INEFABLE✔️

✮Capítulo 7

Reina y Muerte.

Demodiv

Soy el segundo mejor asesino en el mundo, parte importante de una organización  privada con un solo fin, darle su merecido a los que creen que no existe la ley. Me enseñaron que los problemas se acaban de raíz, no creo en la redención ni el arrepentimiento. Una vez se hace acaba con el primer objetivo lo demás es pan comido.

Mas cuando el primer blanco fue por una venganza personal. Entrene toda mi vida, siempre con un solo objetivo, ser el mejor, no tener fallas. Pero caí en lo único que nadie puede controlar, el hechizo de una de mis presas, lo irónico de la vida, es que ella ni siquiera estaba planeada en mi camino. 

Mi objetivo era simple, no se comparaba con mis otros trabajos, donde primero debía acabar con mas de 20 hombres antes de llegar a mi objetivo.

Mi blanco estaba en una cuidad aburrida, sin seguridad y lleno de confianza, solo debía entrar a su casa como siempre y meterle un tiro en la cabeza, sin tortura, sin errores, sin drama, una bala que acabara con todo. Pero no contaba con ese pequeño estorbo de ojos azules que me encontré esa noche.

Dos años atrás, entre a la oficina donde supuestamente me encontraría con mi blanco, quise verle la cara antes de morir, quería que lo ultimo que pasara por su cabeza era mi imagen acabandolo.

Aun recuerdo sus ojos llenos de miedo, me arrojo una manta ridícula en la cara e intento correr, justo hay cometí mi primera falta, tocarla. Eso me descontrolo, le permití que me viera, si por algo soy reconocido es por desaparecer sin dejar rastro, pero con aquel cachorrito indefenso no. 

Esa noche no solo falle con mi objetivo, sino también conocí la palabra descontrol, algo que hasta entonces no existía en mi vocabulario. Lo que me paso con esa maldita niña, no me deja dormir, no me deja respirar, no me deja pensar, no nada. 

Deje la OPW de lado para seguirle el paso, parezco un maldito lobo hambriento e irracional, que llego a Estados Unidos, con un solo objetivo, descubrir el significado de esta necesidad que me corroe el alma desde hace ya dos años. 

No se como lo he conseguido, pero he mantenido la calma durante todo este tiempo, asechandola de lejos, salvo la vez que entre  a su cuarto, esta vez en su casa aquí en Los Ángeles. Me pregunto mi nombre y se lo dije, segundo gran error, mis presas no deben saberlo nunca. 

Pero lo que realmente detono mi desespero hacia ella, fue lo que sucedió hace una semana. Tocarla, verla ofreciendo su cuerpo para mi, para luego regalarme ese exquisito orgasmo, que me dejo hambriento de mas. 

—Demodiv, te estoy hablando.

Suelta el viejo ruso a mi lado. Ni siquiera le he podido prestar la mínima atención a este asunto porque la maldita niña no se sale de mi cabeza. 

—¿Entendieron el trabajo?

Pregunta el tipo con traje de gala frente a nosotros.

—Es muy arriesgado, nuestra organización sobresale por ser sigilosos.

—Creí que eran los mejores. Este tipo se metió con mi negocio y necesito una represaría publicas, y que mejor que hacerlo en la premiación.  

¿La premiación? Eso si logra llamar mi atención, espero que Nikolay no acepte, no es bueno ponernos en evidencia. Hollywood ha sido el centro mas grande de negocios ilícitos donde he estado. A tal punto que hay una agencia de prostitución, engañan a mujeres inocentes, para atraparlas y que cumplan los deseos de esta manada de cerdos, de los cuales me he llevado bastantes por delante.