✮Capítulo 31

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Conociendo a Seth.






Tomo mi bata de baño y me la pongo. Camino a paso firme llevándome a Seth de la mano lejos de mi dormitorio, por su expresión lo último que quiero es un escándalo en la madrugada.

Camina conmigo, pero parece una estatua debido a lo tenso que está. Salimos al balcón y cierro tras nosotros las puertas de cristal, así no despertaremos a los demás adentro.

—¡¿Que puta mierda hace ese tipo aquí?! —me reclama lleno de cólera.

—No me subas la voz. —advierto.

—¡Que putas hace Axel aquí! —repite tomándome de la muñeca.

Me alejo bruscamente y me cruzo de brazos Me enoja que ahora se crea con derechos sobre mí y más que se crea con derechos de tocarme cuando esta tan enojado como aparenta.

—Baja la voz y a mí me hablas bonito. —exijo.

—¿Es tu amante? —Indaga molesto.

—¿Mi amante? —rio por lo bajo —No es un amante si no tengo pareja.

—Me tienes a mí. —gruñe.

—No. Tu eres de...

—Me metí con America porque Fox lo exigió para salvar tu carrera. Y también por protegerla de este mundo de corruptos.

Se adelanta dándome explicaciones de lo que iba a decir. Me deja desarmada ante él, aunque eso no explica que la siga engañando conmigo.

—¿Se supone que debo aceptar esa explicación? Sea como sea es tu pareja

—Por favor mi Adhara. No la subestimes, no me salgas con cuentos de que crees que ella no se da cuenta de lo que pasa entre nosotros dos. Yo no tengo una relación sentimental real con ella, estamos en Hollywood, la mayoría de las relacione se dan por conveniencia.

—Asi que ella sabe que cogemos

—Ella sabe lo que siento por ti. —confiesa.

Me aterra preguntar qué es lo que siente por mí, y si la respuesta no es lo que espero y termino decepcionada. No estoy lista mentalmente para enfrentarme a su sinceridad en cuanto a mí. No me queda más remedio que dejar de lado por ahora este tema.

—Ya.

Rueda los ojos irritado. Siempre le molesta cuando soy monosílaba con él. Se pasa la mano por el cabello desesperado y me mira.

—America es inocente y necesitaba protección aquí. Ahora, se amable y dime que hace Axel aquí —Pregunta aparentando los dientes.

—¿Dormir o no lo viste?

—Irresponsable. —comenta— Ni siquiera lo conoces. No sabes nada de él.

—¿Y tú sí? Por qué hasta donde dijeron ustedes dos apenas y se conocían.

Me mira unos minutos, pero no habla, otra cosa más que me altera de él, cuando se vuelve Seth el mudo.

—Estaba ebrio y no lo deje ir a casa. —explicó al no obtener respuesta de su parte.

—¡Aléjate de él! —demanda.

—¿Por qué? —alzo una ceja— Dame una razón válida.

—Es un perdedor.

Niego y frunzo el ceño. ¿Enserio dio esa excusa tan inmadura? Me acomodo en el sillón y cruzo las piernas.

—El no vino a Los Ángeles por casualidad —continúa— Vino buscando algo en específico y tú se lo estás facilitando.

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