherine Banks Andersson. —me llama mi nana en tono serio. —Ven aquí ahora.

—Nana no lo entiende…

—Claro que lo entiendo cariño, pero te aseguro que lo mejor es tener paciencia y estar calmados. —Toma mi mano y me lleva de vuelta al sofá blanco.

—¿Llamaste a Lucian? —preguntó mirando a Liam

—Si

—¿Por qué ese empeño de incluir a ese señor en esto? Este asunto es familiar.

—Nana, la gente con solo oír el apellido Martinelli se arroja a sus pies. Si alguien puede ayudarme es él.

«Eso y el hecho de que su presencia me hace sentir aún más acompañada»

Sollozo presa de preocupación, el abrazo de mi nana me reconforta un poco, no se que haría si no la tuviera a mi lado, si alguien merece el título de mi madre es ella y no la maldita de Victoria a quien ahora detesto mas.

—Liam, puedes ir por más café —Dice amable Joe.

El hombre de casi dos metros asiente y se retira dejándonos solas. Joe peina mi cabello hacia atrás y me mira, solo tengo ánimos de mirar el rejo de plata en mi muñeca y mecer de nuevo mi pierna con impaciencia.

«¿Qué me dirás ahora, Joe?»

—¿Por qué no me dijiste lo de tu madre y Maximilian? —Pregunta sin titubeos.